Más que un original. Alina Libro #2. (Elijah y Klaus Mikaelson)

Capítulo 46: Ella me conoce de antes...

—Bueno, ahora que estamos convenientemente motivados, hablemos de cosas concretas—soltó Nik con cierto ironismo en su voz, por lo que sonreí sin decir nada, no quiero que si esto no funciona me echen la culpa a mí por no colaborar…

—Para que lo entiendan, necesito empezar por el principio—soltó ella seriamente haciendo que le pusiera algo de atención—. Después de robarme de mi familia, Dahlia me usó para forjar un nuevo tipo de magia conectiva, una que aumenta mi poder, aunque eso le permitió sacarla de mí. Una vez que estuvimos conectadas, Dahlia se convirtió en imparable. No perderá el tiempo en probar su poder. El jefe de un pueblo cercano amenazó con echarnos, acusando a Dahlia de brujería. Ella decidió dar ejemplo con todo el campamento... hombres, mujeres, niños. Los mató a todos con un movimiento de su mano. Esa fue la primera vez que atisbé el poder que tenía Dahlia. Durante miles de años, no ha hecho más que crecer, y traerá todo su poder contra ti cuando venga a por tu hija—terminó de contar haciéndome mirarla incrédulamente, nunca había escuchado una mentira más elaborada que esa.

—Perdóname—soltó Elijah de repente antes de apartarse con su celular. E iba a decir algo, pero mejor lo dejaba para el final, quería saber que tan lejos iba su historia.

—Tus historias son fascinantes—soltó Nik al Elijah volver—, y realmente Dahlia parece terrible, pero Elijah y yo hemos matado una gran cantidad de brujas malvadas—dijo teniendo algo de razón, incluso yo lo he hecho en par de ocasiones…

—No como ella—soltó obviamente queriendo hacerla lucir más poderosa para atemorizarnos.

—No estoy tan segura de ello…—le dije por fin interrumpiendo esta absurda historia, por lo que los tres me miraron sorprendidos—. Veras, al igual que tú y Dahlia, tengo mil años de edad, con una gran cantidad de magia acumulada, dudo mucho que ella podría hacerme frente…

—Estoy consciente de tu poder Alina, y puede que tengas algo de razón, podrías hacerle frente y no morir en el intento—soltó ella por lo que sonreí con orgullo—. Pero necesitas algo más que poder para sobrevivir, necesitas saber sus debilidades y poder vencer— dijo teniendo algo de razón.

— ¿Y se supone que tú las sabes no? —preguntó terminando mi comida y ella mirarme seriamente.

—Está paranoica, obsesionada con el poder. Ansía constantemente lo que se le ha negado, bien sea amor o venganza—soltó ella en respuesta con convicción, y esta decidí darle el beneficio de la duda—. Cuando era pequeña, me contaba cosas de su propia juventud, de ser victimizada por aquellos más fuertes que ella— dijo cambiando como siempre de tema—. Dahlia juró no volver a ser débil. Esperaba a un primogénito del linaje de Esther, intentando criarnos a su propia imagen, formando un aquelarre de brujas ella sola desde el cual podría obtener poder ilimitado. Ese plan se vio frustrado cuando supo que Esther había terminado con su linaje convirtiendo a sus hijos en vampiros. Y así la carga cayó sobre mí—confesó llamando de nuevo mi atención—. Dahlia exigió llevarse el primogénito que se añadiría a su poder, pero no permitiría que un hijo mío viviera como yo, una esclava. Así que juré no amar, nunca tuve un hijo— terminó de decir mirándome a los ojos, buscando mi compasión, haciendo que pensara que ella sabia la verdad sobre Henryk, y por eso buscaba mi empatía, por lo que aparté la mirada—. Por supuesto, cuando más me resistí, más me controlaba Dahlia... Hasta que me quitó la última libertad que me quedaba—continuó contando sobre como se hizo el hechizo que ahora lleva, dormir un siglo y vivir un año—. Y así nos dormimos, nuestra magia se acumula durante el tiempo hasta que nos despertamos, llenas de inmenso poder y nos permite vivir un año entero. Esa ha sido la existencia que he sufrido durante diez siglos— al fin terminó haciendo por alguna razón reír a Nik.

—Bueno...es una buena prueba, ¿no? Pero deja la pregunta de ¿por qué no suicidarte? —Soltó de repente a algo que no había tomado en cuenta por lo que la vi con curiosidad—. Un puente lo bastante alto, una soga lo bastante apretada. Debiste haberlo pensado.

—Hace tiempo, lo pensé—confesó de repente, llamando mi atención—, pero Dahlia nunca me dio la libertad suficiente. Aprendí más tarde que el hechizo me hizo como ella...inmortal e inmune al dolor—soltó esto último limpiándose sus lagrimas, como si eso me conmoviera—. Así que como veis, soy como vosotros, una criatura de gran poder maldita para siempre—terminó de decir, por lo que negué antes de levantarme de la mesa.

—Si eso esto, me retiro, tengo cosas mejores que hacer…—solté saliendo del comedor, dejando a los hermanos solos, si ellos querían creerle era su problema no mío.

Seguí caminando sin rumbo hasta por alguna razón llegar a mi vieja habitación, la cual estaba como si nunca me hubiera ido. Seguro era obra de Nik, ¿y cómo puedo estar tan segura?, sencillo, no recuerdo haber dejado retratos míos en las paredes, así que la respuesta es obvia.

—Linda habitación…—soltó una tediosa voz detrás de mí, encontrándome a quien menos quería encontrarme.

— ¿Qué quieres? —pregunté de brazos cruzados sin expresión en mi rostro.

—Hablar…—respondió sentándose en mi cama—. Tú y yo, tenemos mucho de qué hablar…

—Creí que todo estaba dicho allá abajo…—solté sin importarme ser imprudente, pero para mi sorpresa, negó sonriendo.

—No todo, hay cosas que les ocultas a mis hermanos, y estoy segura que no quieres que se enteren…—dijo sospechosamente, haciéndome sentir insegura de repente, era imposible que lo supiera, o no…

—Habla— solté de malas ganas sentándome en un sillón delante de mi cama.

—Siento mucho lo de Henryk— soltó de repente, bajando todas mis defensas—. Pero créeme, es mejor la muerte que una vida como que me tocó vivir…—dijo cabizbaja, como si en serio lamentara su muerte.

— ¿Cómo sabes de mi hijo?, ¿Finn te contó? —le pregunté con las defensas ya bajadas, necesitaba saber que sabía.

—No, lo sé, porque Dahlia, estuvo esperando mucho por ese hijo tuyo—respondió dejándome un poco en shock—. Dahlia te conoce desde que naciste, y sabía que un hijo tuyo con alguno de mis hermanos, le traería a su poder un poderoso brujo…

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Holaaaaa mi hermosisimas lectoras :D, aquí les dejo el cap, espero que les guste :3, a pesar de dejarlas con la intriga XD