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"El olvido es como una herida. La herida puede sanar, pero ya ha dejado una cicatriz."
➳ Grace Field House, un maravilloso orfanato, cálido y repleto de sonrisas bajo el control de una amable y querida cuidadora.
Sin embargo, secret...
"¡Un arsenal!" Exclamó Emma sorprendida mientras contemplaba sus alrededores, estanterías y mesas repletas de todo tipo de armas.
"¿Minerva dejó toda una armería para los niños que escaparon?" Murmuró a su lado una incrédula Alyssa.
"Fue por casualidad que descubrí este mecanismo en el piano. Cuando probamos de tocarlo notamos que había un problema con el sonido emitido, en otras palabras, este cuarto no fue diseñado para ser encontrado fácilmente." Explicó el adulto paseando por el cuarto placidamente.
"Pero... ¿Cuál es el objetivo de Minerva entonces?" Preguntó la de hebras anaranjadas siguiendo al mayor.
"Quién sabe..." Respondió él con simpleza antes de frenar su paso.
"Elegir lo que más os convenga, no me importan las intenciones de Minerva, este cuarto y estas armas fueron hechas para ser usadas, ¿cierto?" Habló el hombre ahora volteando su mirada ligeramente hacia los menores.
"Nosotros entraremos en territorio enemigo... O mejor dicho, ya lo hemos hecho. Donde vamos no tiene nada que ver con el desierto y bosque que cruzaron, ¡aquí es donde viven ellos! Incluso con armas, las posibilidades de supervivencia son casi nulas. No cuenten conmigo para vuestra supervivencia, así que eligan lo que mejor os convenga." Finalizó el mayor extendiendo una gran escopeta en dirección a Emma.
"¿Qué hacemos?" Preguntó Ray de pronto el hombre se alejó.
"Preferiría optar por algo más ligero." Murmuró la de hebras anaranjadas, sus manos ligeramente temblorosas ante la enorme arma.
"Sonju nos lo explicó, ¿no es así? La clave para la supervivencia es escapar pase lo que pase, de seguro nos sería más útil cualquier cosa que no pueda obstaculizar una fuga potencial." Añadió Alyssa rebuscando entre los cajones.
"Hey señor, ¿tú que piensas llevar?" Se acercó hacia el adulto Emma, este ya cargando diversas armas.
"¡No diré una sola palabra! Aprende a observar y analizar." Dijo el contrario mientras se alejaba, obteniendo un puchero por parte de la menor.
El hombre cargaba con un gran rifle y diversas municiones. A su vez, no tomó ninguna arma de mano, sin contar un pequeño cuchillo.
"Regresen tan pronto como hayan terminado, después de todo, será suficiente con tocar algunas notas en el piano y el pasaje se cerrará suevamente." Indicó el hombre subiendo las escaleras metálicas, cerrando la puerta de un manotazo.
