Dominoes (Traducción)

Inicio

Hevy toma una respiración profunda mientras sale del hospital, resistiendo el impulso de sonreír.

Libertad por fin.

Junto a él, Flak suelta una risa complacida, ignorando las miradas que recibe de varios civiles también en el pequeño patio del hospital. El piloto mira hacia el cielo y sonríe cuando un deslizador ruge sobre sus cabezas, y Hevy sonríe, feliz por él. Pronto podrá volver a volar.

La senadora Amidala los está esperando, un clon blindado a su lado. Hevy no puede esperar para volver a ponerse su propia armadura. Se siente prácticamente desnudo con el traje de algodón rojo que le había proporcionado el hospital. Echa de menos su HUD y las hermosas llamas azules que habían tardado tanto en pintar.

Le duelen la espalda y las piernas, pero no duelen. No lo suficiente como para impedirle huir del hospital lo antes posible.

"Senador", saluda respetuosamente Hevy, luego parpadea cuando se da cuenta de que el clon que está junto a ella tiene un pauldron alrededor de su pecho y un kama balanceándose por sus piernas. Kriff, es un comandante. Hevy no reconoce la armadura, no es Fox, eso es lo que sabe. Ofrece un saludo cauteloso. "Señor."

La senadora Amidala se ríe de la expresión de Hevy.

"Hevy, Flak, este es el comandante Thorn, mi escolta por hoy". El comandante Thorn ofrece su mano en un gesto amistoso, por lo que Hevy se la da, sintiéndose un poco incómodo. Siente que Thorn le está sonriendo bajo su casco.

"Así que eres Hevy", dice Thorn. "He escuchado un poco sobre ti".

Hevy hace una mueca. "¿Cosas buenas o cosas malas?" Eso hace reír a Thorn.

"Ambos, soldado. Pero no me preocuparía. Rex es un buen narrador ".

"¿Conoces a Rex?" Flak pregunta con curiosidad. Thorn se vuelve para mirarlo.

"Cuando el general Skywalker viene de visita, Rex y yo a menudo terminamos charlando durante unas horas. Es un buen hombre ".

"Eso es seguro", asiente Flak, y mira al Comandante Thorn con aprobación. Hevy está de acuerdo con su evaluación silenciosa: le gusta esta.

"¿Seguimos nuestro camino, Comandante?" Pregunta la senadora Amidala de repente, con la voz tensa. Hevy la mira con sorpresa, pero su mirada feroz está fija en otra parte, en un grupo de enfermeras y médicos que acaban de emerger y ni siquiera se molestan en ocultar sus miradas sucias a los tres clones. Hevy les devuelve el ceño fruncido. El comandante Thorn no parece molesto.

"Por supuesto, señora", responde con suavidad. "Flak, Hevy, ¿listo para partir?"

"Más que listo", responde Hevy, con un sabor amargo en la boca mientras mira al hospital con una nueva comprensión. Solo los habían aceptado por el General Skywalker, nada más. "Vamos a salir de aquí."

Sigue al comandante Thorn hacia un deslizador estacionado en el borde de la plataforma y le hace un gesto a Flak para que tome el asiento delantero. Flak parpadea hacia él, una lenta sonrisa se extiende por su rostro.

"¿Quiere que conduzca, señor?"

"Eres piloto, ¿no?" Dice el comandante Thorn, inclinando la cabeza. Flak de repente vibra con energía.

"Sí, señor", dice con entusiasmo, y se desliza en el asiento del piloto sin más indicaciones, agarrando los controles. La senadora Amidala se ríe desde el asiento del pasajero.

"No creo que tenga que recordarle los límites de velocidad, soldado", comenta mientras Hevy se sienta en la parte de atrás con Thorn, obviamente divertida por la emoción de Flak. Flak se burla.