Capítulo 110: Luna fría en brazos

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En la capital llovió sin cesar durante unos días, por lo que el cielo era de un gris sombrío, las nubes oscuras rodaban en el horizonte como tinta salpicada. En medio de la brumosa llovizna, Shen Jue salió del Palacio Qianqing y Shen Wenxing le tendió un paraguas. Justo cuando bajaban por el camino del palacio, vieron a un anciano con las manos en las mangas de pie junto al muelle de la puerta y esperándolo. Era el gran secretario sénior, Zhang Zhao. Shen Jue enarcó una ceja y se acercó lentamente a él.

Al verlo llegar desde la distancia, el anciano sonrió mientras avanzaba para saludar con las manos juntas. Ahora, el poder de Shen Jue era extremadamente alto, por lo que los funcionarios de alto rango de la Gran Secretaría inclinaban la cabeza y saludaban con las manos juntas cuando lo veían.

Sin embargo, Shen Jue no se quedó ahí para recibir el saludo. Levantó la mano y lo ayudó mientras decía:

—¿Qué está haciendo aquí, gran secretario sénior?

—Usted está ocupado y no ha venido a la sala de audiencias oeste para escuchar la discusión de hoy, así que he venido especialmente a verlo. —Zhang Zhao tomó el paraguas de las manos de Shen Wenxing y lo sostuvo personalmente para Shen Jue. Los dos caminaron hombro con hombro por el camino del medio mientras las gotas de lluvia caían sobre el paraguas, haciendo sonidos de repiqueteo.

Shen Jue normalmente se inmiscuía en los asuntos del gobierno, y estos pedantes literatos se mostraban extremadamente reacios, pero hoy él había acudido con entusiasmo. Shen Jue se mostró impasible y se limitó a decir:

—Gran secretario sénior, si quiere algo, no dude en decirlo.

—Esta mañana, la Gran Secretaría recibió un informe secreto de los exploradores; un gran ejército de bárbaros se reunió en las afueras del Paso Shanhai, y parecen tener una tendencia hacia el sur. El Ministerio de Hacienda ha recaudado fondos militares durante casi dos meses, pero todavía no tienen una cantidad sustancial. ¿Qué... cree que debemos hacer, oficial en jefe?

[El Paso Shanhai es uno de los principales pasos en la Gran Muralla China, y servía como puesto defensivo contra el noreste de China / Manchuria.]

Shen Jue lo miró de reojo; el movimiento de su fluida mirada no contenía temperatura. Se acomodó las mangas y dijo:

—Gran secretario sénior, ya que ha venido a buscarme, debe tener un plan en mente, ¿verdad?

—Hay una sequía primaveral en el noreste, y hay desbordamientos por atasco de hielo en el río Amarillo. Todos los lugares quieren utilizar dinero, y hay grandes problemas por todas partes. Las políticas de recuperación de tierras han sido abolidas y no hay registros de las inscripciones. Al principio, podíamos pensar en formas de obtener estos fondos militares de la tierra, pero eso tampoco es suficiente ahora. —Zhang Zhao frunció el ceño, con el rostro cubierto de angustia—. Ahora, el tesoro nacional está al límite, derribando la muralla oriental para reparar la occidental. Los impuestos que se habían recaudado antes se gastaron por completo en un abrir y cerrar de ojos. Oficial en jefe, en mi opinión, por el bien de este momento, sólo podemos aumentar los impuestos.

[Derribando la muralla oriental para...: metáfora para los esfuerzos desesperados que no constituyen soluciones completas.]

Shen Jue movió la mirada.

—¿Dónde aumentarían los impuestos?

La expresión de Zhang Zhao se volvió solemne mientras decía:

—Jiangnan.

Shen Jue detuvo sus pasos y se quedó de pie, sin hablar.

La lluvia caía profusamente, y Zhang Zhao puso el mango del paraguas en las manos de Shen Jue, inclinándose y saludando profundamente con las manos juntas.

El gobernador está enfermoWhere stories live. Discover now