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No hay mucho que decir de la vida de Momo, es una alfa común y corriente, con una vida tranquila, tiene un trabajo que le permite ganar lo suficiente para poder mantenerse a ella y a su hermana Tzuyu junto con su carrera de derecho.

– Volveré un poco más tarde. – Comentó Tzuyu llevando un bocado de panqueque a su boca. – Me reuniré con Elkie para hacer un trabajo.

– Está bien, no te preocupes. Cenaré hasta que llegues. – Contestó sin mayor importancia.

– Momo, come un poco. – Ánimo al ver que la mayor sólo movía de un lado a otro su comida con el tenedor.

– Honestamente no tengo mucho apetito, lo siento, Tzuyu. – Dijo sin siquiera verla a los ojos. 

– No tienes hambre igual que ayer en la cena o  antes de ayer o hace tres días.  Debes comer algo o podrías enfermar, sé que tampoco has estado durmiendo bien, te escuché en la madrugada mientras iba al baño.

Momo realmente no quería discutir con la alfa. – No lo sé, simplemente no tengo apetito, Tzuyu. Es cómo si no pudiera pasar bocado.

– Momo, no me gusta como te ves desde hace unos días, debes ir al doctor, es obvio que algo no anda bien contigo. – Dijo preocupada.

Aunque la verdad, la mente de Tzuyu no pudo evitar llevarla a sentir culpa, la imagen de su hermana doblando turnos y haciendo horas extras para traer el pan a la mesa la hacían sentir miserable, en más de una ocasión Tzuyu intentó buscar un trabajo al menos de medio tiempo para ayudar en los gatos de la casa pero Momo no la dejaba con la excusa de que la única obligación de Tzuyu era "ir a la escuela" ya que la alfa pensaba que podía llegar a descuidar sus estudios.

– No es nada, probablemente tenga un resfriado o algo parecido. – Contestó sin mayor importancia.

– ¿Has pensado en que probablemente llegue tu celo en los próximos días? – Preguntó Tzuyu tratando de encontrar una explicación para el extraño comportamiento de la alfa. – Tal vez sea una buena idea que está vez lo pases con una omega.

Desde el punto de vista de Tzuyu, otra cosa que probablemente afectaba a Momo después de su adicción al trabajo era precisamente no hacer el amago por buscar una omega, probablemente su hermana sería más feliz con alguien a su lado que la quiera y apoye, pero Tzuyu sabía perfectamente que Momo siempre la interpondrá a ella antes que a cualquier omega o beta, Momo no era capaz de pensar en su propia felicidad nunca.

A veces se sentía cómo una piedra en el zapato de la mayor.

–Nada de esto pasaría si me dejarás trabajar. – Reprochó la alfa menor.

– Tzuyu, ya hablamos de esto. – contestó Momo. – No quiero que descuides tus estudios y es mi responsabilidad darte lo que necesites.

– Pero te estás descuidando a ti. Mírate, estás al borde del colapso y...

– Tzuyu, no me hagas enojar. – Advirtió con un tono más profundo. – Yo soy la jefa de este hogar y tienes que hacer lo que te digo, yo no importo, solo tú.

Tzuyu apretó los labios, reprimiendo lo que en verdad pensaba. – ¿Preocuparme por mi hermana es un delito?

– No, yo estoy bien, tranquila. Te prometo ir al doctor después del trabajo si es lo que te preocupa. – Contestó con una sonrisa algo cansada. – Estoy segura que no es más que un ligero resfriado..


"Omega" Habló su loba triste.

"No hay omega, olvídala ya"

La verdad era que desde hace un mes, su lobo se había sentido demasiado inquieto y algo triste, en los últimos días su loba parecía algo resentido y hasta tal punto de parecer muerta, por más que Momo intentaba conectar con su alfa más a fondo parecía simplemente no lograrlo, pero trataba de no ser muy dura con ella, después de todo, tenía un hogar que mantener además de cuidar de su hermana desde que era muy joven, no era cómo que eso le dejara mucho tiempo posible.

𝙱𝚕𝚞𝚎 [𝙳𝚊𝚑𝚖𝚘]Where stories live. Discover now