Mi comedia romántica de élite está mal, como esperaba.

VOL 6 Capitulo 5 Cercanías

Son las 6:30 pm me tarde un buen rato hablando con Kiyotaka. Ya es de noche y me dirijo hacia los dormitorios siento que los días cansados van a apenas a comenzar y quiero al menos tener un rato de tranquilidad.

Sin embargo siento mi teléfono que llega un mensaje corto y a la vez sustancioso.

Horikita: Maquinas expendedoras…….. ¡ahora!

La remitente es Horikita, y por el contenido del mensaje siento que es hora de mi ejecución. Me encantaría hacer algo, lastimosamente solo puedo aceptar mi destino para lograr una reducción en las penas.

Asi que me dirijo al punto donde dijo, la noche presente hace que los caminos se vuelvan muy silenciosos, haciendo que el sonido del viento chocar con las hojas de los árboles sea lo que amortigua el ambiente.

Afuera de los dormitorios hay varias máquinas expendedoras, frente a ellas hay una chica con pelo largo viéndolas fijamente, tal vez decidiendo que quiere tomar. Solo por si intensidad de su mirada siento que quiere destruir la máquina.

Después de unos segundos de ponderación me acerco hacia ella. Mis pasos suenan ensordecedores ya que es un lugar bastante desolado. Ella al escuchar los pasos acercarse gira su cabeza, y dirige sus hermosos ojos rojos hacia mi figura que se acerca. Frunce un poco el ceño.

Horikita: Has llegado.

Hachiman: Tenía que llegar lo más rápido posible, no te ves muy feliz de que haya llegado.

Horikita: Hmph, ¿café?

Hachiman: Si, claro, gracias.

Ella saca la lata de café y me lanza sin problemas, aunque digo sin problemas sino hubiera tenido buenos reflejos loas seguro es que hubiera sido golpeado en la cara.

También de una vez saca una lata de té negro. Y da un giro de talón dándome la espalda.

Horikita: ¿Te vas a quedar parado ahí?
Hachiman: Supongo que no.

Horikita sigue hacia una de las bancas y se sienta en ellas, le sigo el juego y me siento a una distancia prudente.

Hachiman: Cortemos el rollo, ¿para que me llamaste?

Horikita: Ara, siempre piensas que te llamo es porque tengo que decirte algo me suena un poco ofensivo.

Hachiman: lo siento, pero si eres tú siempre tienes que decir algo, así de directa eres.

Horikita: Bueno, tienes razón.

Hachiman: ¿Me vas a recriminar por haber huido esta tarde?

Horikita: Obviamente, fue algo inmaduro y patético que a los ojos de los demás pareciera como si fueras una lagartija envuelta en aceite que para lo único que sirve es para escabullirse hasta el fin de los días.

Hachiman: Ugh, en verdad no tienes consideración por mi integridad ¿ya te sientes mejor?

Horikita: Si te soy sincera, si, se sintió bastante bien, ahora puedo preguntarte con tranquilidad, ¿por qué saliste corriendo del aula?

Me rasco un poco la mejilla en señal de vergüenza, en esta situación es mejor decir la verdad, tapar la realidad con mentiras puede que destruya lo que he tratado de construir.

Hachiman: Tenía un poco de miedo que de pronto me viera comprometido en la situación, es algo que he tratado evitar supongo.

Ella me mira inmovible, de esa manera que juzgando todas mis expresiones. Despues de un segundo ella vuelve a hablar.

Horikita: Cobarde.

Guahhhhh.

Otro golpe justo en el pecho.

Horikita: Sabes Hikigaya-kun, sé todo lo que hasta hecho por la clase, y también tu intención de mantenerte al margen, no estoy de acuerdo con ella pero lo respeto, si simplemente te hubiera preguntado que si querías venir y me hubieras respondido que no, lo aceptaría con normalidad, ¿te parezco la clase de persona que obliga a las personas a hacer lo que deseen?

…………….

……………..

Si……………..

Horikita: pensaste que si , ¿no es verdad? Estoy segura de que lo pensaste, tu expresión me dice que lo acaba de hacer, vamos, vamos, sé un poco un hombre y dímelo en la cara.

Hachiman: No sé a qué te refieres,Horikita-sama, nunca en pensado en tal cosa tan grosera que podría arruinar tu imagen pulcra.

Horikita: Ahora estás siendo sarcástico.

