Días después, Taeyong había sido dado de alta, y lo primero que hizo Jaehyun fue convencerlo de venir a vivir con él, pues ya había dejado a Minji y la ruptura había hecho que ella se mudara.
Es así que logró convencer a Taeyong, y ahora mismo él se entraba mirando por la ventanilla del auto, sintiendo una mezcla de nervios y ansiedad al ver cómo la mansión de Jaehyun se hacía cada vez más grande ante él. No era la primera vez que estaba allí, pero ahora todo se sentía diferente. Sabía que ese lugar había sido su hogar en algún momento, pero no podía recordarlo del todo.
Jaehyun estacionó y rápidamente bajó para abrirle la puerta.
—Bienvenidos a casa—dijo con una sonrisa suave.
Taeyong no respondió de inmediato. La palabra casa le sonaba extraña en sus labios.
Sion, sentado en su asiento especial, aplaudió con entusiasmo al ver la enorme casa.
—¡Caaa! —balbuceó el pequeño, intentando decir "casa", y aquello sacó una leve sonrisa a Taeyong.
Jaehyun aprovechó el momento para tomarlo en brazos.
—Sion ya lo siente como su hogar. Quizás, con el tiempo, tú también.
Taeyong bajó la mirada y asintió levemente.
Entre tanto, desde el otro auto, Yunho miraba la escena desde la distancia con una mezcla de emociones revueltas. No quería dejar ir a Taeyong ni a Sion, pero sabía que debía hacerlo.
Un suspiro al lado suyo lo hizo girar la cabeza.
—Debes relajarte —dijo Mingi con un tono ligero pero comprensivo—. No es el fin del mundo.
Yunho soltó un suspiro pesado.
—No es tan fácil.
—Nada que valga la pena lo es. Pero si quieres que Taeyong sea feliz, tienes que aceptar esto.
Yunho pasó una mano por su rostro, frustrado.
—¿Cómo puedes ser tan calmado?
Mingi se encogió de hombros.
—Porque soy un enfermero, Yunho. Aprendo a lidiar con el caos todos los días. Además… te contraté un reemplazo.
Yunho frunció el ceño.
—¿Qué?
—Jaehyun necesitaba a alguien para cuidar a Taeyong en su recuperación, y ¿adivina qué? Me ofrecí para el trabajo.
Yunho lo miró con incredulidad.
—¿Qué? ¿Tú?
Mingi asintió con una sonrisa orgullosa.
—Voy a estar ahí para ayudarlo con sus terapias, supervisar su salud y, de paso, asegurarme de que no te olviden por completo.
Yunho abrió la boca para protestar, pero luego cerró los ojos y suspiró.
—No sé si agradecerte o golpearte.
Mingi rió.
—Si decides lo segundo, avísame para que pueda defenderme.
Yunho negó con la cabeza, pero una leve sonrisa apareció en sus labios.
—Solo… cuídalos, ¿sí?
Mingi le dio una palmada en la espalda.
—Lo haré. Y también te cuidaré a ti, Yunho.
La mirada de Yunho se suavizó por un momento antes de volver a centrarse en la mansión. Sabía que esto era un nuevo comienzo, y aunque dolía, también era necesario.
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Unwritten Vows • Jaeyong •
Teen FictionCuatro años de matrimonio, un contrato y un destino sellado: la separación. Para Jaehyun, solo era un trámite. Para Taeyong, se convirtió en algo más. Ahora, mientras el final se acerca y Jaehyun parece enamorarse de alguien más, Taeyong se enfrenta...
