SR.Styles.

20:«Regresó»

-Quítate el sostén-dijo firmé y así lo hizo-preciosos-dijo al ver sus senos expuesto y los pezones  rosas endurecido.

-Debes hacer todo lo que te ordene entiende.

-Si.

-¿Si que?

-Si, Sr.Styles.

-Desliza tu mano derecha por tu vientre suavemente-dijo y la lujuria se apoderó de ellos-ahora acuna tu senos en la mano¡Eso es, no pareces! Imagina que son mis manos y masajealo-ella cerró los ojos un instante y al abrirlo vio que la mirada de él era fuego puro.

-No puedo seguir-protestó ella lo deseaba con cada fibra de su piel.

-Me encanta lo que haces, sigue no quiero que pareces muñeca. Pellizca tus pezones-ordenó y  ella dudo pero igual lo hizo y ahogó un gemido-desliza tu mano hasta tu centro y acariciate para mi-y así lo hizo.

Se dio media vuelta y quito sus bragas dejando  expuesto su trasero para él, se inclinó un poco para quitar sus zapatos y lo escuchó maldecir.

-No hagas eso-dijo Harry y su voz sonó ronca más de lo normal. Los ojos de él se posaron en su feminidad.

-Lo siento.

-ven acercarte siéntate en el borde de la bañera y agárrate fuerte.

-¡Oh!- Murmuró cuando sintió su lengua justo allí.

-No te muevas-le reprocho.

Ambos estaban al borde y él lo sabía.

La  tomó en brazos y la sujetó de la cintura ella envolvió sus piernas en sus caderas y el se coloco debajo del chorro de agua de la ducha y la penetró lentamente  a medida que lo hacía placentero , sus movimientos fueron tomando más velocidad pero con cuidado para evitar que ambos cayeran ya que la bañera estaba resbalosa y estaban de pié.

-¡oh! ¡si nena!.

-Styles...

Ambos llegaron al clímax de placer  y sus cuerpo temblaron.

Una vez bañados y cambiados , se dispusieron a cenar.Ahora se hallaban sentados en el sofá y ella acurrucada en su pecho debajo de la mantas , pues la noche se había tornado fría.

-Ahora regreso-dijo él incorporándose.

Él subió las escaleras de dos en dos.Ella recostó su cabeza el espaldar del mueble y se concentró en la película.

Él regreso y tomo asiento a su lado.

-Toma-dijo extendiendo le una cajita.

-¿Que es?

-Abrela y lo sabrás.

Tomó la cajita en manos y al abrirla vio una hermoso brazalete de diamantes.

-No puedo aceptarlo.

-Nada de eso, lo compre especialmente para ti, en cuanto  Iovi me lo imagine en ti.

-Pero es una joya muy cara.

-No quedaré en la quiebra por haberla comprado-dijo divertido-permíteme colocarte la, cada vez que la vea quiero que recuerde que  yo soy tu dueño y que tu eres mía.

-Gracias, no sabes cuanto te quie-pero se  paró en seco antes de pronunciar   frase.

El la miro sospechoso.

-¿Me que?

-Te quiero agradecer, nunca me habían regalado una joya como está.

-Pues acostumbrate porque te dare solo lo mejor.

"Lo único que quiero es a ti" Penso.

Continuaron viendo la película hasta que terminó.

-Me toca elegir a mi-dijo ella.

-Bien, iré al baño en lo que la pones.

En cuanto Harry desapareció su celular vibró, Liz lo vio y lo tomó en mano insegura de qué hacer pero al final, abrió el mensaje que acababa de llegar y su felicidad se esfumó.

Gracias por la increíble semana Harry ♥♥♥.

Decía el mensaje.

Ella buscó su lista de contactos y vio que más del 70% de su contacto  eran de mujeres.

Justo cuando estaba colocando el celular el el sitio en que lo dejo  Harry apareció y se lo arrebató de la mano.

-Que Mierda esta haciendo-gruñón furioso.

-sólo quería ver la hora -mintió.

-Tu crees que soy estúpido, no vuelvas a ponerle la manos a mi cosa, ¡odio que lo hagan!.No tienes derecho revisar mi celular ni nada de mi pertenencia-dijo esta vez gritando- entendido.

-Si-Susurro.

Sus ojos  se cristalizaron y contuvo las lágrimas.

-Ahora lárgate, sal de aquí.

-iba a subir las escaleras pero él la detuvo tomándola del brazo.

-Te quiero fuera de mi departamento.

-Pero no puedo salir así-protestó con voz quebrada. Tenía puesto un boxer de él y una blusa de tirantes, él tomó la mantenía del mueble y  se la tiro.

-Tapate con eso-sacó la cartera de su bolsillo y tomó un paquete de dinero y se lo aventó a la cara haciendo que el dinero se esparciera  en el piso.

Ella se quedó sin habla.

-Toma un taxi, ya no te necesito por hoy-y sin más que decir subió las escaleras y la dejo alli sollozando ,la había tratado como una pura barata.

Liz se alegró de ver que su cartera estaba en uno de los muebles pequeño, de ninguna manera iba aceptar ese dinero que le había aventado antes preferiría irse caminando por muy lejos que estuviera la pensión.

Sentía rabia, ira, coraje, decepción, tristeza y un profundo dolor en n su corazón.

Bueno aqui o dejo un nuevo capítulo espero seáis de su agrado.

«Dreans1d»

S.H.L.©