– Solo necesito dormir –Afirma. Sophie se está comportando raro y no sé qué sucede, intento preguntar pero su actitud me lo impide, no sé qué he hecho mal. Estaciono el auto frente a su casa y apago el motor, bajo y rodeo el auto para abrir su puerta pero ella baja antes de que llegue, camina hasta la entrada de su casa y se gira para despedirme.

– No te dejare sola, puedo estar en un cuarto diferente o lo que sea, pero me rehusó a dejarte sola –Inquiero firme, ella mira hacia el suelo y cierra sus ojos, está meditando la situación, sus parpados se abren y sonríe.

– Lo siento, es lo que... –Un color rojo cubre sus mejillas y su mirada se agacha de nuevo– vamos con tu madre a comer. Lo siento Louis –Deposita un beso sobre mis labios y toma mi mano para que caminemos juntos hacia mi casa. Sophie se está comportando raro y debo averiguar qué pasa, ella no es así.

Las gemelas por fin están libres de ronchas, mis dos hermanas rodean a Sophie y compiten por su atención, ella sonríe y juguetea un poco, su estado de ánimo cambio de nuevo, ahora luce sumamente feliz. Johanna me dice que la deje jugar con mis hermanas, a ambas les ayuda mucho la compañía de Sophie. Ayudo a mi madre con la comida y la mesa, mientras las gemelas rodean a mi novia y presumen las cicatrices que tienen por rascarse, Sophie toma un poco de loción humectante y lo mezcla con aceite corporal de almendra y comienza a untarlo por todo el dorso de mis hermanas, las quiere y eso me encanta de ella.

– ¿Louis? –Johanna me llama, su ceja se encorva y esboza una ligera sonrisa– Deja el recipiente sobre la mesa, tu baba caerá sobre mi ensalada –Y suelta una carcajada, son pocas las veces en las que Johanna puede burlarse de mí y en ocasiones como esta reaccionó igual que Sophie, me sonrojo.

Durante la comida Sophie se mantiene callada, en sí todos lo hacemos porque las gemelas no paran de hablar sobre lo nuevos planes que tienen las tropas para recaudar dinero, venderán conservas y Sophie ha hecho un gran pedido, un poco después me anuncian que pronto habrá una reunión para padres y esperan que vaya, me atraganto con la comida y la mirada de Sophie se dulcifica, en sus ojos nace un ligero brillo acuoso y se disculpa bebiendo un poco de agua, ha pasado de ser tímida a mostrarse sensible, hoy algo raro pasa con ella. Accedo y Johanna toma el mando de la plática hablando sobre su nuevo asenso, tiene una mejor paga y más tiempo libre. Sophie y yo ayudamos a recoger la mesa mientras Johanna ayuda a mis hermanas con su tarea. Comienzo a lavar los trastos y espero que ella se una conmigo para el proceso de secado pero ha desaparecido, hemos hecho esto antes y siempre ella está para ayudarme, quisiera creer que esto solo es paranoia pero no, en verdad creo que algo malo sucede. Hago un recuento mental sobre todo lo que hemos hecho, sí, descubrir la verdad sobre sus padres le afecto pero no dijo nada, lo único que quiere es buscar a Demian y aunque no lo comprenda intentare ayudarla. Termino de lavar todo y seco mis manos, Johanna entra a la cocina y se cruza de hombros.

– ¿Le has hecho algo a Sophie? –Pregunta desafiante, niego y ella nota mi confusión– lleva buen rato en el baño de arriba y está llorando –Dice. Lo más probable es que sea por todo lo que descubrimos estas últimas semanas pero obviamente no puedo decirle eso a mi madre.

– No tengo ni la más mínima idea de que tiene –estoy asustado– No le he hecho nada pero hoy amaneció algo emm... diferente –Johanna se queda en espera de que continúe hablando– Ha estado distante y molesta, en momentos sensible y de la nada cambia al modo feliz –Johanna medita la situación y sale de la cocina, sube las escaleras pero antes de llegar al primer piso me pide que la espere, ella entrara a charlar un momento con Sophie, intento oponerme pero no puedo convencer a mi madre de lo contrario. Johanna continúa su camino y lo único que me queda es esperar a que alguna de las dos venga. Me siento en las escaleras y miro mis uñas.

Estar sentado mirando mis dedos es una de las peores formas de esperar a tu madre y tu novia, llevan más de diez minutos en el baño y no tengo información alguna de lo que sucede ahí dentro, me pongo de pie e intento caminar un poco para distraerme, Johanna me pidió que esperara y eso haré, saco mi teléfono y espero tener algún mensaje de alguien para entretenerme un poco, no hay nada. – No puedo más ¡voy a entrar! –Me digo a mi mismo, subo el resto de las escaleras y me acerco cautelosamente al baño, pego mi oreja a la puerta y hago todo lo posible por escuchar lo que sucede, mi madre está hablando.

Don't You Remember... || Louis Tomlinson [Terminada/Editando]Where stories live. Discover now