─Eso creo. ¿Seguro que no te puedes quedar más tiempo? ─pregunto mientras cortaba las verduras.
Abrió el refrigerador─. Solo dos semanas, no me dieron más.
─Quería pasar el mes completo contigo.
─Igual yo pero... me puedes pasar el cuchillo.
─Aquí tienes.
─Solo dos semanas, debo volver. No le puedo dejar todo a Katrina ─corto la pechuga en tiras. Tuvieron que retrasar el viaje a Barcelona, agosto estaba saturado de trabajo, y si quería tener dos semanas debía esperarse hasta principios de septiembre.
Puso a coser las verduras─. Al menos te tengo para mí por dos semanas.
─Lo mismo digo ─le dio un beso fugaz cuando habría la alacena para tomar algunos condimentos─. Ya pensaste que quieres hacer cuando estemos allá.
─Muchas cosas, siempre y cuando sea en el viñedo.
─Entonces, un tour completo ─propuso.
─Justo como el que me diste cuando fui la primera vez ─guardo silencio un momento.
─¿A un estas nerviosa?
Ella asintió con una sonrisa.
─Tranquila, ya hablamos de eso ¿no? ─apoyo sus manos firmemente en sus hombros.
─No es fácil para mí, sabes como soy.
─Sabes... en algún momento tendré que conocer a tus padres ─tomo una sartén, vertió un pequeña cantidad de aceite─. Creo que ellos quieren lo mejor para nosotros, alguien de confianza, y que nos respete, sin embargo en la mayoría de los casos ellos tienen una expectativa muy diferente a la nuestra, lo que trato de decirte es que, no importa si soy o no aceptado por tu familia, seguiré queriéndote y no te voy a dejar ir.
Volvió aparecer aquella sonrisa─. A veces creo que tienes algo que no puedo entender, me provocas muchas emociones, y tienes las palabras necesarias para tranquilizarme.
─No lo sé ─coloco las tiras de carne sobre la sartén─, es que te quiero, de verdad te quiero, dicen que no hay mujer perfecta u hombre perfecto, pero siento que tú lo eres para mí.
Santi noto como se sonrojaba.
─¿Q-que pasaría si... mis padres no te aceptan?
─Sería complicado, pero como dije, seguiré a tu lado, siempre y cuando tú me quieras. Pensaría en alguna forma para hacerles entender que yo soy el indicado para ti.
─Creo que mi padre será un obstáculo, Santi.
─No hagas que me preocupe antes de tiempo, por favor ─enarco una ceja─. He tenido muchos obstáculos en mi camino, no quiero que nadie se interponga entre lo nuestro, o ¿acaso tú lo dejarías?
─N-no, claro que no, ¿puedo contart un secreto?
─Claro.
─Antes que nos hiciéramos amigos, yo te miraba como alguien inalcanzable.
─¿inalcanzable? ─comenzó a cocinar mientras la escuchaba.
─Si, me enamoro tu físico, y me encanto tu manera de ser, eso era inalcanzable, porque yo soy lo opuesto a ti. Soy callada, tímida, insegura de mí, temerosa ¿cómo alguien así podría compaginar contigo? Siempre pensaba así, a veces quería cambiar, pero incluso eso me daba miedo ─retiro las verduras con cuidado─. Siempre he sido así ─arrugo la frente─. Eras inalcanzable, de verdad.
YOU ARE READING
Rincón Exquisito © (Editando)
RomanceElla: dura, antipática y mandona; la típica mujer 31 que se hace la fuerte ante la vida. Él: honesto, trabajador y soñador, el típico joven que lucha ante las adversidades que aparecen en su camino. Ella: hermosa, seductora y fría. El: apuesto, int...