Aprenderé a ser padre

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Ultra Magnus despertó, un nuevo día, un nuevo día sabiendo que ahora eran dos sparks, sabía que le cogían el doble de su energía y también...a futuro sería más costoso doblegar a dos predacons.

Se levantó de la litera que compartía con Predaking, a él no lo vio por ningún rincon de aquella gran sala. No le importó.
Al dar los primeros pasos hacia la salida notó el cansancio que lo invadía desde hace días acompañado esta vez de un ligero mareo, logró salir por la puerta pero el mareo lo cegó, su visión se vio oscura de golpe y cayó al suelo sin poder tener control alguno de su cuerpo.

No paso mucho tiempo hasta que algún predacon se diera cuenta de la situación pues el golpe sonó por todo el pasillo, miniciclos después ya lo andaban cargando hacia la medbay predacon mientras que se avisaba al Rey del reciente acontecimiento.

. . .

Ruido, de vez en cuando lograba escuchar algún pitido, sabía donde se encontraba perfectamente, de pronto una voz, reconoció la voz de Darksteel hablando ...¿con una femme? Si, era una voz femenina, Predaking no se encontraba en la escena, aparentemente Darksteel le contaba el estado en el que se encontraba el autobot aunque no logró captar bien que decía pues volvió a caer en recarga.

Logró abrir los opticos, aquella femme estaba sentada a su lado como si esperase a que Magnus despertase de una vez, pues justo, los astros se habían unido y Magnus había despertado;

- ¿Donde esta Predaking? - fue lo primero que sacó por la boca el azul.

- Tranquilo, su majestad no puede venir en este mismo instante aun así ya se le avisó. Me mando a mí, de hecho, yo te enseñaré unas cuantas cosas útiles a la hora de traer un sparkling a este mundo. Por cierto ¿como te encuentras? - le respondió calmadamente aquella femme que Magnus no había visto nunca.

- Dos...son dos - miró al techo de la medbay apenado, se lo conocía a la perfección pues ya había pasado cantidad de veces por esa misma tabla metálica de escaneo.

- Causa el doble de agotamiento lo se, debes de tomar más energon del habitual quieras o no Ultra Magnus, o consumirán tus fuerzas, ten calma, no llevas mucho tiempo con la spark crecida, esto es un proceso completo y acabas de comenzar, te irás acostumbrando con el paso de los ciclos. - la femme no le iba engañar, para ser su primera gesta lo iba a vivir.

- ¿Como voy a hacerme cargo de dos predacons yo solo? Me van a devorar, es una locura - se agobió solo de pensarlo.

- No creo que sean predacons completamente, recuerda que llevan tu genética y por ello también tu fenotipo, lo más probable es que sean híbridos. En cuanto a la cría no estarás solo, aqui entre todas nos encargamos de cuidar a los sparklings de todos, como si de una guardería se tratase - aquellas confesiones calmaron al autobot.

- Un híbrido...claro, no había caído. Entonces ¿no serán tan brutos y salvajes? ¿serán más faciles de educar? Te doy las gracias si me ayudais a criarlos - respondió más calmado pero con nuevas curiosidades.

- Umm, no, la personalidad la irán desarrollando con el paso del tiempo, puede que salgan más dóciles y se comporten facilmente o lo contrarío, por eso es importante su educación. Te ayudaremos Ultra Magnus, sé que es tu primera vez y no sabes qué hacer, todas hemos pasado por esto alguna vez...no temas.

Magnus logró sentarse en la plataforma, la charla logró calmarlo y su spark deceleró a un ritmo adecuado para él, deseaba seguir hablando con la encantadora femme pero también andar.

- ¡Ah no! No puedes salir de aquí sin un último chequéo de tu médico. Espera a que vuelva y podremos irnos. - le frenó la femme en cuanto vió que Magnus echaba a andar.

Al menos, él autobot ahora sentía un apoyo tremendo, le daba mucha tranquilidad el saber que entre todos los predacons le ayudarían a criar a sus sparklings.

Yo, ¿tu Reina?Where stories live. Discover now