Una Guerrera - Son Gine

43:"Super Vegetto"

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– ¡No te burles de mi! – exclamó enojado Majin Boo y se dirigió hacia Vegetto para golpearlo. 

Este lo esquivó, pero rápidamente el monstruo volvió atacar, dejando una serie de golpes en la fusión. Lo lanzó al piso y de ahí le arrojó una esfera de ki.

Vegetto salió de los escombros como si nada. – Esos golpes fueron efectivos.

– ¿En serio? Y eso que hago todo lo posible por tratarte con delicadeza. – estiró sus manos para tratar de agarrarlo, al no poder hacerlo, lanzó su antena para enredarla en el tobillo de Vegetto y lanzarlo hacia una montaña. – ¿Qué sucede? Tú no eres tan débil para cansarte con esto.

Del lugar en donde se había estrellado, salió una luz de color dorado. Destruyendo así todos los escombros. – Muy bien, finalmente he terminado con mi calentamiento. – hablaba mientras se estiraba el cuello. – Espero que me disculpes, lo que pasa es que todavía no me he acostumbrado a este cuerpo, pero ya estoy bien. Ahora si continuemos con lo que estábamos.

– Sí, estoy de acuerdo contigo, ya que me desilusionarias si murieras en un instante.

– Lo divertido va a comenzar.

En menos de un segundo, Vegetto apareció frente a Majin Boo y comenzó a darle varios golpes de puños y patadas. Hasta que lo arrojó por los aires y de ahí una esfera de ki azul.

Cuando Majin Boo salió de aquella explosión, se pudo ver que su piernas y todo el brazo izquierdo no lo tenía.

– ¡¿Cómo pudiste haberme hecho esto?! – exclamó molesto. Mientras que Vegetto solo sonrió cinicamente.

– Lo que dijo el supremo Kaio-sama era verdad, los poderes de estos zarcillos son increíbles.

Majin Boo regeneró las partes faltantes de su cuerpo, su ropa y las heridas que tenía por su cara y brazo también.

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– Oigan, ¿Todavía no llegamos a ese lugar? – preguntó Míster Satan que era sostenido por Gine mientras volaban. En ese momento se escuchó un gran estruendo. – ¡¿Qué?! ¡¿Qué pasa?! ¡¿De donde proviene ese estruendo?!

– Probablemente de donde Goku esta peleando con Majin Boo. – contestó Dende que volaba junto a Gine y sostenía aquel perrito.

– ¡¿Qué?! ¿Pero cómo se puede escuchar desde esta distancia?

Cuando ya empezaban acercarse, Gine pudo ver a lo lejos a Majin Boo con una enorme esfera de energía en su mano, abajo en el suelo se podía ver a un sujeto muy parecido a su padre que emanaba dos ki muy conocidos para ella. Eran Goku y Vegeta.

– Señor, escondase en este lugar. – dijo Gine detrás de unas rocas y lo soltó antes de que el de pelo afro dijera algo.

Dende también dejo al perrito en el suelo junto a Míster Satan, luego fue al costado de Gine que miraba detrás de una pequeña roca lo que estaba ocurriendo.

– Shh, guarde silencio porfavor o Majin Boo se dará cuenta de nuestra presencia. – dijo el namekiano a Míster Satan que se quejaba de dolor por haberse golpeado.