RICHARD
El desayuno en esta casa siempre ha sido una locura, especialmente los lunes, donde la mayoría no ha cenado nada el día anterior porque no hay servicio. Alicia no ha bajado por revisar unas cosas de su trabajo, así que se siente esto un poco como antes.Noto como Eleanor checa la hora en su reloj un par de veces y como Samael come sin prisa a pesar que tiene como media hora para llegar a su empleo, y se hace una en hacerlo.
- Sam, ¿no vas a trabajar?– me preocupo–
- Si–
- Pues ya es tarde–
- Si me despiden, Eleanor me mantiene–
- ¿no pudiste pensar eso cuando tenía 4 años?– Oliver reclama–
- Cuándo tenías cuatro no sabía que tu madre era asquerosamente rica y tampoco estábamos casados–
- Es válido–
- Si mi hermana se casó contigo por bienes mancomunados, es una tonta– Sila resopla–
- No estábamos–
- ¿como que no estaban?– Eric se mete a la convención con un tono de voz de horror–
- Lo que uno hace cuando está enamorada– Eleanor suspira antes de tomar de su taza de té.
- ¿estás diciendo que mi herencia no sólo la comparto con sus hijos si no también con mi padre?– Oliver jamás debió crecer– es lo más tonto que he escuchado–
- Si Alex se entera le dará un infarto– Sila ríe– he husmeado el trabajo de los contadores y....– Abre sus ojos de más– ¿para qué trabajas? Mejor ve de compras y dedícate a los niños–
- Para alimentar lo que queda de mi dignidad como hombre proveedor– Bromea ¿cómo es que ya no está enojado?– a pesar que mi única aportación es la leche de mis hijos–
- Y eso porque me obligaste–
- Si el abuelo se entera...eso no debería ser así– Eric niega– cada rublo debería ser para Oliver–
- Es verdad, de eso habló Lenin la otra vez– Oliver mete a su boca un poco de comida– Dijo que cuando crezca echará a su padre a la calle–
- Deja de comer con la boca llena– Eleanor le reprende– Y dejemos temas de dinero para los contadores-
- ¿pero es cierto?–
- Oliver–
- Solo pregunto, porque cuando mueras, ya tendré una lista negra– Oliver mira a Sila– ya sé a quién sacaré de mi casa primero–
- Si fueras rey, serías horrible– Sila le tira un pedazo de pan–
- ¿acabas de tirarle comida a un vizconde? Podría llevarte a la horca por eso– Se lo regresa–
- Eleanor, dile que me respete, soy mayor–
- Pero aún así yo tendré que cuidarte cuando mamá muera, porque seguro seguirás soltero–
- Eleanor– Sila dramatiza–
- Todos sabemos eso– Me incluyo–
- Tienen razón, soy del pueblo y para el pueblo–
- ¿Piero es el pueblo? Porque eso vi el otro día que pasé por el jardín interior, yo puedo asegurar que su lengua llegó a tu garganta–
- Creí que Piero y tú...–
Sila interrumpe a Eleanor levantándose.
- Iré a mi disque trabajo como presidente al que obviamente no estoy calificado– Señala a Oliver– Ya me la pagarás, lucifer–
Sila será siempre el tío favorito de Oliver a pesar que se traten de no la manera más adecuada, aveces creo que es como su hermano, y podría serlo así como Samael y yo podríamos ser el padre de Eleanor. Tardé un par de meses en dejar de pensar en ello cuando conocí a Eleanor, al verla por primera vez pensé que sólo era una mujer madura que aparentaba ser un poco más joven. La miro, no ha cambiado absolutamente nada, sigue idéntica a como la conocí hace años, al parecer el tiempo es su amigo, pero dudo que sea de mi, tal vez por ello me dejó de amar, tal vez soy muy viejo ahora y mi ojo blanco no ayudó. En California voy al gym gracias a mis tantas horas libres, no creo que eso sea suficiente para que ella se vuelva a fijar en mi. Quizá no tendré canas en mi cabello, pero algo hay malo en mi que provocó que ya no le gustara. ¿Y si realmente ya no se me pone dura como antes por los cigarrillos? Diablos.