Hachiman: ¿me puedes culpar? Ahora parece que lees mentes a través de las expresiones. Y para corregirte, nunca pensé afirmativamente.

Horikita: Hmph.

Eso estuvo cerca, si ella logra leer mis expresiones para adivinar mis pensamientos, en verdad estaré frito. Olvídate de sobrevivir, seré completamente esclavizado por ella.

Hachiman: ¿Qué piensas sobre este examen?

Horikita: ¿ahora quieres hablar sobre él?

Hachiman: ¿Tu no?

Horikita: *suspiro* este examen tiene muchas particularidades que definen la fortaleza interna de la clase , si solo fuera eso nosotros lo podríamos controlar sin embargo con la inminente intervención de alguna de las otras clases solo hará que sea más complicado manejar los asuntos.

Hachiman: mmmmmm…..

Horikita: ¿Qué piensas?

Hachiman: Sé que dije que no quiero involucrarme en este examen pero la situación ha cambiado, así que quería pedirte que me dejes de participar en él.

Horikita: ¿Qué situación?

Hachiman: No te puedo dar muchos detalles, solo tienes que saber que de una manera o otra terminé encontrando al traidor y vamos a decidir en este examen su destino.

Horikita: ¿encontraste al traidor? Supongo que no me lo dirás.

Hachiman: Por ahora no, el momento es delicado así que es mejor mantenerlo entre nosotros. Y de todos modos voy a necesitar tu ayuda para superarlo.

Horikita: Está bien,solo con la condición que me contarás los detalles de tu plan.

Hachiman: De acuerdo, pero tiene que ser por teléfono o en un lugar más solitario. No quiero arriesgarme a ser escuchado.

Frunce un poco al ceño ante esta oración. Tal vez por la mala experiencia que pasamos con Ryuuen.

Horikita: Ni que lo digas.

Suspiro internamente, estaba un poco nervioso al decírselo, por otro lado ya estoy mas seguro a la hora de enfrentar este examen. Le daré los detalles más cruciales pero es hora de hacer marchar el reloj.

El silencio se apodera de nosotros, si soy sincero es algo incómodo, demonios hace tiempo que no tenía uno de estos. Mis ojos se dirigen hacia Horikita que la veo ¿avergonzada?

¿estoy viendo mal? O ¿el invierno ha comenzado a hacer estragos en mi cabeza?

Hachiman: Horikita, ¿estás bien?

Horikita:Si…….. estoy bien.

Con dudas me responde, y ahí es donde otra vez muere la conversación. Ahora estoy en un callejón sin salida.

Horikita: Sabes Hikigaya-kun, siempre me he preguntado una cosa, más que todo últimamente. ¿Puedo preguntarte?

¿desde cuando habla tan cortésmente?

Hachiman: Adelante, te escucho.

Después de escuchar mi aprobación respira fuertemente un par de veces antes de decir.

Horikita: ¿por qué no me llamas por mi nombre?

Hachiman: ¿huh?

¿huh?

¡¿Huh?!

¡¡¡¿¿¿Huh???!!!

¡¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿HUH?????!!!!!!!!

Abro mis ojos como platos, siento mi cabeza revolotear como si fuera una licuadora.

Tal vez porque mi expresión es muy exagerada que las mejillas de Horikita se enrojecen un poco.

Es mejor recomponer mi compostura, no puedo quedar muerto del asombro aún. Por lo meno quiero la razón de esto.

Hachiman: ¿por qué tan de repente?

Horikita: Solo….. solo pienso que es extraño, eres la primera persona que podría considerar amigo, sin embargo incluso en estos momentos me llamas por el apellido.

Hachiman: Es solo que pensé que no te gusta a que te llamarán por tu nombre.

Horikita: No me gusta  si no son personas cercanas, en cuanto a personas que lo son, en verdad no me importa que digan mi nombre. Pero verte llamar a Kushida-san, Sakura-san, Hasebe-san, Ichinose-san, entre otras personas, por sus nombres me hace sentir como si nuestra relación careciera de un vínculo.

¿teme que ya no la considere importante y la reemplacé por las demás personas?

¿ o es algo más?

En verdad no lo sé, aunque trato de actuar seguro frente a las demás personas, todavía soy un amateur en las relaciones interpersonales.

Aunque me parece extraño que solo haya mencionado a chicas, también tengo amigos hombres ¿Sabes?

