Mi otra familia.

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Gotas de sudor frío recorren mi espalda, siento su roce y mi blusa se adhiere a mi piel. Intento moverme pero estoy en un lugar diminuto, no sé cómo llegue aquí. Mis puños se cierran y siento como mis uñas lastiman la palma de mi mano. Intento relajarme pero el aire empieza a ser insuficiente, mi pecho sube y baja cada vez más rápido.

"Pequeña Fi, ven mi pequeña Fi. ¡Sal de ahí! Vamos a jugar"

La voz resuena en mis oídos y duele, las palabras penetran en el fondo de mi psique y sacan a flote recuerdos de Ariana, de mi niñez, de mi madre, aunque no la conocí. Abro los ojos y no hay ni un rasgo de luz, todo se ha nublado. Mi cabeza gira en busca de un escape pero estoy atrapada, mis manos golpean a mí alrededor, necesito encontrar una salida pero no hay nada, no veo ni siento nada. Mis gritos se entremezclan con los sollozos y las palabras martillan en mi mente, no reconozco esa voz pero me lastima. De momento soy incapaz de respirar y mi cuerpo se adormece, siento el sudor frío caer y me mareo, voy a vomitar. Grito con desesperación y un silencio doloroso toma el lugar de la misteriosa voz, mis sentidos se agudizan y espero que la luz vuelva, tres disparos rompen la barrera del silencio y ahogo un grito, una risa malévola resuena en forma de eco y todo a mí alrededor se achica, el espacio disminuye y el aire carece, voy a morir.

– ¡Sophie despierta! –siento que alguien toma mis hombros y me sacude con fuerza– ¡Carajo! ¡Sophie es una pesadilla! ¡Despierta! –Escucho su voz, es él y está conmigo. Quiero abrir los ojos pero mis parpados pesan, siento como mi cuerpo se zangolotea múltiples veces pero no puedo reaccionar– Respira por favor, por favor respira –Murmura cerca de mi oído ¡¿Cómo que no estoy respirando?! Escucho que se levanta de la cama y desaparece, no sé qué ha sucedido pero estoy asustada, no puedo despertar. Siento un chorro de agua helada chocar con mi rostro y mis sentidos reaccionan, mis ojos se abren de golpe y lo primero que veo es su rostro. Louis esta frente de mí, está cubierto por una fina capa de sudor y de sus ojos nacen pequeñas lágrimas. Su respiración es tan agitada como la mía pero continua examinándome, sonríe y acerca sus labios a mi frente, deposita un beso delicado pero con todo su amor en él.

– Fue solo otro ataque de pánico –murmura– Me has dado el susto de mi vida, no respirabas –retira mi pelo lleno de sudor y deja mi rostro libre – ¿Estas bien? –el tono de su voz es precavido, me toma unos segundo analizar la situación. Es Louis, semidesnudo y preocupado por mí. Mi corazón reacciona y sin dudar más me lanzo sobre él. Con dificultad mis manos toman su rostro y lo beso, quiero sentirme de él, necesito que me proteja. Me pongo de rodillas y mi lengua se abre paso dentro de su boca, estoy asustada y desesperada. Mi corazón late con fuerza y puedo escuchar un ligero gemido de su parte, el placer sustituye al miedo y me dejo llevar, mis piernas se mueven con torpeza y quedo a horcajas sobre él, puedo sentirlo en mi muslo derecho, un bulto creciente choca con mi piel desnuda. Mi piel se ha vuelto más sensible. Sus manos llegan a mis caderas y levanta ligeramente mi blusa masajeando mi abdomen, mi pelvis se balancea sobre él y siento como crece debajo de mí. Me siento deseosa y torpe, pero él miedo se ha ido. Mis manos se posan en sus muslos para mejorar mi equilibrio y continuo frotando, lleva sus manos hasta mi espalda y acaricia mi piel desnuda, no tengo sostén, solo nos separa la blusa de mi pijama. Gime de nuevo y aprovecho para mudar mis labios a su cuello, mi parte favorita de él, ladea su cabeza y me permite un mejor acceso. No sé cómo lo hago, no sé cómo puedo sentirme así, pero él me brinda la seguridad necesaria para actuar de esta manera. Mi lengua recorre su clavícula y aumento mi roce, echa su cabeza hacia atrás y aprovecho para pasar mis dientes sobre su piel, gime con fuerza y siento sus uñas rasgar ligeramente la piel de mi dorso. No quiero pensarlo tanto, solo necesito que el miedo desaparezca y Louis permanezca, él es mi hogar y me reconforta. Mis manos llegan al borde de mi blusa y comienzo a subirla, mis pechos están quedando desprotegidos y debo dejar su cuello para concluir mi tarea. Louis se da cuenta de mi plan y escucho como traga saliva, se aparte de mí despacio y me mira detenidamente. Sé cómo terminara esto, toda la semana ha sido igual.

Don't You Remember... || Louis Tomlinson [Terminada/Editando]Место, где живут истории. Откройте их для себя