- Oye Nicky, ya he resuelto lo que me dijiste–
- Gracias a Dios– Dejo mis pensamientos para poner atención en lo que hablan–
- Hablé con Jordan, te enviará a otras oficinas igual en Londres, te ascenderá–
- ¡¿en serio?!¡¿cómo?!– Habla sorprendido
- Vas a dirigir el proyecto de una fundación, si le gusta los resultados te dará el puesto–
- ¡¿no?!–
- mientras estarás en el mismo pero en otras oficinas– Advierte–
- ¿y de quién es la fundación?–
- Nuestra– Samael contesta– pero nosotros ya no te vamos a ayudar más–
- En serio Gracias, creo que ya es suficiente ayuda– en la cara se le ve lo emocionado, no ha terminado la carrera, pero trata de superarse, así como Sila, quien se supone aún debe estar medio semestre más por no acreditar un par de materias–
- Nada de eso, lo hacemos con gusto, hermanito. Y si queremos quitártela aún más de encima, tengo un par de candidatas para que te cases–
- ¿qué tiene de malo si es con ella? Es decir, si voy a casarme, ¿por qué no ella?– Nicky cambia su cara por una de confusión–
- Porque eres mi hermano, no puedes casarte con una simple trabajadora–
- Como sea, solo que no sea extraña y tonta– se encoge de brazos y sigue comiendo–
- Estás hablando como Alex– Michael reclama–
- a mi no me importa que me casen con una mujer con mucho dinero– Nicky ríe– Mejor aún si es joven–
- Lo que eres es un irresponsable, deberías hacerte cargo de ese bebé—
- No, yo le dije claramente que no quería un bebé. Es su problema, debió respetar mi decisión–
- Mich, esa mujer buscó quedarse embarazada, fue con especialistas, no fue realmente un error de Nicky– Eleanor explica ¿cómo sabe eso?–
- Bien, pero no deberías buscarle esposa, que él lo haga, no te importa a ti–
- Entonces me quedaré soltero toda la vida como Silas– Nicky gira sus ojos y se levanta– Me voy al trabajo– Y deja de juzgarme, porque igual Eleanor y Samael te cuidan a ti y a tu familia–
- ¿Cómo te atreves?–
- ¿crees que sin una carrera te darían el puesto que tienes? Alex tenía razón, y lo sabes. En un año serás un fósil universitario– Termina enseñándole los dos dedos de en medio.
No es mentira que Eleanor a pesar de tener la misma edad que sus hermanos, se hizo responsable de ellos una vez Alexander se fue. Y también es verdad que Samael a apoyado en ello.
- mamá ¿saldrás a trabajar hoy?— Oliver habla rompiendo el incómodo silencio que se había hecho—
- No mi vida, ¿me ayudas a adornar el gran salón para la fiesta de Narccise?–
- ¿por qué mi fiesta fue en el patio y la de él en el gran salón?– Puedo ver cómo ni Samael puede decir algo– Los estoy molestando– Sonríe– Si te ayudo–
- ¿a qué hora regresas, Samael?–
- A las cinco ¿necesitas algo?–
- No, solo pregunto–
- ¿quieres que te ayude en algo?– Cuestiono, quiero estar con ella y no encuentro otra excusa que Narccise–
- Eres invitado. Deberías salir con Alicia. Por cierto ¿dónde está?—
- Trabajo–
- Fred le puede llevar el desayuno a la habitación– Eleanor mira a uno de los 5 únicos hombres de servicio que pueden estar donde nosotros. George toma eso como una orden y se retira.
