Capítulo 24 ¿Es real?

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Eyén

Mientras lo miro a los ojos no puedo evitar embobarme en el, sus ojos azules como el mar, en su pelo rubio, sus labios carnosos...

Nos quedamos en la arena sentados mirando las estrellas entre risas y nervios, mi corazón parece que va a salirse de mi cuerpo. Alex se encuentra mirando fijamente a la luna y yo me tumbo con el para ver las estrellas mejor, el sonido del mar hace que mi cuerpo se relaje al estar con el y eso me pone muchísimo mas feliz.

Varias horas mas tarde, Alex me lleva a casa ya que es muy tarde y mañana mi madre tiene que trabajar. Me despido de Alex con un intenso beso y entro para casa, al abrir la puerta veo todos los mensajes y llamadas perdidas de Daila ¡se me ha olvidado llamarla! .Subo corriendo las escaleras, cierro la puerta de mi habitación y la llamo por teléfono.

-Hola Daila, perdón por no llamarte.

-Me tenias preocupada ¿como ha ido la cita?.

-Mau es un verdadero imbécil Daila.

-¿Como? ¿que te ha hecho?

-Sus intenciones era llevarme a la cama y humillarme, pero como ha visto que no podía, empezó a tocarme y menos mal que llegó Alex.

-Espera, ¿¡Alex!?

-Si y....

-¿Que a pasado Eyi?

-Bueno pues.... nos hemos besado.

-¿¡ves!? te lo dije, que al final os queréis mutuamente.

-Ha sido perfecto Daila, no pensé que me fuera a enamorar de Alex, es un chico tan serio y misterioso que nunca me imaginé que me fijaría en alguien así.

-Nunca elegimos de quien nos enamoramos.

-Lo se Daila, pero...¿ y si Alex no quiere nada serio conmigo?

-Eyi no te comas la cabeza con tonterías que solo tienes que fijarte en como te mira.

-Sabes que no me fijo en eso, solo en las acciones.

-Hazme caso y no te comas la cabeza que ya verás que si, mira como yo tenia razón y os habéis besado.

-Bueno si tu lo dices, te voy a ir dejando que tengo ganas de acostarme ya.

-Vale descansa, mañana voy a verte y me cuentas como ha sido todo.

-Vale, buenas noches.

Salto a la cama con una gran sonrisa dibujada en mi cara pensando en el primer beso con Alex ¡ha sido increíble! y no lo voy a olvidar nunca, eso lo tengo claro.

El mar con nosotros imbécil (disponible libro físico en Amazon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora