Una Guerrera - Son Gine

Dragon Ball Super: Capítulo 50

"La Fiesta de Cumpleaños"

Gine se encontraba escondida detrás de uno de los muebles de su casa. Trataba de hacer el menos ruido posible para no ser encontrada por su madre.

– Con que aquí estabas, sabes esconderte muy bien hermanita.

– Shh, guarda silencio o mamá te escuchará.

– Puedes esconderte de ella pero no de mi, quiero algo a cambio.

– Goten, esto es una situación de vida o muerte, no estoy para tus juegos.

– En todo caso, ¡M-!

– Está bien – lo calló con algo de resignación – Te daré mi postre durante dos semanas.

– No, es muy poco.

– Bien, 3 semanas. – rodó lo ojos.

– Que sean 4 semanas y tenemos un trato.

– No, no pienso quedarme sin postre durante un mes.

– Bueno, si eso es lo que quieres, ¡Mamá, ya encontré a Gine! ¡Está escondida detrás de los muebles!

– ¡Eres muy malo Goten!

– Gine, no volverás a escapar, vamos hay que cambiarte. – la agarró

– ¡Goten! ¡Ayúdame! ¡Te daré mi postre! – le suplicó a su hermano.

– No, ya no lo quiero. – se cruzó de brazos.

– ¡Eres un traidor!

[...]

Gine no solo cambio un poco físicamente, como el hecho de crecer un par de centímetros, su cabello había crecido y el estilo alborotado y despeinado que solía tener desapareció. Fue reemplazado por uno más peinado y largo.

– Que linda te ves cariño, no hay duda que ese vestido celeste con flores te queda muy bien.

– Prefiero mis pantalones. – dijo con un puchero.

– Eres una señorita, tienes que vestir cosas lindas, aparte hiciste una promesa, ¿No lo recuerdas? – dijo refiriéndose lo que le prometió su hija en el templo de Kamisama.

– Pensé que lo habías olvidado, ¿Es necesario ir con vestido?

– Sabes, cuando me enteré de que tendría una hija mujer, pensé en todos lo vestidos lindos que te pondría. – empezó hablar, ignorando lo que había preguntado su hija – Aunque sabía que ibas a ser una saiyajin y con un carácter muy diferente a las niñas de tu edad. Desde muy pequeña te desagradaba la idea de usar vestidos o jugar con tus muñecas y preferias jugar con Goten y Gohan, nunca me ha parecido mal, pero aveces me gustaría vestirte con todos esos lindos vestidos.

– Perdón mamá...

– No tienes porqué disculparte, me gusta mucho que tengas tu forma de ser, pero si vamos a ir a un lugar elegante, hay que vestirse para la ocasión, ¿Entendido Gine?

Gine rio un poquito y asintió – Mamá, ¿Me ayudas a peinarme?

– Sí, por supuesto.

[...]

– ¡Hola Bulma! – saludó Gohan, llegando junto a Videl, su madre y sus hermanos mellizos. Que ha decir verdad, ese día traían ropas muy similares.

Gine estaba vestida con un vestido color celeste adornado con varias flores blancas, mientras que Goten, estaba vestido con una camisa celeste y un dibujo de una palmera y flor roja, junto con unos shorts azules.