Aún estoy confundido pero es mejor que aclare la situación antes de que salga de control.

Hachiman: Horikita, sé que no soy el más confiable y sociable, sin embargo quiero que tengas en cuenta que no hay ninguna necesidad de validar un vínculo, porque para mí seguirás siendo una persona importante. Eso solo lo podemos cambiar, tú y yo.

Sus mejillas se colocan rojas como si fuera un tómate.

Maldición se que suena cliché y embarazoso, pero no tienes que hacer esa cara. Después gira su rostro hacia un lado y se queda por unos segundos mirando hacia el espacio oscuro que nos rodea.

Horikita: Está bien, aún así quiero que me llames por mi nombre, quiero poder escucharlo de tu boca.

Oy Oy Oy Oy Oy Oy Oy Oy Oy Oy

Hachiman: Trataré de hacerlo.

Tomo varias bocanadas de aire y me preparo.

Pasan varios segundos hasta que ya reuní todo mi coraje mental para decirlo.

Hachiman: Suzune.

Cuando esa palabra sale de mi boca el rostro de ella se coloca aún más rojo, me hace preguntarme si es alguna clase de enfermedad que está sufriendo en este momento.

Su respiración es pesada.

Hachiman: oye, ¿estás bien?

Por segunda vez le pregunto.

Después de un momento se tranquiliza.

Suzune: Si, estoy bien.

Y ella por segunda vez me responde.

Hachiman: No sería justo que yo solo te llamé por tu nombre, así que tú también me vas llamar por el mío.

Suzune:……………… está bien………….

Cierra los ojos antes decir.

Suzune: Hachiman-kun.

Casi como un susurro lo dice, parece que no soy el único que no está acostumbrado a la situación.

El aire nocturno es lo que golpea nuestros rostros, en mi caso me ayuda a refrescarme del calor de la vergüenza.
Pensé que nos quedaríamos así por un tiempo, hasta que el sonido de un celular suena en el ambiente. Rompiendo así el aire de serenidad.

Es el celular de Horikita.

Ella al ver la pantalla responde rápidamente.

Suzune: Buenas noches, Nii-san.

¿Nii-san?

¡¿Manabu-senpai?!

Suzune: Si, estoy bien.

¿Qué demonios pasa?

No, espera, tal vez lo sé.

Suzune: estoy comiendo bien.

Ese siscon de clóset, está intentando acercarse a su hermana menor.

Jejeje se nota que son familia.

Los tsunderes no son capaces de demostrar su afecto abiertamente así que utilizan estás pequeñas tácticas de acercamiento.

Suzune: Estoy tomando algo en las máquinas expendedoras.

Me alegro que Senpai haya reconsiderado arreglar su relación desde temprano, es triste que no puedas hablarle a tu hermanita hasta el final de tu curso. Así que siento un poco de satisfacción por ello.

Suzune: No, estoy hablando con Hachiman-kun.

Y todos los buenos sentimientos se fueron al caño al escuchar esto.

Suzune: ¿Eh? …….. ¿quieres que te lo pasé?

Al escucharla decir esto, hago la señal de x con mis brazos, no quiero escucharlo ahora. Siento un destino trágico que se cierne sobre mi.

Ella al ver esto, suelta una pequeña sonrisa antes de decir.

Suzune: Si, claro, ya te lo paso.

Maldita sádica. Juro que me aseguraré que me las vas a pagar.

En contra de mi voluntad ella me pasa el teléfono. Con nerviosismo logro sacar algunas palabras.

Hachiman: Ho-hola……….

Manabu: No voy aceptar que estés con Suzune aún. Tendré que juzgarte a fondo.

Y después de decir esto cuelga el teléfono. Dejando el pitido final de la llamada.

Yo me quedo boquiabierto ante su respuesta, hay demasiados malentendidos para aclarar, y que me haya llamado Hachiman en la llamada que él tuvo, solo hizo que el malentendido se extenderá aún más.

Siento que he despertado el Boss final de la escuela, el super Siscon de clóset, no sé qué Dios está supervisando mi vida, pero sé que el bastardo se debe de estar riendo de mí infortunio. A veces me pregunto si la mala suerte tiene propiedades magnéticas, porque yo soy un imán de ella.

La mirada de Suzune que mira mis expresiones con una mayo confusión, solo hace que quiera enterrar mi cabeza en un hoyo y quedarme a vivir por siempre ahí.