Después de que esa persona se fuera de su vida estaba sola.
Pasó toda su adolescencia con ese hecho, y es que su condición la obligaba a no entablar relaciones tan íntimas, haciendo que esa soledad creciera hasta hacerla una chica fría y dura ante...
Bajé las escaleras cuando sonó el timbre de mi casa. Al abrir la puerta estaba Isabella con una pequeña sonrisa. La miré sorprendida, pues aún después de haber mejorado no me dirigía la palabra.
─ ¿Isabella? ¿Ocurre algo? ─ pregunté.
La chica empezó a tocarse el pelo y a ponerse nerviosa.
─ Iba a ir al cine con mis amigos...pero Jessica se ha rajado, Angela tiene gripe estomacal y Eric se ha quedado para cuidarla, así que...solo vamos Jacob, Mike y yo...
─ Ah...pues muy bien ¿No? ─ le dije al haberse quedado callada.
─ ¡Sí! Pero me refiero a...a si quieres venir con nosotros
La miré más sorprendida todavía ¿Isabella me había invitado al cine?
─ Sabes que no me llevo muy bien con Mike, y Jacob está enfadado conmigo.
─ Si, lo sé...pero pensaba que podríamos hablar y recuperar tiempo...─ dijo estirando las mangas de su ropa ─ Ya sabes...darte las gracias por cuidarme.
Sonreí levemente al escucharlo.
─ Prefiero que hagamos eso cualquier otro día que tú quieras, pero no voy a ir al cine, lo siento Isabella.
─ No...no pasa nada. Otro día quedamos
─ Claro ─ le dije con una sonrisilla.
Esperé en la puerta a que se fuera, pero aún seguía sin moverse.
─ ¿Algo más? ─ pregunté divertida
Pensaba que me diría algo, pero en vez de eso vino a mí y me abrazó.
No me lo esperaba, así que tardé en corresponder el abrazo, pero cuando lo hice Isabella suspiró.
─ Gracias Gala ─ dijo con su pequeña sonrisa.
Le sonreí y esperé a que se subiera en su camioneta antes de entrar de nuevo a casa.
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Estaba con Paul en el bosque, él estaba haciendo su guardia mientras yo le acompañaba.
Miré la hora en mi reloj notando que seguramente la película que habían ido a ver ya habría terminado, así que haciendo uso de mi don empecé a pensar en Isabella.
Lo que no me esperaba ver era que Jacob estaba peleándose con Mike.
• • •
─ ¿O quieres que yo te acompañe al hospital? ─ le dijo Jacob al rubio.
Isabella fue a pararlo cogiéndolo del brazo.
─ Jacob ¿Que haces? La película ya ha terminado ─ le recriminó.
Pero al cogerlo de la mano notó algo extraño.
─ Jacob...estás muy caliente, como si tuvieras fiebre.
