Capítulo 12: ¿Qué fue de ti...?

844 69 44
                                    



Al día siguiente despierto en un enredo de miembros acalambrados. Parece que el frío de la noche nos hizo acurrucarnos cuando se extinguió la fogata; mi cabeza reposa sobre las costillas de Gale y Johanna está boca abajo, atravesada sobre Finnick y mi amigo, su trasero a centímetros de mi cara.

- Johanna, ¿podrías moverte un poco, por favor? -le pide Gale cortésmente, levantando apenas la cabeza. Yo me incorporo rápido y me estiro, flectando mis músculos.

- ¿Quieres quitarte de encima nuestro? -le pide Finnick con menos cortesía y tratando de levantarse.

- Fue un placer dormir con ustedes, muchachos... -comenta estirándose Johanna- Hagámoslo de nuevo alguna vez -remata, risueña y traviesa igual que en el ascensor.

El sol brilla fuerte ya, aún es verano pero bajo los árboles hay buena sombra. Descubrimos a nuestro pesar que las brasas ya están del todo frías y tampoco nos queda leña para asar el segundo pavo, que dejamos dentro de una de las mochilas y colgado a bastante altura en un árbol, a salvo de posibles depredadores. Johanna intenta subir a recuperarlo pero enseguida queda patente que no está en buenas condiciones para trepar árboles y yo subo por el ave.

- Esto es humillante... antes de quebrarme la pata y machucarme las costillas podía subir árboles tan bien como tú -protesta al verme subir y bajar sin problemas. Le entrego la mochila a Gale.

- Katniss Everdeen, la ardilla humana -bromea Finnick.

- Por eso Katniss es la que siempre sube a los árboles por frutas o a sacar huevos de los nidos -tercia Gale y me recuerda los ciruelos que cosechábamos antes.

- ¿Crees que aún queden ciruelas y fresas? -le pregunto.

- Sí, todavía deben quedar, pero falta bastante aún para llegar a los bosques del 12... ni siquiera hemos llegado a la casa del lago -responde mirando hacia lo lejos.

- ¿Y cuánto nos falta para llegar a ese lago? -inquiere Finnick.

- Medio día si vamos rápido... pero creo que tendremos que hacer más de una pausa por Johanna y en ese caso, llegaremos al atardecer -concluye Gale, tomando una botella.

- Pues por mí no se preocupen, ya estoy mejor -señala Mason pero sabemos que no es tan cierto, tendremos que parar al menos un par de veces para comer y descansar.

Bebemos agua y nos lavamos la cara antes de retomar camino, lo que es un decir, ya que no hay caminos que seguir en absoluto. Sin embargo, confío ciegamente en el excelente sentido de la orientación de mi camarada de caza. Claro que antes de partir procuramos borrar las huellas de nuestro primer campamento: esparcimos las cenizas, enterramos los huesos y cubrimos con tierra lo que fue el centro de la fogata. Cercano al mediodía hacemos un descanso, Gale descubre un pequeño arroyo que brota de entre rocas en una ladera, lo que nos alegra sobre manera. Una fuente de agua significa animales que vienen a beber, presas que cazar. Gale y yo montamos trampas con el alambre que mi amigo le pidió "prestado" a Beetee en Tecnología, es algo más grueso que el que usó en la arena así que es estupendo para elaborar lazos que dejen algún despistado conejo colgando del cogote. Las dejamos listas y nos reunimos con Mason y Odair que recorren el perímetro en busca de leña y bayas. A Johanna los bosques no le son ajenos, si bien tiene menos conocimientos de plantas que yo, pero Finnick parece pollo en corral ajeno. Me aseguro de instruirlos bien en bayas comestibles, no vaya a ser que traigan jaulas de noche. Mientras tanto, encuentro cebollinos que desentierro y meto en la mochila. Diviso pinos más allá, lo que me recuerda su corteza interior comestible y el té de agujas de pino que podríamos hervir si tuviéramos algún tiesto. Se lo hago notar a Gale, quien también se ha percatado que nos vamos aproximando al primer destino. Mis aliados miran el paisaje con ojos curiosos. Johanna sigue cansándose rápido pero estar al aire libre y entre árboles le ha mejorado el ánimo, a ratos hasta se le olvida maldecir o quejarse por las costillas magulladas.

Sinsajo HeridoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora