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"El olvido es como una herida. La herida puede sanar, pero ya ha dejado una cicatriz."
➳ Grace Field House, un maravilloso orfanato, cálido y repleto de sonrisas bajo el control de una amable y querida cuidadora.
Sin embargo, secret...
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Al caer la noche, la bruma azul del día se disipó para revelar las estrellas.
El aire nocturno se tornó fresco y agradable, envolviendo el cielo en una suave caricia.
Los olores de la noche se volvían más intensos, el perfume de las flores nocturnas se desplegaban en el aire, mezclándose con la suave fragancia de la tierra mojada por el rocío.
"Oye, volvamos, se está haciendo demasiado tarde." Habló Sonju contemplando a una Alyssa extendida sobre la hierba húmeda.
Sus brazos descansan a los lados de su cuerpo, relajados, mientras sus piernas se entrelazan suavemente.
Su mirada estaba fija en el cielo oscuro y despejado, sus ojos perdiéndose entre las escasas nubes que flotaban en el horizonte.
"¿Mhmm? ¿Hay un motivo por el cual tú y Mujika viajéis por el mundo?" Preguntó repentinamente la chica, elevando su mirada ligeramente hacia el contrario.
"No, ¿por qué preguntas?" Respondió a secas él, contemplando como la menor se ponía de pie con cuidado.
"Es solo que vosotros sabéis mucho acerca de nosotros y estaba algo curiosa." Confesó la chica.
"Además... Estuve pensando y me parece algo extraño que viajéis cubiertos por capas y atraveséis túneles cuando en teoría vosotros no tenéis problemas en viajar por el exterior. Sin contar el hecho de que los demonios de las granjas son de alto mando y no deberán agradarles las ideas de que otros estuvieran en contra." Añadió la de hebras rosáceas, esta vez ganándose la total atención del contrario.
"Desde luego, eres diferente a los demás, ¿eh?" Murmuró Sonju esbozando una ligera sonrisa.
"¿Huh? ¿A qué te refieres?"
"¿Sigues dudando hacia nosotros?" Preguntó de inmediato el mayor, causando que la expresión de Alyssa de pronto se alarmara.
"¡¿Ehh?! ¡No! ¡No quería decir eso! ¡Estoy muy agradecida de vosotros, en serio!" Se defendió ella nerviosa ante posibles malentendidos.
"Está bien, pero no te equivocas del todo. Vamos, debes descansar, mañana tendrás un día largo." Habló con tranquilidad Sonju, subiéndose sobre la criatura que utilizaba como caballo mientras esperaba a que Alyssa también subiera.
En ese momento la chica lo comprendió, lo que sea que ocultaban Sonju o Mujika no era de su incumbencia...
