Unwritten Vows • Jaeyong •

19

Las palabras fueron como un puñal directo a su corazón. 

—No... 

—¿Sabes qué hizo cuando todo terminó? Se casó con la chica a la que veía a tus espaldas, mientras tú estabas embarazado de Sion. Nunca se lo dijiste porque tenías miedo de que Jaehyun te rechazara

Taeyong sintió náuseas. 

— Dios...¿Cómo es que sucedió esto?

— Cuando te fuiste, él siguió con su vida. Se casó, vivió sin ti y cuando las cosas iban mal debido al accidente tuve que llamarlo, no tuve más opción. Es por ello que mi hermano regresó queriendo recuperar a Sion y a ti.

Taeyong se llevó las manos al rostro, sintiendo que el mundo a su alrededor se desmoronaba. 

—Pero... si todo eso es cierto, ¿cómo terminé contigo? 

Yunho suspiró y le tomó las manos con delicadeza. 

—Porque yo sí me quedé contigo cuando lo necesitaste. Fui yo quien estuvo a tu lado cuando estabas embarazado y vulnerable. Fui yo quien sostuvo tu mano cuando creías que el mundo se te venía encima. 

Los ojos de Taeyong se llenaron de lágrimas. Su corazón latía con fuerza, desbordado de confusión y dolor. 

—No sé qué hacer, Yunho...

—Solo cree en ti mismo, Taeyong —susurró Yunho, apretando su mano— En lo que sientas ahora. No en lo que creías sentir en el pasado. 

El silencio se extendió entre ellos, roto solo por la respiración entrecortada de Taeyong. 

Yunho se levantó, sabiendo que Taeyong necesitaba tiempo para procesarlo todo. 

—Cuando estés listo para escuchar más, estaré aquí —dijo antes de marcharse. 

Taeyong se quedó solo en su habitación, con la mente y el corazón hechos un desastre. Por más que intentara negarlo, una parte de él sabía que Yunho decía la verdad. 

Taeyong no podía quedarse quieto. Su pecho subía y bajaba con fuerza, sintiendo un calor abrasador recorrerle el cuerpo. La rabia, la frustración y el dolor lo estaban consumiendo. 

Cuando Jaehyun entró a la habitación más tarde, ni siquiera le dió tiempo a hablar. 

—¿Cómo pudiste? —soltó con la voz temblorosa, pero cargada de furia. 

Jaehyun frunció el ceño, sorprendido por la agresividad con la que Taeyong lo miraba. 

—¿De qué estás hablando? 

Taeyong se levantó de la cama de golpe, sintiendo un mareo momentáneo pero sin darle importancia. 

—¿Realmente creíste que no me enteraría? —espetó, acercándose más a él—. Te casaste con otra mujer, Jaehyun. Mientras yo estaba jodidamente embarazo. ¿Cómo diablos pudiste hacerlo? 

Jaehyun cerró los ojos por un segundo, como si estuviera preparándose para la tormenta que se avecinaba. 

—Taeyong, déjame explicarte… 

—¿Explicarme qué? ¿Que justo después de terminar nuestro contrato te fuiste corriendo a los brazos de otra? ¿Que mientras yo estaba con otro hombre criando a nuestro hijo, tú estabas feliz con una esposa nueva? 

Jaehyun sintió un nudo en la garganta. 

—No fue así. 

Taeyong soltó una risa seca y amarga.