Unwritten Vows • Jaeyong •

19

La mañana siguiente, Taeyong despertó con una inquietud que lo consumía. Las palabras de Yunho de la noche anterior seguían resonando en su mente como un eco implacable.

"Solo no quise presionarlo con recuerdos dolorosos"

Esa frase no lo dejaba en paz. No importaba cuánto intentara ignorarla, sentía la necesidad de descubrir la verdad, de comprender qué había sucedido realmente en todo ese tiempo que no recordaba. ¿Por qué su matrimonio había terminado? ¿Cómo era posible que, si aún sentía que amaba a Jaehyun, hubiera terminado con Yunho? 

El nudo en su pecho se hizo más pesado con cada pensamiento. No podía seguir con dudas ni viviendo en la incertidumbre. Tenía que saberlo todo, sin importar lo dolorosa que fuera la verdad. 

Esperó pacientemente a que Jaehyun se marchara a la empresa para resolver unos asuntos. En cuanto estuvo seguro de que no regresaría pronto, tomó aire y marcó el número de Yunho en su teléfono. 

—Taeyong, ¿pasa algo? —preguntó Yunho al contestar, con voz preocupada. 

—Necesito que vengas a mi habitación, Yunho. Hay algo de lo que quiero hablar contigo. 

Hubo una breve pausa al otro lado de la línea, como si Yunho estuviera sopesando la situación. Luego, un suspiro. 

—Voy en camino. 

Taeyong se levantó de la cama y se miró en el espejo. Sus ojeras estaban más marcadas de lo normal y su expresión reflejaba la tormenta que llevaba dentro. ¿Estaba listo para escuchar la verdad? No lo sabía, pero sí estaba seguro de que ya no podía vivir en la ignorancia. 

Minutos después, Yunho apareció en el umbral de la puerta. Llevaba una expresión seria, pero en su mirada había algo más: un destello de tristeza, quizás de resignación. 

—Dime, Taeyong —dijo, cerrando la puerta detrás de él—. ¿Qué es lo que quieres saber? 

Taeyong se armó de valor y lo miró fijamente. 

—Todo. Quiero saber por qué terminé separándome de Jaehyun. Quiero saber qué pasó entre nosotros y cómo terminé contigo. 

Yunho dejó escapar una risa amarga. 

—¿Estás seguro de que quieres saberlo? La verdad no siempre es bonita, Yong.

—Prefiero una verdad dolorosa a vivir en la mentira. 

Yunho lo estudió por un momento antes de acercarse y sentarse frente a él. 

—Está bien. Te contaré todo. 

Hizo una pausa, como si estuviera reuniendo fuerzas para soltar las palabras que llevaban tiempo atrapadas en su pecho. 

— Creo que sí sabes o recuerdas que Jaehyun y tú no estaban juntos por amor. Estaban casados por un contrato. 

Taeyong sintió cómo el aire abandonaba sus pulmones. 

— Si, lo recuerdo.

— Al principio, era solo un acuerdo entre ambos. Pero, con el tiempo, los sentimientos aparecieron. Al menos de tu parte —continuó Yunho, con un deje de amargura—. Jaehyun, en cambio... nunca supo cómo valorar lo que tenía. 

Taeyong sintió un vacío en el estómago. 

—Eso no puede ser cierto... Siento que aún lo amo

—Lo amabas —corrigió Yunho—. Pero Jaehyun no te eligió a ti, Taeyong. Incluso antes de terminar ese contrato el ya estaba viendo a alguien más, Cuando el contrato terminó, él no hizo nada por quedarse contigo.