CAPÍTULO 8: "Tinnakorn Keeratiphiphat"

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Buenas tardes... mi querida gente...

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Brrrrrrrr!!!

[Sí, Khun.] Wittaya rápidamente respondió la llamada cuando vio el nombre de la persona que llamaba.

[¿Dónde está el bastardo? Dile que tengo algo que discutir con él.] Dijo el magnate Tinnakorn.

Tinnakorn Keeratipipat, era una de las figuras más influyentes de la industria empresarial. Si se creía que NakRob podría producir miedo, ninguna de sus acciones se comparaban con la crueldad del magnate.

[Si, se lo haré saber.]


Mansión Keeratipifhat

¡¡Aaag Hugk!!

Los gritos de un hombre de unos cincuenta años siendo golpeado hasta la muerte se podía oír. Su cuerpo estaba magullado, su rostro destrozado y cubierto con su propia sangre estaba siendo llevado por ambos brazos por dos guardaespaldas.

“¡Te atreves a jugar con alguien como yo! Acaso, ¿No sabes que alguien como yo no es humano?” La voz del magnate Tinnakorn estaba llena de ira, pero aún mantiene su calma.

"Lo siento, pero me obligaron de nuevo."

"¿Quién te obligó?"

¡¡Aah Hugk!!

El hombre gordito fue apoyado una vez más por dos guardaespaldas que sostenían, mientras otro guardaespaldas lo golpeaba en medio de su cuerpo.

“¿Quién te obligó? ¡Habla para que mi jefe tenga la amabilidad de dejarte regresar conntu esposa e hijos." la voz del guardaespaldas lo amenazaba. Este subordinados era la mano derecha de Khun Tinnakorn y golpeaba tanto al individuo que estaba a punto de ahogarse en sangre y morir.

"Khun, te lo ruego, pero no te metas con mis hijos y mi esposa... yo..."

Dos manos gruesas se levantaron para mostrar sus respetos, el cuerpo tembloroso rogaba, lágrimas fluían por su rostro sucio que se mezclaba con la sangre de su rostro magullado.

"Si me dices quién te lo ordenó, prometo no tocar a tus hijos y esposa." El magnate Tinnakorn se sentó cómodamente a observar los acontecimientos e hizo una promesa.

“Khun .... te lo ruego..... Khun Phiphop me obligó a hacerlo."

¡¡Bang Bang Bang!!

Sonaron de inmediato tres disparos seguidos. Los disparos fueron ejecutados y disparados en medio de la frente del individuo, el magnate Phiphop le quitó la vida inesperadamente a una persona que acababa de terminar de hablar.

“Dije que perdonaría a tu esposa e hijos. Pero no dije que te perdonaría la vida."  Tinnakorn entregó el arma que humeaba desde la punta del cañón a su guardaespaldas personal.

Al magnate Tinnakorn siempre le gustava matar a quienes lo traicionaban con sus propias manos, eso lo hacía muy diferente de su hijo NakRob que a menudo dejaba que sus subordinados hicieran ese tipo de limpieza en su lugar.

"¡¡Eh!! ¡Maldita sea! Incluso en estos días debo tener a alguien que muera a mi lado. La vida ya no puede ser pacífica en estos tiempos."


"¿Has vuelto?" Napha vio a su marido entrar en la mansión y rápidamente corrió para sostener el traje que Khun Tinnakorn se quitó de inmediato.

"Uhm."

"Iré y te traeré un poco de jugo de naranja frío y algunos bocadillos."

"No es necesario."

“¿Adónde ha ido tu hijo?” dijo la voz del ahora frustrado esposo.

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