capítulo 17

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-Hoy será un día taaan largo y triste para la pequeño engendro.-dijo en voz baja helga mientras cepillaba su cabellera de forma hipnotizante.- pobrecita, me gustaría evitarle este sufrimiento...pero no puedo, esto tiene que ocurrir...por su bien...y para el bien de todos...todo tiene que seguir su curso, tal y cómo está establecido, tal y cómo el destino lo quiere...

                                  ...

Abrahel no podía sacarse de la mente la historia que helga le había contado el día anterior, esa princesa qué se había arrancado el corazón por la pérdida de su amado ¿qué pudo haber sentido? ¿Abrahel haría lo mismo en su lugar? En ese momento lo dudaba mucho, ella amaba infinitamente a lars, pero nunca haría algo cómo éso por él ¿porqué lo haría? Si lars nunca iba a dejarla...el lo había prometido, y algo era seguro, lars nunca le mentiría, era por éso que abrahel lo amaba tanto, a ése chico tan frio como el hielo, que nunca sonreía, pero por dentro tenía  unos sentimientos, un corazón tan cálidos...ese chico, su primer amor...

Abrahel se arregló lo más rápido que pudo y fue con lars...
  

                               ...
Lars caminaba por el bosque, ya que tenía un pésimo sentido de la orientación no encontraba el lugar dónde siempre se reunía con Abrahel, Aúnque lo más seguro es que la chica lo terminara encontrando, cómo siempre desde que se habían conocido, Lars caminó y caminó hasta qué escuchó una voz conocida que lo llamaba

-¿Abrahel?.-Dijo monotonamente el chico mientras se dirigía hacía el origen proveniente de la voz, cuándo de pronto, sintió una presencia trás de él

-Hola amigo.-dijo Satanás susurrandole en el oído a lars mientras soltaba su risita burlona que lo caracterizaba.- ¿me extrañaste?

-Satanás...¿que haces aquí? Si Abrahel te encuentra aquí...

-abrahel llegó aquí hace horas querido amigo, desgraciadamente cualquiera que pusiera un pie en éste lugar quedaría dormido de inmediato, excepto nosotros, claro.

-¿Porqué hiciste éso?.-preguntó lars sin expresión

-Muy simple, ya había hablado contigo de éste tema antes ¿no?
El olor de la muerte te persigue, mí querida hija esta enamorada de ti, y no habría problema sino fuera porque la dejarás muy pronto, así qué estaba pensando ¿porqué no ayudar a mi querido amigo lars? A aquél al que cuidé muy bien desde que su madre lo abandonó de la misma manera.-Satanás sonrió y se acercó a lars.-voy a ayudarte amigo, cómo ya te dije, eres muuuuy preciado para mí, y lo último que quiero es verte sufrir por dejar a mi nena sola, con un corazón latiendo de amor a una persona que no podrá seguir viendo...

-¿Qué vas a hacer Satanás?.-Preguntó de nuevo el chico, él de de desconocía él porqué Satanás estaba tan aferrado a ayudarlo con su pequeño "problema"

Satanás soltó una carcajada que hubiera estremecido a más de uno, pero lars no podía sentir, así que le fue indiferente

-Ya te lo había dicho ¿no? Es una sorpresa...así que vamos, ve a ver a abrahel...pero antes de que te vayas quiero preguntarte otra cosa ¿Abrahel sabe que me conoces? ¿le haz dicho algo sobre nosotros...sobre nuestra..."relación"?

-¿debería decirle?.-respondió lars fríamente

Satanás comenzó a reír...

-No, no debe de saberlo, así que nunca lo menciones ¿entendido?

-Sí.-respondió lars monótonamente

Lars se dio la media vuelta y caminó del lado contrario a Satanás, dándole la espalda, satanás esbozó una sonrisa macabra y dijo en voz baja:

-es una pena, pero...tienes que morir, lars...

En ese momento, Satanás atravesó a lars con sus manos, y lars se quedó en silencio, no soltó ni un grito de dolor...

-oh vamos lars, esto no es divertido si no te estás revolcando del dolor...tienes que sufrir, Aúnque sea un poco.-dijo satanás haciendo un pequeño berrinche, cómo si fuera un niño pequeño qué no tiene lo que quiere...

-Te diré algo, cómo soy muy buena persona...o demonio, seré amable contigo, ya qué estás a punto de morir; te quedan a lo mucho cinco minutos, así que te diré un secreto, me agradabas mucho, eras cómo un hijo para mí, muy preciado, muy útil pero cometiste un pequeñísimo error, te fijaste en mi hija, la espiabas desde el primer dia en que llegó a este lugar a leer, te enamoraste de ella a primera vista, Aúnque no tenías pensado en hablar con ella, y mirarla a lo lejos toda tu vida, amarla a la distancia, te encontraste por accidente con ella, y éso no te lo voy a perdonar nunca...
Es una pena, tener que matar a un demonio tan poderoso cómo tú, pero no me queda de otra, perdón...

Satanás soltó el cuerpo de lars y se fue del lugar inmediatamente, mientras que lars aún agonizaba, el chico sentía cómo su cuerpo poco a poco se volvía más y más caliente, era señal de qué estaba muriendo...

Y lo único que podía pensar era en ella, en abrahel, en su amada Abrahel, en su sonrisa, en su mirada...en su voz...

Una lágrima salió de sus ojos, y susurró, perdón...

Perdón por mentirte mi querida Abrahel...nisiquiera pudo decirlo, no tenia la fuerza suficiente para pronunciarlo...

Estaba muriendo...

Poco a poco sus ojos perdían su brillo...

Lars estaba muerto...no pudo cumplir su promesa de estar con abrahel para siempre, y éso era lo qué más lamentaba, aún más del no poder haber demostrado sus sentimientos hacia abrahel cómo el hubiera querido...

Más de lo qué lamentaba el haberla conocido...

La princesa del infiernoWhere stories live. Discover now