-No lo sé-murmuró dudosa pues no había escuchado cosas buenas de esos lugares, por eso nunca se había atrevido a ir a uno, además no había tenido tiempo ni dinero para ir, en el pueblecito en que había vivido aquellos lugares no eran muy comunes. 

-Pues yo sí sé y usted señorita necesita cambiarse-le dijo en un tono de voz divertido a la vez que la tomaba de la mano y la arrastra escalera arriba, al entrar a la habitación de ella y él empezó a sacar ropa de las maletas pero por su cara de disgusto Liz dedujo que sus atuendo no eran de su agrado.

Al final después de tanto buscar, husmear y desempacar no encontró nada adecuado. 

-En serio nada de esto sirve para ir a una fiesta-le reprocho indignado y a la vez incrédulo- Ahora regreso-agrego antes de salir de allí como un rayo. Liz se dejó caer en la cama boca arriba unos minutos más tarde escuchó la puerta abrirse y allí estaba Zack de pie con una bolsa en mano de la cual saco un vestido rojo y unos tacones que atemorizaban por la altura del tacón. 

-¿De dónde has sacado eso? -preguntó ella poniéndose de pie de un brinco. 

-Eso no importa ahora cámbiate aquí te espero-Le respondió él quitándole importancia al tema. 

-Bien-dijo regañadientes. 

Entro al baño no muy convencida de lo que iba hacer pero se dijo así misma que era tiempo de madurar de salir al mundo y dejar de ser aquella chica tímida aunque iba hacer un verdadero reto admitió. 

-Esta hermosa-le alago al verla salir del baño con el vestido puesto y los tacos ,ellas se mira en el espejo e hizo una mueca por su actuando el vestido era muy corto para sus gusto estaba acostumbrada a llevar vestido que le quedaran por debajo de las rodillas, además aquel vestido resaltaba sus curvas lo cual no era de su agrado ,se quitó los tacones ya que no le permitían caminar bien y se puso unos más bajito de ésos que solía usar para el trabajo, a pesar de las protesta de su amigo no pudo hacerla cambiar de opinión, su maquillaje era perfecto tal como solía usarlo natural no le gustaba lo estrambótico. Aunque en algunas ocasiones era necesario. 

-Creo que este vestido es muy corto- se queja por tercera vez. 

-Así está perfecta-le aseguro Zack mientras le abrió la puerta del coche. 

-Cuéntame más acerca de ese lugar- indago curiosa una vez ambos estuvieron sentados en sus respectivos lugares. 

-Es un lugar espectacular, donde solo entran personas de la alta sociedad, ya verás que te va a encantar y con lo bella que está estoy seguro de que conseguirás más de un pretendiente - dijo pícaro. 

-Entonces cómo vamos a entrar yo no soy rica y tú tampoco- dijo haciendo caso omiso a las últimas palabras de su querido amigo. 

-Cierto, pero mi novio es muy rico, además es el encargado del club y si no tienes más dudas podemos irnos ya. 

-Solo tengo una duda más ¿porque si tu novio es rico trabaja en ese lugar?-dijo ella pues aquello le resultaba extraño. 

-Querida Liz lo que sucede es que su padre quiere que él se encargue de la empresa pero Robert tienes otros planes en mente. Su padre es muy autoritario. 

-Comprendo ya podemos irnos - dijo divertida por la cara de fastidio de su amigo, éste puso el coche en marcha e inició su recorrido, las calles estaban despejadas lo cual le facilitó desplazarse con facilidad. 

Llegaron al club y ella tuvo que reconocer que el lugar era indiscutiblemente muy sofisticado y elegante, Liz conoció a Robert el novio de Zack eso fue tan extraño pensó ella, pero se alegraba por ellos se notaba que se querían de verdad. Ahora se encontraba en el tercer nivel de aquel local , miro detalladamente el lugar divisó una gran barra con toda clase de bebidas disponibles, una pista de bailes en el medio, al fondo varios sillones que adornan el lugar, frente a la barra había varias sillas, la música era suave y lenta a diferencia de la del primer piso, el lugar está hecho completamente de cristal y uno muy especial que no permitía que el ruido de afuera se escuchará, así como las personas del exterior no podían ver nada de lo que sucedía dentro de aquel nivel, por lo que Zack le había contado allí solo se encontraban personas importantes y el dueño figuraba entre una de ellas el cual era un hombre millonario todo allí era costosos desde la alfombra que cubría el piso hasta las luces que iluminan el lugar. 

SR.Styles.Where stories live. Discover now