Capitulo 33

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Libremente camino por los pasillos, sin ninguna persona. Todos estaban ocupados en sus habitaciones.

La barra estaba libre, perfecto, tenía todo el tiempo para hablar con Carlos. Antes de que se sentara él ya le había servido un Martini con dos aceitunas.

─Gracias ─dio un pequeño sorbo.

─¿Cómo va todo, Santi?

─Bien, ya sabes lo mismo de siempre.

─Si me permites, esa chica es preciosa muy preciosa, trátala con ternura ─dijo mientras limpiaba las copas para después dejarlas en su lugar─. No sé por qué buscan estos lugares, nunca lo entenderé.

─Tal vez buscan un amor, pero nosotros no podemos dárselo.

─Ustedes son de nadie y de todas ─se quitó el antifaz de color jade, se sentó del otro lado acompañándolo─. Esas mujeres lo que necesitan es un amor de verdad, alguien que las desee en cuerpo y alma. Duele ver que solo vienen aquí por sexo...

─No sé qué decirte.

─Mejor vayamos al grano ¿Qué haces aquí? Algo quieres y lo sé.

─Tu silencio a cambio de dinero, Alex no debe enterarse de nada.

Sigilosamente volteo para comprobar que no hubiese nadie.

─Mi silencio es caro.

─Medio millón. No más.

─Que generoso. Pareces desesperado.

─¿Entonces?

─Está bien, una buena propia no te la dan todos los día, has las preguntas.

Termino su copa de un trago.

─Estoy buscando a un tipo, se hace llamar Nym.

Carlos comenzó hacer memoria─. No, nadie con ese nombre.

─¿Estás seguro?

─Muy seguro.

─Háblame de Alex.

─El mismo imbécil de siempre, solo que ahora se está metiendo en cosas que no debe.

─¿Cómo qué?

─Hay un tipo que viene todos los días, siempre viene escoltado. Son tipos malos. Entran a su oficina y no se más.

─¿Has visto su rostro?

─Siempre lleva una máscara victoriana... Alex se está metiendo en cosas mayores que no puede manejar, su ambición por el dinero está creciendo. A veces se droga, lo he visto. Entre su borrachera dice cosas como que ampliara el negocio, que extenderá sus dominios con ayuda de alguien ─tomo la botella, y sirvió un caballito de tequila.

─Ese tipo ¿Dónde está?

─En estos momentos debe estar en la oficina de Alex. Llega a las once y media, y se va antes de la una de la madrugada. Santi debes de saber que es un tipo grotesco, hace unas semanas una de las adquisidoras se quejó de que ese hombre se metió a la habitación e intento violarla. Yo creo que ha hecho eso con otras, hay caras que ya no veo por aquí. Ese hombre está propasándose, y Alex no hace nada.

─Creo que es el tipo que estoy buscando.

─Debes tener cuidado, siempre está armado ¿puedo saber por qué lo buscas?

─¿Podre confiar en ti?

─Te debo parte de mi lealtad.

─Estoy buscando a un asesino.

Rincón Exquisito © (Editando)Место, где живут истории. Откройте их для себя