Amado Esposo 1

Arco 4.12

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Capítulo 62 - Arco 4.12 - El Emperador

Yan Jing Ze esperaba la rebelión del rey Ping.

Después de todo, él era el emperador y, si quería, siempre podía obtener mucha información.

En cuanto a Chu Ting Xiu, los generales militares estaban felices de escucharlo, pero al grupo de funcionarios civiles en la capital realmente no le agradaba.

Sin embargo, el hecho de que el Ejército Imperial estuviera controlado por el Rey Ping, e incluso siguiera al Rey Ping al palacio, era algo que Yan Jing Ze no esperaba.

La rebelión se castiga con la muerte. El coraje del Ejército Imperial es encomiable.

Los sonidos de la batalla en el exterior disminuyeron gradualmente y los soldados del Ejército del Norte ya habían arrestado al Ejército Imperial.

Los soldados del Ejército Imperial eran en su mayoría habitantes de la capital y muchos de ellos provenían de familias gubernamentales que nunca habían estado en el campo de batalla. Nunca habían estado en el campo de batalla y, aunque estaban bien equipados, su poder de combate era muy inferior al del Ejército del Norte.

Si hubiera menos soldados en el Ejército del Norte, podrían haber luchado hasta la muerte por el bien de sus vidas, pero había más soldados en el Ejército del Norte.

Al darse cuenta de que no podían ganar, muchos en el Ejército Imperial colapsaron, perdiendo todo su poder de lucha y pidiendo clemencia.

Sin embargo, los soldados del Ejército del Norte estaban muy animados.

¿Cuánto crédito se les atribuye por sofocar la rebelión del Rey Ping?

Cuando eliminaron la influencia de la emperatriz viuda, todos fueron promovidos e hicieron su fortuna, ¡y ahora ciertamente no están en peor situación!

Estas personas, dirigidas por el Asesor Militar de Chu Ting Xiu, llegaron felizmente a la puerta del palacio y se arrodillaron: "¡Su Majestad, todos en el grupo del Rey Ping han sido arrestados!"

Yan Jing Ze abrió la puerta bloqueada y salió con Chu Ting Xiu.

"Lo has hecho bien, espera hasta mañana, ¡todo será recompensado!" Yan Jing Ze lo prometió.

Los soldados del Ejército del Norte estaban aún más felices y se arrodillaron para recibir sus recompensas.

En este momento, la mayoría de los ministros de la capital todavía temblaban en casa.

¡El Rey Ping fue a luchar contra el Emperador!

Tanto ruido en medio de la noche que mucha gente se enteró y luego se quedó estupefacta.

El grupo del Rey Ping, aunque se preocupaba de que la vida del Rey Ping no estaría protegida si la rebelión fallaba, no pudo evitar sentirse emocionado: si el Rey Ping ascendiera al trono, ¡ciertamente todos se elevarían a grandes alturas!

Aquellos que fueron leales a Yan Jing Ze en el pasado, o que se han unido a Yan Jing Ze en estos días, regañaron al Rey Ping por su ambición de lobo, mientras se preocupaban por ser purgados.

Incluso aquellos que no se apoyan en ningún lado no pueden dormir por la noche en este momento.

Con el paso del tiempo y el amanecer, el sonido de los cascos de los caballos sonaba en las calles de la capital y la gente gritaba: "¡Nadie puede salir antes del mediodía!"