Fics de Naruto (Volumen 2)

40 hasta 48?

Capítulo 38: La suma de todos los males

gente hablando "Interesante."

Gente pensando. "Creo que te voy a matar".

Hablar no humano. "No te mereces ese poder".

Pensamiento no humano. "Detenerlo es primordial".

Jutsus / nombres desconocidos. "¡Mokuton Hijutsu Jukai Koutan!"

Descargo de responsabilidad: Naruto o sus personajes no me pertenecen, Masashi Kishimoto sí.

capitulo 38

Terror, Anko no podía pensar en nada más que eso.

Ella había estado saltando junto con Yugao y sus compañeros ANBU de techo en techo hasta que Mitarashi de repente sintió un sentimiento oscuro proveniente de Naruto; era algo del mismo infierno.

Solo podía pensar en lo peor, tal vez algo horrible le había pasado a Karin, y por eso, Naruto estaba enojado como nunca. Era una sensación tan aterradora que Anko no podía pensar en nada más que quitarse la Marca Maldita de su cuerpo para dejar de tener una conexión con Naruto.

Yugao notó el extraño comportamiento de la Señora Serpiente. La mujer ANBU se detuvo y se acercó, preguntando con preocupación: "¿Qué sucede, Anko?"

Estaba pálida, sudorosa y temblando de una manera que nunca pensó ver en Anko. De hecho, nunca pensó en ver a una mujer como ella en un estado tan deplorable.

La Mitarashi, sintiéndose impotente y con los ojos llorosos, se abrazó a sí misma mientras miraba a Yugao. "D-Debemos huir", logró decir antes de que todos sintieran perder el conocimiento debido a la mala intención que había eclipsado el entorno.

Sin embargo, antes de que pudieran entrar en el mundo de los sueños, los tres ANBU lograron negar con la cabeza. Anko, sin embargo, no pudo porque el sentimiento era mucho más intenso para ella debido a la conexión que compartía con Naruto.

Yugao se arrodilló y se quitó la máscara mientras hacía grandes esfuerzos para contener las náuseas. "¡A-Anko!" exclamó, tartamudeando un poco porque no podía contener todos estos reflejos.

Rápidamente se tapó la boca para evitar cualquier accidente innecesario.

Yugao maldijo; ella no tenía idea de lo que estaba pasando. El Uzuki no quería correr riesgos y decidió seguir el consejo de Anko.

Agarró uno de sus brazos y lo puso alrededor de su cuello para ayudarla a levantarse. "Hecho", susurró y se dio la vuelta para ordenar a sus compañeros que se fueran. Sin embargo, se encontró con una escena horrible.

Primero, notó que dos manchas rojas pasaban por sus costados, y rápidamente dedujo que eran los hombres que habían sido sus compañeros desde su primer día como Capitán ANBU, pero ahora no eran más que grandes charcos de sangre en el suelo.

Concluyó que la criatura, que se acercaba a gran velocidad, era la responsable. Cerró los ojos, justo cuando las garras de la bestia estaban a unos centímetros de su rostro.

Momentos antes, en el lugar donde estaban el Hokage y compañía, Kyofu se puso de pie y miró hacia el lugar donde podía sentir las presencias de Anko y Yugao.

Miró a los lados y fijó la vista en el resto, que parecían mucho más confundidos y aterrorizados que él. "Maldita sea, justo lo que necesitaba", pensó el clon con frustración.