¡Problemáticos! [USDP #1] © [EDITANDO]

CASTIGO

Luego de que acepté le dije a los chicos que no buscaría un vestido para el estúpido baile de mierda y Brad dijo que no me preocupara por ello, que ellos escogerían uno para mi... Y eso si que me tiene preocupada.

Pero, apartando eso, creo que olvidé mencionar qué pasó el día que tuve que hacer mi castigo en la biblioteca... Junto a las ratas de biblioteca y unos cuantos idiotas que también se habían metido en problemas por tratar de saltarse una clase y cosas por el estilo.

Allí me encontré con Jesse, la empollona que me advirtió que no me juntara con los chicos el primer día, supe su nombre porque el profesor lamentablemente hizo que me sentara a su lado.

No crean que ella era una problemática, claro que no, ella era otra rata de biblioteca mas.

Fue algo así...

FLASHBACK:

- Nicolle, señorita Rush. -el profesor Cedric llamó mi atención, creo que vio que estaba quedándome sobre un libro que me había dado unos momentos antes para que "expandiera mis conocimientos" según él.

- ¿Si, señor Cedric? -lo miré somnolienta y él me llamó, haciendo que me levantara de mi puesto. Caminé lentamente hasta donde él estaba y bostecé.

- Vaya y siéntese con la señorita Wallace, la que esta allí, ella es ayudante en la biblioteca, usted la ayudara a acomodar los libros. Vaya. -me apuntó a una castaña, la reconocí por sus grandes gafas, era la chica que me advertía no juntarme con el trio de idiotas que ahora viven conmigo.

Caminé fastidiada hasta la castaña la cual se asustó cuando llegué a su lado, bajo la mirada de inmediato.

- Cedric me dijo que te ayudara a poner los libros. -la miré ligeramente hacia abajo, era unos centímetros mas baja que yo. Wallace no hizo contacto con mis ojos, suspiré y rodé los míos.- Puedes mirarme, Wallace, no te haré nada.

La castaña me miró a los ojos y acomodó sus grandes gafas, la chica era linda, pero muy desarreglada.

- Está bien, ¿puedes tú llevar el carrito y yo los acomodo? -murmuró, apuntando el carro donde había una gran cantidad de libros.

- Sep, yo los llevo. Soy Nicky, ¿Cómo te llamas? -le pregunté y tomé el carro, empujándolo mientras ella ponía los libros en cada estate.

- Jesse, y sé quién eres, muchos comentan sobre ti andando con los tres mas populares y matones. -ella suelta una pequeña risa y luego me mira algo asustada.- No les digas que dije eso.

Suspiré rodando una vez mas mis ojos, pero luego me causó algo de gracia, así que reí con ella.

- No les diré, ellos no van a comerte. -río una vez mas y Jesse me sonríe a medias, seguimos luego en silencio con lo mismo por horas y horas. Jesse aprendió que no debe "temerme" a menos que me haga algo, lo cual dudo completamente. Y yo aprendí que estar en la biblioteca por 5 horas era la cosa mas aburrida de todo el mundo. Pero que decir, Jesse era una buena chica, me sacó una que otra risa y dijo que los tres idiotas, los matones, como ella dice, se formaron desde el primer día que pusieron un pie en el instituto. Desde entonces tienen esa reputación y son completamente inseparables.

Ese día le pedí a los chicos que se fueran a casa ya que no qería que se quedaran esperando todo el tiempo hasta que saliera del castigo, or lo que les dije que me iría caminando.

Iba saliendo del terreno del instituto cuando un auto con la pintura del parachoques gastada se paró a mi lado, era Jesse.

- ¿Necesitas un aventón? -preguntó muy suavemente y diría que casi con miedo. Asentí y subí al lado del copiloto.

- Gracias, Jess. -le dije y ella sonrió.

- Nunca nadie me había llamado así, es lindo. -reí y le di las indicaciones, en pocos minutos estábamos en casa.- Wow, ¿esta es tu casa?

Jesse miró por la ventana mientras yo bajaba y caminaba rápido hasta ponerme de su lado.

- Sep, esta es. -reí ante su reacción, sus ojos estaban muy ampliados y su boca tenía una mueca de asombro.- ¿Quieres pasar? -esto era muy impropio para mi, nunca había tenido tanta cercanía con una chica, creo que es mas que nada por nuestras notorias diferencias. Seh, soy rara.

- ¿Los chicos están allí dentro? -ella hizo una mueca y yo asentí.- Oh... Entonces no, otro día.

- Está bien... Entonces nos vemos mañana, creo. No tenemos clases juntas, ¿o si?

- Tenemos la mayoría de las clases juntas, supongo que no me ves porque siempre estas atrás. -ella rió bajando la mirada y yo trato de hacer memoria de mis clases, realmente nunca la veo en ellas.

- Oh, bueno... Entonces mañana si que nos vemos. -reí apartándome del auto y la saludé con la mano, Jesse se alejó rápidamente y yo entre. Los chicos estaban casi pegados en la play.

Hombres.

FIN FLASHBACK.

Desde entonces cada vez que veo a Jesse la saludo con mi mano y ella tímidamente también lo hace. Noté que les tiene miedo a los monos que siempre me acompañan.

[***]

Mañana era el baile y no tenía ni una sola gana de ir, de hecho, no quería que fuera mañana y a la vez si. ¿Por qué? Fácil. Pasado el baile los chicos serían mis esclavos... Pero también pasado el baile... Debía entrar a la mierda de porristas.

- Ángel... Ya tenemos tu vestido. -Brad y los chicos entraron a mi habitaación, eran las 10 de la noche y exactamente en 24 horas el baile empezaba.

- Quiero verlo. -me senté sobre mi cama, tenia puesta solo mi ropa interior, me acostumbre a las estúpidas miradas de los chicos y ellos se acostumbraron a mi.

Brad abrió la caja donde venía el vestido y Josh lo sacó, mostrándomelo.

- Por ningún motivo... No. No me pondré eso. -negué rápidamente mientras los chicos sonreían ante el vestido que tendría que usar... Si es que se le pudiera llamar vestido.

¡Esa mierda con suerte cubriría la mitad de mi cuerpo!