Saekki •NoMin•

50. Declaración Sincera

—Ryu, por favor escúchame —Pidió él tomando el brazo de la menor para detenerla.

—Escucha antes de hacerte la ofendida —Regañó RenJun haciendo un rápido movimiento con su cabeza, alzando el mentón de manera amenazante mientras se cruzaba de brazos—. No estamos para hacer un escándalo...

—Es que no lo entiendo, no me dijiste nada en todo estos días y de repente me entero porque te escucho hablando con Renjun —Reclamó la peliazul abriendo sus ojos levemente, luciendo completamente indignada mientras miraba al azabache.

Jaemin observaba observaba a su alrededor algo alarmado al notar algunas miradas sobre ellos, y no era para menos, habían estado siguiendo a Ryujin por todo el pasillo para poder hablar con ella luego de que los escuchara hablando sobre Jeno, sinceramente quería contarle a la menor, pero sabía que su resentimiento con el rubio era incluso mayor del que él era capaz de sentir, pero no podía juzgarla, había sido testigo de algunas de las mayores humillaciones que había sufrido por parte de Lee Jeno, por la misma razón habia estado trata de buscar el momento y el cómo decírselo.

—Ryu... te juro que te iba a contar, pero no sabía cómo hacerlo, se que lo detestas, estaba tratando de hacerlo de la mejor manera posible —Murmuró él con nerviosismo mientras se acercaba a la menor, tomando una de sus manos la cual fue rápidamente liberada por parte de la chica.

—¿Cuál es la mejor manera de decirme que estás con el bastardo de la universidad? Jaemin, te golpeo y te humilló en frente de todos ¿Tal cegado estás como para perdonarlo y correr hacia él de esta manera? —Cuestionó ella frunciendo su ceño mientras hacia el intento de marcharse.

—No lo entiendes —Dijo él por lo bajo, tomando el brazo de la menor con cuidado, bajando su mirada con vergüenza—. Ryujin tu sabes que es lo que siento por él, me enamoré de lo que es, no de lo que aparenta... y sé, de verdad sé que todo lo que hizo es razón suficiente para enviarlo a la mierda, pero no puedo, jamás he podido hacerlo, incluso si lo he intentado, no puedo y él...

—Por dios, realmente crees que ese imbécil va a cambiar así de fácil —Comentó ella luciendo algo sorprendida, soltando una suave risa sin gana alguna—. ¿Realmente crees que es capaz de amar a alguien?

—Sí...

—Por favor.

—Si es capaz —Repitió él observandola con aflicción mientras ella alzaba sus cejas—. Ryujin yo creo en él, tú no lo conoces como yo...

—Estoy agradecida de no conocerlo.

—Ryujin deja el drama, lo quieras o no esto no es asunto tuyo, tú rol y el mío es el de ser los amigos de Jaemin, se supone que incluso si no es de tu agrado deberías apoyarlo —Regaño RenJun frunciendo su ceño—. Esto no es algo que debas aceptar o no, es nuestro amigo, si lo que te molesto fue que no te lo contara, entonces escuchalo, no lo juzgues.

—Dices eso porque a ti si te lo contó...

—Digo esto porque es mi amigo —Corrigió el de cabello bicolor negando levemente ante la actitud de la menor.

Ryujin desvío su mirada con molestia, frunciendo su ceño al ver al rubio junto a sus amigos avanzando por el pasillo mientras charlaban de manera distraída, la peliazul observo fugazmente al azabache para soltarse e irse, sin molestarse en tener cuidado cuando paso entre el cuarteto de chicos que volteo a verla con confusión.

—¡Ryujin-ah!

El rubio rápidamente giro hacia el azabache, tomando el brazo de este al momento que paso junto a él, deteniendolo para colocar ambas manos sobre sus codos, atrayendo la atención del menor.