- mamá, tu eres tan linda que dudo Dios te niegue ir al cielo, por eso hacen contigo lo que quieren–Oliver niega–
- Oye– Eleanor le tira una uva– No soy ninguna tonta–Todos dejan de comer por un segundo– No tiene nada de malo ser amable con la novia de Richard. Es mi amigo y lo quiero–
- Gracias, preciosa– sonrío, ojalá me quisiera como quiero–
- Igual no es normal–Oliver insiste en parecer un adolescente–
- Si algún día me divorcio de tu padre, será lo mismo–
- No ilusiones a un niño de esa manera. Narccise tiene suerte que su papá no esté con él–
- Ya te lo dije, no te habré hecho, pero te pareces a mi más de lo que crees– Oliver gira sus ojos ante lo dicho por Samael – Y a tú madre también, especialmente cómo giran los ojos, un día se les quedarán así por mal educados. Y jamás vamos a divorciarnos–
- Eso no lo sabemos. ¿Qué tal si mamá se consigue otro esposo? Más joven por ejemplo–
- Eso ya pasó y No resultó– Suspiro al hablar–
- Solo les recuerdo que cuando ella esté en los 30 ustedes estarán entre los 50 y 60. Serán ancianos–
Veo cómo Eleanor abre la boca un poco como si nunca lo hubiera pensado y vuelve al plato.
- y no es por asustarlos, pero esas arrugas...uy no– Sé que lo dicho por ese Niño es para Samael y Pável, pero no puedo excluirme.– y esa panza que se les ve...–
- Oliver, Ya deja de molestarlos. El físico no es lo que importa, los quiero como sea–
Los dos hombres la voltean a ver.
- Pues ellos no te ofrecen mucho—Es lucifer, definitivamente lo es.– no me opongo a que me des un Nuevo papá más joven, tal vez que me haya tenido a los 20. O uno de 35 años que e regale fresas–
Eso fue muy específico.
- comenzaré a ponerte límite de palabras por día, ya largo–
Oliver ríe travieso, ese Niño debe saber cosas. Se lleva un tazón con frutas.
- Me iré a trabajar con mi autoestima al suelo por culpa de mi hijo de nueve–
- Oye Richard, si no tienes nada que hacer ¿por qué no llevas a Sam?–
- Yo lo llevo, voy por ese rumbo–
- No, yo lo hago– ¿quitarme la atención de la mujer que amo y ahora mi amigo? Pues no.
- Yo estaré Cerca de Cambridge, puedo esperarlo–
- Yo también–
- ¿monstruo?–
- ¿Sam?–
Samael nos mira a ambos confundido.
- me voy solo, ¿qué les pasa? Raros– le da un beso a Eleanor, ell le acaricia la mejilla, le hace una cruz como si fuera una abuelita, teniendo a un hombre con algunas ideas ateas terminando la señal besando los dedos que la hacían, él se termina de parar. Que envidia ser él, beso y hasta bendición,
- Ve con cuidado–
- ¿quieres que te compre algo?–
- lo de siempre– Samael asiente, besa la frente de Eleanor, me mira y me guiña un ojo al pasar junto a mi, entiendo su mensaje, me ha elegido a mi.
- Tú no vayas a tardar por favor, necesito que estés antes de las ocho– Eleanor advierte al ruso que se dirige a ella–
- Estaré aquí a la hora que Samael–
Disimulo el como me hacen casi vomitar los celos al verlo besarla. Mejor miro a mi estupido plato de frutas antes que se den cuenta los presentes que ella sigue importándome.
- cuídate mucho, jefe– Miro hacia ellos asqueado cuando la escucho decir un " te amo" en ruso. Siento un cosquilleo en el pecho que termina en dolor, creo que mi corazón acaba de romperse en dos, no, como en miles de pedazos, y eso que apenas el pegamento aún estaba secando.
Mi celular suena, me va bien, o juro levantarme y matarlo ahora mismo. Tengo hasta un nudo en mi garganta, Dios, esas palabras me las dijo tan pocas veces.
