La Luna Es Nuestra Piedra Preciosa (Oficial)

Capítulo 7 - Beckham Martinelli. (parte 2)

Me cambie de vestido con ayuda de Antonella. Y llegamos al lugar donde seria la fiesta. William se acercó a mí.

-¿Lista para el baile? - me dijo.

-Nací lista. - dije y sonreí. Tomo mi mano y nos dirigió a la pista de baile.

Empezó a sonar Thinking out loud de Ed Sheeran. Y empezamos a bailar.

-¿Te gusto todo? - me pregunto.

-Si. Todo fue tan bonito.

-Me alegro de que te gustara. No pude decírtelo en la iglesia, pero te ves hermosa.

-Gracias. Tú te ves muy guapo.

-Gracias.

Seguimos bailando hasta que la canción se acabó. Seguimos la fiesta hasta que era momento de algunas palabras de las personas cercanas. Shawn era el primero.

-Hola, el más guapo de la noche está aquí, aunque le preste el título a Will por hoy. Ustedes dirán, Shawn ¿por qué vas tu primero? Fácil. Gracias a mi existe esta bella pareja, soy el hada madrina, así que deberían agradecerme, hoy tienen bebidas gratis gracias mí. Después de esa gran introducción diré; William y yo hemos sido amigos desde muy pequeños, lo he visto en muchas etapas; vi al William soñador e inocente, vi al William destruido y sin ganas y vi al William serio e imponente. Todas esas fases han sido para mejorar, Will. Estoy orgulloso de poderte llamar amigo, hermano. Estoy orgulloso de que por fin decidas ser feliz, porque sé que esta fase nueva será del William feliz y enamorado. Te amo hermano. Y ahora Alessia; chica te ganaste la lotería, pero William también se la gano contigo; nunca he conocido a alguien como tú, alguien que nunca se rinde y da todo por su familia no importa lo cansada o triste que este. Gracias por llegar a la vida de mi hermano. Te amo a ti también nueva hermana.

-Bueno después de un poco del ego de Shawn me toca a mí, hola, me llamo Nathaniel. Sinceramente no pensé mucho en lo que decir para hoy, así que estoy improvisando. Empezare diciendo que Alessia oficialmente ya eres mi hermana, eso es genial; gracias por aceptar a esta familia tan loca y por adaptarte tan bien. Siempre te ayudare y te querré mucho. William, hermano; gracias por volver y aunque con algunos cambios seguir siendo mi hermano mayor increíble. Espero esta etapa sea solo de felicidad.

-Hola, el Beckham más guapo está hablando. Solo vengo aquí a decir; Alessia bienvenida, hermana. Te quiero y a William también, aunque sea un cubo de hielo. Si te hace algo y lo quieres demandar, Lessi, aquí estoy. Adiós.

-Bueno. Soy mama. Solo quiero decirte William que estoy orgullosa de que seas tan valiente y tan increíble hijo dándome una hija. Los amo mis niños.

-Hola, soy Donato y solo quiero decirte William; gracias por llegar a mi vida y a la de mi hermana. Espero que la hagas muy feliz. Ángel, espero seas el ser humano más feliz sobre la tierra, te lo mereces.

-Hola, yo de nuevo. Hijo, tu mama quiere ser abuela. Quiero nietos. Ahora sí, los amo.

Después de todas esas personas hablando, la fiesta siguió.

-¿Me acompañas? Quiero llevarte a un lugar. - me dijo Will. Asentí

Caminos hasta estar afuera del salón y nos sentamos en una banca. Ya era de noche y la luna era tan grande y bonita.

-Mi hermano y yo teníamos algo singular con la luna; no quiero que pienses que estoy loco, pero me siento cerca del cuándo le hablo a la luna y quiero presentarte con él; ¿estas bien con eso?

-Claro. - le dije con una sonrisa. Estaba feliz de que compartiera su mundo conmigo.

Tomo un respiro y vio hasta la luna.

-Hola Ed. Nunca creí estar haciendo esto, pero aquí estoy. Siempre me dijiste que deseabas verme casado, verme esperar a una bella dama vestida de blanco. Hermano, lo cumplí. Me case, duele que no estes aquí. Estuve pensando en ti, desde que me desperté. En como seria que tu también dijeras unas palabras en mi boda, en cómo te llevarías con Alessia. Ya sané Edward, respirar ya no se me hace pesado, ya no busco correr de todos cuando hablan de ti, ya no lloro al hablarte. Después de todo eso, sin lágrimas y con la esperanza de que me escuches. Compartiré mi luna con ella hermano. Ya no estoy solo, Ed. 

Sus ojos se empezaron a cristalizar y los míos con los de él. Lo abrace, cuando mis brazos lo rodearon; empezó a llorar.

-Ya no estás solo, Will.

-Quiero que bailemos y que él lo vea.

Asentí y en mi celular puse la canción que bailamos en nuestro primer baile de esposos.

Agarro mi mano y empezamos a bailar, pero esta vez se sentía más íntimo, más natural, más nosotros.

Bailábamos y la luna era testigo.

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Hola, hola.
Solo puedo decir que amo mucho a will jaja
Los amo.
-E.

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