«Blake Desmond»

9.3K 433 47
                                    

Ocho.

El plan se dividiría en tres etapas.

-Conocer a Blake Desmond.

-Entrar en su casa.

-Robarle a su padre.

Blake Desmond era mi objetivo. Técnicamente, iba a hacerme su amiga para que los chicos pudieran robarle a su padre, Richad Desmond, el tipo más rico de toda la isla. Y un narcotraficante, por cierto.Blake Desmond probablemente era el chico más mimado del mundo. Los chicos ya habían conseguidos fotos de él y de toda su familia. Planos de sus casas dentro de la isla, y solo faltaba el contacto con él. Mi contacto. Ahora, estaba encerrada en un auto con Adam y Justin y Kendall dentro. Damon y Megan estaban consiguiendo más información. 

 —¿Tienes lo que vas a hacer, cierto? —Me preguntó Adam mirando como Blake Desmond se bajaba de su deportivo azul, después de estacionarlo a tres autos de nosotros, frente a la playa. 

—Si. —Sonreí. —Hola, soy Leah y me haré tu amiga para que mis amigos le roben a tu padre. ¿Puedo ir a tu casa? 

Kendall rompió a reir, y Adam con Justin rodaron los ojos. Justin me tomo el rostro entre sus manos. Ambos estábamos sentados atrás, Adam se conductor y Ken a su lado, en el copiloto. 

—Muñeca, para empezar, ahora te llamas Jessica.

—Que nombre tan feo. —Dije riendo.

—¿No que tu tía se llama Jessica? —Me dijo Kendall.

—Sí, pero que sea mi tía no quita que su nombre sea feo. —Contesté. No me malinterpreten, adoraba a la tia Jess. Pero encontraba que Leah, era mucho más lindo que Jessica. Claramente este par de criminales no me dejarían echarlo a perder asi que se habían encargado de todo.

—Leah, concéntrate. —Me llamó Justin.

—Que. —Dije seria.

—Te llamas Jessica, y tu amiga Rebecca. —Dijo echándole un vistazo a Kendall. —Son turistas, y quieren que les enseñen la ciudad.

—Oh, gran conversación. —Comento Kendall.

—Coquetea si es necesario. —Me alentó Adam. Justin lo miró indignadamente.

—¿Qué? ¡No! Muñeca, tu no coquetearas con nadie.

—Kendall tu lígate a uno de sus amigos. —Intervino Adam de nuevo. Justin le pegó un manotazo en la cabeza.

—Cállate.

—Ah, si supieras lo que ha hecho Megan para ayudarme.

—Leah no es Megan. —Contestó Justin frustrado.

—Por suerte que no. —Se rió Adam.

—¿Saben? Kendall y yo ya deberíamos andar por ahí, para pillarlo. —Les reclamé.

—Bien vayan. Las mantendremos vigiladas. 

Ambas asentimos, y Kendall abrió su puerta. Justin me dio un pequeño beso en los labios y baje del auto. Kendall y yo nos fuimos del brazo. Blake, estaba sentado entre la arena, y una pequeña escalera de madera que ocupaban los turistas para bajar. El día estaba nublado pero sin embargo cálido. Tenía una botella de agua a su lado, y conversaba con su amigo que se fumaba un cigarrillo. Tenía que esperar a que se levantara, y chocaría con él, o algo asi. Kendall y yo nos sentamos unos metros más acá. En mi cuello, colgaba una cámara, como cualquier turista. Mi estúpido plan de chocar con el no funciono. Ya que el bastardo jamás se levantó de allí. Reía y reía junto a su amigo. Que por cierto parecía una chimenea de tanto botar humo. Bufé, y decidí que iría por un helado e intentaría cosa. Kendall y yo caminamos un poco más, pasando por detrás de ellos, -ya que nos daban la espalda- y compramos dos helado de bolita doble. Al pasar de vuelta, nos fuimos muy cerca de ellos, y boté una de mis bolas de helado en su hombro. Él se giró al instante. 

BANG ll: Explosion of love.Where stories live. Discover now