Repartidor | Smut | Edad: 23

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¡Trío!



Craig POV

Ya son las 6 de la tarde, el timbre de nuestro apartamento sonó y mi novio subió corriendo al instante. "¡Yo voy! Quédate ahí, yo lo cojo". "No iba a moverme, no te preocupes cariño". Aun así, por curiosidad, me incliné un poco hacia delante en nuestro sofá, para poder ver a mi rubio extrañamente excitado.

Tenía una buena velocidad, pero se detuvo frente a nuestro gran espejo, encima de la cómoda junto a nuestra puerta principal. Sus zapatos chirriaban sobre el suelo mientras lo hacía, sus manos intentaban controlar su pelo. No era la primera vez que lo hacía. Mi novio siempre actuaba así de raro últimamente, cada vez que recibíamos una entrega. Y eso ya no era algo raro. Pedía mucho. Nos visitaban unas 2-3 veces por semana. ¿Debería preocuparme?

Con esa pregunta en mi mente, me levanté lentamente de nuestro sofá y me dirigí hacia mi novio. "¡Hola!" Tan pronto como la puerta fue abierta por Tweek, sus mejillas se volvieron rosadas, "Eres tú otra vez, qué sorpresa". Ugh. Conocía ese tipo de voz de él. Supongo que el repartidor era guapo. Con los brazos cruzados, me paseé al lado de mi novio, revisando a ese hombre de pies a cabeza, con el rostro cubierto por un ceño fruncido.

Llevaba el uniforme normal, probablemente tendría nuestra edad. Su pelo castaño oscuro parecía bastante natural, en absoluto parecía que hubiera pasado mucho tiempo para hacérselo. Tenía un cuerpo bastante musculoso y sus labios se formaban en una sonrisa amistosa. "Oh, sí", rió, asintiendo con la cabeza y levantando las cejas, "Un poco extraño. No conozco a nadie que pida tanto". "Oh, sí..." Mi rubio se apoyó despreocupadamente en nuestra puerta, alborotándose el pelo, "Curioso, eh".

El repartidor y Tweek tuvieron entonces un contacto visual bastante largo. Demasiado largo, para mi gusto. Hasta que aflojó su mirada de mi novio, dándose cuenta de mi ceño amenazante hacia él. "¡Oh, hola!" Extendió su mano en mi dirección, pero qué coño, como si fuera a cogerla. Él también se dio cuenta, así que la retiró tímidamente hacia él. "De todas formas, necesito tu firma aquí mismo". Aquel tipo estaba a punto de darle el aparato a mi rubito, pero yo lo cogí primero. "Gracias, lo haré".

"Entonces, ¿tienes mucho más que hacer hoy?" Mientras estaba ocupado con terminar cualquier entrega que Tweek ordenara ahora, mi rubio encontró importante coquetear con el castaño de nuevo. "No, en realidad no". Se apoyó en el marco de la puerta con una mano, y con la otra cogió el dispositivo de firma que le entregué. "En realidad, éste era mi último trabajo por hoy". "Oh." "Sí".

Tweek finalmente decidió mirarme una vez, con una sonrisa más brillante que el sol en verano. Eso sólo me llevó a poner los ojos en blanco. "Entonces, ¿sois compañeros de piso, o?" "Novios", respondió Tweek, aferrándose a mi brazo, "Es mi novio". "Sí". Aprobé su estado con un movimiento de cabeza, aún frunciendo el ceño ante aquel tipo. Él se dio cuenta de que estaba cabreado, así que más bien miró a Tweek en su lugar. Pero tenía que reconocer que mi novio era bastante guapo.

La verdad es que ahora me sentía un poco mal vestido, sólo llevaba una camiseta blanca de 5 dólares de gran tamaño y unos pantalones de deporte, con el pelo más revuelto que nunca. Tweek estaba increíble, como siempre. El pelo perfectamente desordenado, una camiseta negra de gran tamaño con estampado de anime y un pantalón de deporte gris. Sí, el chándal gris. Haciendo que su trasero, y otras partes, se vieran aún mejor.

"¿Estás libre?" "Sí." No estaba seguro de si me gustaba hacia dónde iba su conversación, pero decidí limitarme a mirar. Aun así, sujeté la cintura de mi rubio con una mano, bajando de vez en cuando y dejando claro inconscientemente a quién pertenecía todavía. "Bien... ¿Quieres entrar a tomar algo?"

One Shots (2) | Creek | TraducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora