La Luna Es Nuestra Piedra Preciosa (Oficial)

Capítulo 4 - Desiciones.

14 días habían pasado.

14 días desde que acepte casarme con un completo desconocido.

Durante ese tiempo, el vino casi todos los días para explicarme las cosas que tenía que saber; cosas cómo lo que diríamos cuando nos preguntaran sobre nuestra relación que por lógica no podíamos decir que empezó hace poco. También tuve que explicarles a mis hermanos que tenía novio y que pronto lo conocerían, les invente que no les había dicho para no preocuparlos con nada. También durante ese tiempo salí del hospital y tuve reposo.

William Thomas Beckham pronto se volvería mi esposo y yo simplemente no lo creía. Todo paso demasiado rápido, hasta hace unos días yo era una mujer soltera y ahora me iba a casar.

Iba en camino al bar de Shawn. - Quien ahora me pedía que le dijera por su nombre por ser la prometida de su mejor amigo. - Tenia que verme ahí con William y Nathaniel. Sabía que la fiesta a la que me iban a llevar para presentarme era mañana. Me encontraba tan ansiosa por eso. Mi cambio 360 empezaba con esa fiesta.

Cuando llegue al bar, ya me estaban esperando en una mesa. Era muy temprano y el bar estaba cerrando y por lógica vacío. Cuando entre, los tres me vieron y yo me senté al lado de Shawn, que era el único lugar libre en la mesa que ocupaban.

- Hola cuñada. - dijo Shawn tomándome por sorpresa. Puse los ojos en blanco sin saber que decir.

Escuché a Nathaniel reírse y cuando los volteé a ver, William le ponía mala cara a Shawn.

- ¿Que? Yo solo me estoy acostumbrando al título que llevará Lessi por un año. - dijo encogiéndose de hombros. Ambos hermanos lo voltearon a ver negando con la cabeza, Nathaniel parecía divertirse.

- ¿Como te sientes, Alessia? ¿Ya no te duele nada? - habló William por primera vez desde que llegue.

- Le preguntas eso desde que salió del hospital. Will, querido. Cambia el saludo. - dijo Shawn.

- Solo quiero saber si esta completamente bien. - dijo  Will.

- Estoy mucho mejor. Ya no hay rastros de los golpes. - dije hacia William. Que asintió con lo que dije.

- Bien. Te pedimos que vinieras para darte algo. - dijo Nathaniel.

- ¿Que cosa?

- El vestido que usarás mañana y tu anillo. - dijo William. Supongo que pudo notar mi cara de sorprendida porque siguió hablando.

» Elegí un vestido para ti, para mañana. Lo elegí negro. Ese es el color que siempre uso, pero para eventos futuros, tú decidieras que ponerte. No tienen que ser negros, puedes ponerte el color que gustes y los vestidos que te gusten. - Asentía mientras me iba explicando.

» En cuanto al anillo; Te presentaré como mi prometida, entonces tienes que tener anillo. Durante estos días le pregunte a Shawn que te gustaba para poder mandarlo a hacer. Espero sea de tu agrado.

Sacó una pequeña cajita con un anillo. Era hermoso, un anillo con un diamante medianamente grande con pequeños diamantes rodeando el grande, simulado una flor.

Era hermoso. Sonreí ante tan bonita joya.

- Podías elegir cualquier anillo, no forzosamente uno que me gustara. - dije viendo el anillo, que se había tomado el tiempo de crear.