Sempiterno || °Carlisle Cullen°

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Estaba en mi habitación de la casa de los Black pasando el rato tranquilamente. La manada estaba haciendo su guardia nocturna por lo que Jacob no estaba en casa.

Estaba mirando por la ventana hacia el bosque cuando una imagen llegó a mi: una cabellera roja y detrás un gran lobo.

Me levanté de mi sitio casi al instante, Victoria estaba aquí. Pensé en la manada y utilicé mi don.

Victoria corría entre los árboles y la manaba casi le pisaba los talones, pero ella siempre lograba escapar.

Decidí ir a ayudarles, era rápida y Victoria no me esperaba, podía causar una distracción y por fin atraparla.

Aún con mi don funcionando corrí por el bosque para saber la localización exacta. Corrí lo más rápido que pude hasta que llegué al lado de Jared.

"¿¡Qué haces aquí!?" me preguntó sorprendido sin dejar de correr

─ ¡Ayudar! ─ dije decidida.

"Gala, los Cullen están aquí" me avisó con un tono preocupado

No me lo esperaba, no los había visto con mi don, pero no le di importancia, lo que si era importante era atrapar a Victoria

"¡¡Dejad de hablar!!" ordenó Sam "Gala, ella no te espera, a ver si consigues llegar por el lado"

Seguí la orden de Sam y me alejé de la manada para correr más todavía.

Llegué a la misma altura que Victoria y salté hacia ella haciéndole un placaje. Por la rapidez con la que íbamos dimos unas cuantas vueltas por el suelo en las que intenté agarrarla bien.

Justo cuando dejamos de rodar llegamos a la orilla de un río, me moví con fuerza y me coloqué encima de ella a horcajadas.

─ ¿¡Pero qué!? ─ gritó Victoria sin haberse esperado nada de esto.

La agarré del cuello con una mano, con la otra le cogí del pelo y la golpeé contra el suelo. Victoria soltó un sonido gutural e hizo fuerza en su cadera así levantándome.

Al sacarme de encima suya se puso de pie y corrió hacia mi dándome una patada en el pecho que me empujó de vuelta hacia los árboles.

"¡¡Gala!!" escuché la voz de la manada llamarme

─ ¡Seguid corriendo! ¡Que no se escape! ─ grité volviendo a correr tras de ella.

Vi como Paul estaba apunto de agarrarla por la ropa con los dientes, pero justo antes de que cerrara el hocico Victoria saltó hacia la otra orilla del río: el territorio de los Cullen.

─ ¡Le sigo! ─ avisé dispuesta a saltar hacia el otro territorio.

Pero justo cuando iba a saltar Emmett apareció. Seguí corriendo al lado de la manada atenta a la carrera de Victoria y Emmett: la pelirroja le llevaba ventaja a Emmett, pero se le veía dispuesto a atraparla, tanto que...cuando Victoria saltó de nuevo al territorio de los lobos Emmett saltó con ella.

La manada siguió corriendo tras la fría, pero Paul, sin aguantar a ningún vampiro, se lanzó contra Emmett impidiéndole pasar la línea.

Enseguida cambié de rumbo hacia ellos dos. Emmett había caído en el rio y miraba enfadado a Paul, al igual que él gruñía hacia el otro.

Los dos estaban en su territorio, pero Emmett parecía dispuesto a saltar al otro lado.

─ ¡Parad! ─ ordené poniéndole entre ellos dos.

Alcé las dos manos y miré fijamente a Emmett, dándole así la espalda a Paul, pues sabía que él no rompería el tratado bajo ninguna circunstancia, en cambio, Emmett si que lo podía hacer.