Amado Esposo 1

Arco 9.11

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Capítulo 187 - Arco 9.11 - Segunda Generación Rica

Yan Jing Ze solo sintió que una mano había agarrado su corazón y lo apretó con firmeza. 

Lu Jingxiu sabía nadar, pero se dejó ahogar. ¿Qué tan desesperado estaba en ese momento? 

Pero de esta manera, algunas cosas que no se pudieron explicar, también se pueden explicar. 

Por ejemplo, ¿por qué Lu Jingxiu fue a enfrentarse solo al propietario original cuando ya sabía que había puesto drogas nocivas en su comida y quería hacerle daño? 

Probablemente solo... no quería vivir más. 

Después de que Yan Jing Ze se enteró de la condición física de Lu Jingxiu por la mañana, siempre se sintió incómodo. No quería ser visto por Lu Jingxiu, por lo que fingió estar bien frente a Lu Jingxiu. 

Pero ahora, ya no puede fingir ser así. 

Yan Jing Ze se acercó a Lu Jingxiu, de repente se medio arrodilló frente al sofá y abrazó a Lu Jingxiu. 

Lu Jingxiu se sorprendió: ¿qué le pasó a Yan Jing Ze? 

"Jingxiu, te amo de verdad. Eres más importante que mi vida," susurró Yan Jing Ze. 

Su voz no era fuerte, sino incomparablemente firme, y Lu Jingxiu la escuchó con claridad y tembló ligeramente. 

En estos días, Yan Jing Ze lo cuidó de varias maneras, pero nunca dijo esas palabras de amor. Su cuerpo se calentó de entusiasmo, estaba un poco mareado y su corazón se aceleró. 

Incluso si fuera falso, se sintió satisfecho. 

"Jingxiu, no debes dejarme," dijo Yan Jing Ze. 

Yan Jing Ze originalmente planeó tomarse su tiempo. Llevó a Lu Jingxiu a jugar estos días, a ver el mundo y a cultivar la relación entre los dos poco a poco... Pero ahora, no podía evitarlo. 

Quería estar pronto con Lu Jingxiu, tenía mucho miedo de que algo le sucediera a Lu Jingxiu. 

Vino a este mundo por Lu Jingxiu. Si algo le sucede a Lu Jingxiu, ¿qué hará? 

Lu Jingxiu no habló, solo miró a Yan Jing Ze, quien enterró la cabeza en sus brazos. 

El cabello negro de Yan Jing Ze ha crecido más y no sabe por qué no se hizo un nuevo peinado. 

Bueno, sus pensamientos se alejaron un poco. 

Él solo... En este momento, no sabía cómo responder. 

Por supuesto, no podía dejar a Yan Jing Ze, siempre y cuando Yan Jing Ze no lo dejara. 

"Realmente te amo, ¿lo sabes?" Yan Jing Ze dijo de nuevo. 

"Ya veo," dijo finalmente Lu Jingxiu, su rostro se puso aún más caliente. 

Frente a la villa, algunos jardineros están empacando sus herramientas, detrás de la villa, los limpiadores de piscinas están haciendo los trabajos finales, y en la cocina, la sirvienta está ocupada cocinando.

Aunque estas personas estaban lejos y no podían escucharlo a él y a las palabras de Yan Jing Ze, todavía tenía la sensación de que sus sentimientos con Yan Jing Ze estaban expuestos frente a los demás. 

Además de estar un poco avergonzado, también se siente un poco... feliz. 

"No puedo vivir sin ti," dijo Yan Jing Ze de nuevo.