46. Recordatorio de amor

647 82 1
                                    

Los exámenes de la universidad eran algo que detestaba con todo su ser, consumían tanto el tiempo de sus estudiantes que desde hace una semana había estado yendo y volviendo de la universidad para encerrarse en su cuarto y estudiar el doble de cada materia, cualquier persona externa podía decir: "No se de que te quejas, la actuación es algo fácil" y si, tal vez podía ser cierto, pero la presión que Jaemin tenía sobre sus hombros con miedo a estropear cualquiera de sus exámenes era incluso más grande que todo lo demás en ese momento.

El sonido de la puerta lo hizo dirigir una  fugaz mirada hacia la puerta, un suspiro escapo de sus labios mientras volvia a observar sus apuntes.

—Mamá, dije que no tenía hambre...

Una suave risa se escucho, provocando que levantara su mirada de inmediato, levantándose de su escritorio cuando sus ojos se encontraron con los oscuros orbes del rubio, quien tenía una nerviosa sonrisa en su rostro mientras sostenía un pocillo con algo de fruta dentro de este.

Mentiría si dijera que no le agradaba verlo, habían estado durante toda la semana observándose simplemente a distancia, hablando por mensajes de vez en cuando o llamándose luego de clases, pero no se habían reunido para pasar tiempo juntos, y aunque estaban acostumbrados a eso, ahora definitivamente era diferente.

—¿Qué haces aquí? —Preguntó él jugando con sus manos mientras lo miraba fijamente.

—Quería verte... además, tu papá me dejo pasar, iba saliendo con tu mamá —Informó el mayor mientras dejaba el posillo sobre el escritorio—. Dijeron que saldrían a comer y me dijeron que te trajera esto

—No me dijeron que saldrían —Murmuró él tomando asiento en su silla mientras dirigía su mano hacía el posillo, tomando un grano de uva para llevarlo a su boca—. Oh, puedes sentarte en la cama si quieres, estoy estudiando...

—Ven conmigo —Dijo el mayor tomando su mano para jalarlo un poco mientras que con su mano libre tomaba el posillo.

—No puedo, estoy estudiando —Recordó él siguiendo de mala gana al rubio mientras lo veía sonreir ampliamente.

—Estoy seguro de que has estudiado suficiente por hoy, estuviste toda la semana así, eso te puede hacer mal si te estresas demasisdo —Aclaró Jeno mientras tomaba asiento en la cama, sin soltar su mano mientras lo observaba.

—Intentas distraerme como lo hacías antes para que deje de estudiar y que luego me vaya horrible como a ti...

—Eso no es cierto, jamás me fui mal en mis exámenes —Se defendió el mayor frunciendo su ceño con indignación—. Aparte, mis exámenes fueron esta semana y siento que los hice bien, así que a ti también te ira bien...

Jaemin lo observó en silencio por unos segundos, viendo a este levantarse un poco, quedando con una de sus piernas sobre la cama para impulsarse hacia él y envolver su cintura con ambos brazos, llevándolo con él a la cama.

—Estoy empezando a creer que papá se llevo a mamá para que no terminara pasando lo de la vez anterior —Bufó él mientras el rubio sonreía con algo de diversión.

—Eso quiere decir que tú quieres hacer lo de la vez anterior —Murmuró Jeno mientras observaba con atención el rostro del azabache, acariciando la mejilla de este mientras incorporaba su cuerpo para observarlo desde una mejor perspectiva.

—¿Qué te hace pensar que quiero hacerlo? —Cuestionó él intentando levantarse de inmediato, frunciendo su ceño completamente a la defensiva.

El rubio se alejó un poco de este, levantándose de la cama mientras el menor se sentaba en esta evitando mirarlo, jugando con sus manos de manera nerviosa, Jaemin de repente pudo ver al mayor tomar asiento junto a él, notando de reojo como este lo observaba con atención.

—No quería incomodarte —Se lamentó el mayor mientras estiraba su mano para colocarla sobre la pierna del menor que movía de arriba a bajo—. Es por mí ¿Cierto?

—¿De qué hablas? —Preguntó él atreviéndose a mirarlo con algo de confusión.

—Entiendo que no sea agradable para ti el estar de esa manera conmigo, no soy de tu confianza, aparte, jamás he estado con un chico así que no se nada de eso y tú si...

—No es eso —Interrumpió él de inmediato, sintiendo un ligero apretón en su pierna de parte del mayor en señal de que dejara de mover su pierna de manera nerviosa—. Tienes razón en que no eres de mi completa confianza, pero me aterra más lo que siento que lo que me el como me puedas llegar a lastimar, Jeno.

—Pero no quiero lastimarte, ya no, jamás lo quise hacer...

—Aún así lo hiciste, y si... dices que fue por miedo y por resentimiento, pero ¿Qué me asegura que si me acuesto contigo luego no vas a salir huyendo y te burlaras de mi por hacerlo? —Quiso saber mientras lo miraba fijamente por unos segundos, parpadeando débilmente al no obtener respuesta por unos largos segundos—. Ni siquiera sabes que decir...

—No, es que simplemente no sería capaz —Aclaró el rubio bajando su mirada mientras soltaba las manos del menor—. Sé que en tu cabeza soy una especie de monstruo capaz de cualquier cosa, pero no sería capaz de hacer algo así, eres la persona que me gusta...

—Te pedí que dejaras de decirlo.

—No ¿Por qué tengo que dejar de decirlo? Es lo que siento desde hace mucho tiempo, al fin soy capaz de decirlo sin miedo a lo que puedan decirme y tú me pides que me lo guarde —Se quejó el mayor frunciendo su ceño mientras lo observaba.

—¡Lo hago por mi! ¿Crees que no me ilusiona cada vez que lo escucho? Todos estos años no han sido fáciles para mí y de repente apareces diciendo que te gusto y que actúe como si nada hubiera pasado...

—No te he pedido eso, pero estoy intentando que me creas, quiero que te des cuenta de lo que siento por ti, pero tu miedo no lo permite, me alejas como si yo no estuviera completamente aterrado de que cuando por fin intento hacer las cosas bien tú termines enviándome a la mierda —Confesó el mayor sintiéndo sus ojos cristalizarse mientras veía al menor observarlo en silencio, dejando escapar un suspiro cuando ambos estuvieron lo suficientemente cerca.

—Tengo miedo de que luego te vayas —Murmuró Jaemin sintiendo las manos del mayor colocarse en su rostro—. Tengo miedo de dejarme llevar y que luego todo vuelva a la normalidad...

—Eso no va a pasar, Jaemin estoy aquí contigo, rogando por ti hace más de dos semana, intentando que me prestes atención que no merezco para que me creas —Se lamentó Jeno cerrando sus ojos mientras unía su frente con la del menor—. Yo sé lo que siento por ti y nadie aparte de mí puede decirte como me siento, lo que dijo Jimin no es cierto, no estoy confundido, yo te amo como un idiota, desde incluso antes que tú a mí...

De repente sus palabras fueron calladas de la manera más calida y dichosa que podía existir para él, los labios de Jaemin se encontraban sobre los suyos, envolviendolos con tanta suavidad y ahnelo como él en aquel momento, sin siquiera dudar en corresponder de la misma manera, sus manos ni siquiera dudaron en deslizarse por el cuerpo del menor, envolviendo su cintura para apegarlo a él, en un intento de recordarse a si mismo que realmente estaba pasando.

Saekki •NoMin• Where stories live. Discover now