«Locura en Las Vegas»

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—Pues lo primero que haremos será ir por unos traguitos, ¡y luego a un club de strippers! —chilló Kendall acompañada de las demás.

—¿Qué? No... dije que sin strippers.

—¡Vamos Leah! —exclamó Zoey emocionada. No la había visto tan así nunca acompañada de las chicas que ahora también eran mis amigas. Ken, Cass y Megan. Le costaba un poco sociabilizar con ellas, pero ya se estaba divirtiendo, y aun no empezábamos.

—Es que no sé... Justin...

—¡Eh! —dijo Ken. —Dijimos que sin nombrarlos esta noche.

—Oye, ¿y los juegos? —preguntó Zoey.

—¿Qué juegos? —preguntó Ken.

—¡Los retos! —exclamó Zoey. —¿Jamás han escuchado de eso?

Megan, Kendall y yo nos miramos.

—Vale Ken, pásame una hoja y un lápiz.

Zoey comenzó a escribir, hasta tener la hoja de cuaderno casi llena, y nos sonrió desde el asiento del copiloto.

—Ya vamos a llegar. —anunció el conductor. Asentimos.

—El juego trata de hacer retos en la calle. Por ejemplo, si el reto dice que hay que conseguir el bóxer de alguien, pues hay que hacerlo. ¿Comprenden?

—¡Si! —chilló Ken. —Hay que hacerlo. Me gusta la idea.

—Llegamos señoritas. —El conductor paró enfrente de un inmenso e iluminado bar llamado pecado, y nos sonrió.

—¡Gracias! —dijimos al unísono.

—Que disfruten su noche. Y bienvenidas a Las Vegas.

—¡Woooooooooooo!

Bueno, la jerga había comenzado.

Lo primero que hicimos fue entrar al bar como las putas dueñas del mundo. Nos sentamos en una esquina a beber y a beber.

—¿Qué creen que estén haciendo los chicos? —preguntó Cass de repente.

—¿Piensas en Ashton? —pregunté de vuelta, con una sonrisa pícara. El efecto del alcohol se hacía presente en mi sistema.

—¡Shh! —exclamó Kendall.

—¿Y porque a ella no le dijiste nada? —reclamé.

—Porque ella dijo chicos, y tu nombraste a Ashton.

—Ay Ken. —gemí.

—Tal vez estén en algún bar. —dijo Megan. Zoey levantó la mano, haciéndole señas a uno de los mozos.

—Otro mojito. —pidió.

—¡Adam me está llamando! —exclamó Megan observando su teléfono.

—¡No contestes!

—¡Contesta! —dije. —Quiero oír que es lo que dicen.

¡Wooooooooo! ¡Viva las Vegaaaaaaas! ¡¿Lo ven?! ¡Es mi puto amigo y se casará mañana!

Era una mezcla entre las voces de Gavin, Adam, y Damon.

¡Quiero mi puto tigre! —Ese definitivamente, era Ashton. Luego comenzaron a oírse más voces. De chicas.

—¡Malditos cabrones! —me indigné.

¿Quién es el prometido?

—¡Él! —exclamaron los chicos.

BANG ll: Explosion of love.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora