Capítulo 16

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Roy se encontraba leyendo el periódico de ese fin de semana en la mañana, era Alex quién preparaba el desayuno en aquella ocasión, ambos se encontraban en silencio mientras los minutos pasaban, las semanas se pasaban muy rápido, habían pasado varias desde que Lucía había llegado al apartamento, para ese momento la rutina que tenían los tres en el departamento les era muy cómoda.

Ella era la última en despertarse y solía ser cuando Roy iba a removerla cuando Alex terminaba de preparar el desayuno, ninguno de los dos le exigía levantarse tan temprano, porque ellos no lo hacían y esos días eran los únicos en donde ella podía despertarse un poco más tarde que de costumbre, ya que solo tenía que ir a la peluquería en los fines de semana.

Roy se acercó por detrás de Alex quién se sintió cómodo entre sus brazos, él seguía preparando las cosas para aquel desayuno, un poco de sazonador y unas cuantas especies para condimentar la comida era lo que estaba usando para dar mayor sabor a la comida. Roy comenzó a repartir pequeños besos en el cuello de Alex quién comenzó a sonreír por el contacto que tenía su pareja que a solas solía ser la persona más cariñosa del mundo.

—Mejor deberías de ir a despertar a Lucía—. El sentía con mayor intensidad lo que habían comenzado como inocentes besos—. Podemos hacer esto perfectamente en la tarde, ¿No lo crees?

—Pero yo quiero hacerlo ahora—. Alex sintió como casi sus piernas flanqueaban por el tono de voz que él uso, sabía que Roy le estaba poniendo la flama enfrente suyo y caería en la tentación de tocarla si las cosas seguían por ese camino—. ¿Tú no quieres?

Alex decidió mejor el ir a despertar a Lucía, si le respondía a Roy las cosas no acabarían tan bien, y en el peor de los escenarios es que Lucía se levantase por el ruido que estaban haciendo, al ir a buscarla a su habitación, Roy se sintió un poco tonto e irresponsable, sabía que ella no tenía un sueño tan pesado y que con cualquier ruido fuerte se levantaba, pero quería hacerlo con Alex , era algo que él siempre deseaba, cada vez que tocaba su cuerpo se aseguraba de hacerlo como si fuese a ser la última vez, para no quedarse con ningún arrepentimiento en la garganta.

Roy simplemente espero a que Lucía se levantase , pero ella ya se había levantado desde varios minutos antes, solo que no había querido interrumpir sus momentos, ya que muchas veces se sentía como una intrusa en aquel departamento de la pareja, decidió salir al comedor en donde Roy sirvió, pero alguien tocó el timbre del lugar, aquello hizo que Alex fuese a abrir la puerta, encontrándose con Thomas que venía acompañado de Elizabeth.

Ella entró con una caja de chocolate y un vino, se había enterado por Thomas que ese día era el aniversario de cuando adoptaron prácticamente a su buen amigo Thomas, por lo que llevo un detalle para ellos dos, que lo recibieron encantados ya que casi siempre solían festejar esa fecha con emoción, Lucía se sorprendió de ver a Elizabeth, habían pasado varias semanas desde que se había despedido tras dormir en su casa, entonces Lucía le explicó a Alex que aquella había sido la persona con la que se había quedado a dormir la noche de aquella fiesta.

—Quería pedirles a los dos si podían prestarnos la presencia de Lucía por el resto del día—. Aquello sorprendió a la dupla quienes escucharon con atención lo que Thomas tenía por decir—. Lo único que Lucía ha estado haciendo do es trabajar y casi no se divierte durante los fines, así que iremos a un paseo que planeamos entre Elizabeth y yo para que ella disfrute por el resto del día.

Ninguno de los dos adultos puso un alto a la situación, ambos eran conscientes que Lucía no había disfrutado para nada de los lugares que el sitio podía traerle, y temían que la rutina se pudiese volver tediosa otra ella, así que ambos dieron su aprobación al plan que los jóvenes tenían para divertirse todos en conjunto, Lucía solo terminó de desayunar y fue a bañarse para ir a aquel plan que habían organizado esos dos quienes la esperaban con emoción.

AfueraWhere stories live. Discover now