Transmigrado a un ídolo escolar y forzado a hacer negocios

Casarse en el futuro

Un sonrojo se apoderó del rostro de Yu Baizhou, todo gracias a los esfuerzos de He Yan.

Afortunadamente, las luces del auto no estaban encendidas y He Yan no pudo verlo.

He Yan presionó suavemente su cabeza entre sus brazos, con una mano alrededor de su cintura y la otra tocando su cabeza.

Yu Baizhou se apoyó en el pecho de He Yan y pudo escuchar los constantes y poderosos latidos del corazón de He Yan. El abrigo de He Yan estaba desabrochado y la temperatura de su cuerpo se transfirió a través del suéter hasta su mejilla. Rodeó la cintura de He Yan con sus brazos, admitiendo para sí mismo que, aunque esta postura era muy ambigua, abrazarse así le permitía descansar la mente.

Como dijo Fu Xia, es como si He Yan protegiera todo su cuerpo.

Después de un tiempo, He Yan levantó la cabeza y los dos solo pudieron dibujar el contorno del otro con la luz de la luna que se filtraba desde el exterior.

La mano de He Yan tocó su mejilla. "Me gustas."

Tal vez fue por la caricia de He Yan, o tal vez por ese "me gusta", pero algo llevó a Yu Baizhou a experimentar un escalofrío que recorrió todo su cuerpo.

Él dijo: "Eh".

La mano de He Yan recorrió su mejilla, le acarició las cejas, la frente, los ojos, el puente de la nariz, la punta de la nariz y luego llegó a sus labios.

Los labios de Yu Baizhou se movieron muy ligeramente y He Yan aplicó más presión en las yemas de sus dedos. Cuando He Yan se pasó la piel de los labios, hubo otra fuerte oleada de entumecimiento.

La respiración de Yu Baizhou ya no era uniforme. Él dijo: "Quiero..."

Yu Baizhou acababa de terminar con la palabra "querer" cuando sintió un suave toque en sus labios.

Fue solo un toque ligero, ni siquiera un beso, pero aún así hizo que el corazón de Yu Baizhou saltara violentamente. He Yan preguntó: "¿Así?"

¿Cómo podría He Yan no saber cuáles eran los verdaderos pensamientos de Yu Baizhou?

En este momento, Yu Baizhou de repente dio un gran salto en el progreso, aunque fue solo un pequeño paso.

Pero fue suficiente.

Hizo un gran esfuerzo para intentar equilibrar su respiración y, pensando que todo había terminado así, dijo: "Eh, esto es suficiente".

Con una sonrisa en sus palabras, He Yan preguntó deliberadamente: "¿Estás seguro?"

Tan pronto como las palabras de He Yan cayeron, Yu Baizhou sintió otro beso en su boca. Esta vez, el toque fue más intenso que antes.

He Yan volvió a preguntar: "¿Es esto realmente suficiente?"

Durante mucho tiempo, Yu Baizhou había estado esperando este momento, y ahora He Yan se burlaba de él una vez más hasta que le picaba el corazón...

Al comprender el significado detrás de las palabras de He Yan, soportó la creciente calidez en su rostro que estaba a punto de quemarse y susurró: "... No es suficiente".

He Yan sonrió levemente. Sus labios se acercaron a los de Yu Baizhou antes de finalmente cubrirlos. Los labios suaves se transfirieron calor entre sí y el cálido aliento se extendió finamente sobre la piel de la otra persona. El corazón de Yu Baizhou latía demasiado rápido y sentía que estaba a punto de sufrir asfixia.

Justo cuando Yu Baizhou sintió que probablemente aquí era donde terminaba su límite, He Yan pasó su mano de su mejilla a la parte posterior de su cabeza y luego la empujó ligeramente. Los labios que simplemente se tocaban ahora tuvieron un contacto más áspero y duro y el beso se hizo más profundo.