Las cosas desde la perspectiva de un "rábano". 3.15

896 193 70
                                    

Varios niños son observadores; Wei Yuan es uno de ellos, es un buen observador, por no decir que uno muy avanzado, y es un escucha perfecto.

Siempre observa a su "mamá" yendo de un lugar a otro, regañando modelos y a sus asistentes, con los tacones altos y los vestidos o trajes estilizados.

Siempre lo sigue con la mirada cuando está en casa, y aunque a veces no suele hacerle caso a la primera, por elección propia, siempre es obediente con lo que su "mamá" ordene.

Sabe muy bien que podría decirle "papá", pero él siente que eso no se oye tan bonito como decirle "mamá" o "mami".

Sabe que es un hombre, si, sabe que existen "términos correctos", si, y también sabe que muchos desaprueban la forma de vestir de su mamá, pero eso no le importa.

Su mamá siempre le enseñó que no hay que etiquetar a las personas, o a la ropa.

El rosa no es para niñas, el azul no es para niños, ambos pueden usar cualquier color, mientras les quede bien.

No hay una diferencia.

Lo molestan en la escuela por muchas cosas, por tener un pensamiento como ese, por decirle mamá a su "papá", por ser asiático, por ser más bajo que los demás niños, y por hablar solo o perderse en su propio mundo, y por ser un poco más inteligente que el resto.

Pero eso no le afecta mucho, sabe que mayoría de sus compañeros se sientan inferiorizados por su inteligencia o sienten molestia porque no pueden provocarlo tan fácilmente.

. . .

La razón por la que se salió de sus límites fue el hecho de que no tiene un papá, al principio no tenía sentido, pero después lo entendió, los demás niños tenían dos padres, una mamá y un papá, ya sean separados o casados, su mamá parecía ser el único soltero entre todos ellos.

Los niños comenzaron a ser crueles, diciéndole que no tenía un papá, porque los habían abandonado, que probablemente su papá dejó a su mamá en cuanto se enteró que era hombre, entre todas las cosas que pudieron haber dicho, que hubieran dicho esas cosas de su mamá lo había hecho enojar, pues sabía que él era incluso más bonito que las mamás de sus compañeros y sería imposible que alguien lo dejara por algo tan absurdo.

Al principio había sido porque le decía mamá a un papá, y ahora era porque no tenía papá.

Después de regresar a casa, le preguntó a su mamá si es que él tenía un papá, o simplemente había preferido permanecer solo por elección propia.

—¿Y esa pregunta?—Wei Yuan encogió los hombros y jugó un poco con su comida—A Yuan, tú tienes un papá—el niño levantó la mirada, con sus ojitos llenos de ilusión—¿en serio?—Wei Ying suspiró y le sonrió—sí, pero él y yo no hablamos hace mucho—el niño ladeó la cabeza un poco.

—¿Por qué?—Wei Ying sonrió con nostalgia.

—Nos tomamos un descanso, él tenía cosas que hacer en China y yo tenía cosas que hacer aquí—explicó—¿y cómo es mi papá?—Wei Ying observó al pequeño.

—Bueno, hace mucho no lo veo, pero lo describiré para ti—bebió de su té—él es gracioso, cuando quiere, a veces es muy infantil, es bueno tocando varios instrumentos, canta muy bien, es muy inteligente, muy atento, amable, él es mi alma gemela y el amor de mi vida al mismo tiempo—rió—no suele sonreír mucho, pero cuando lo hace te da una sensación de seguridad y está obsesionado con los conejos—mencionó con una sonrisa.

A Yuan pudo notar mucho cariño en la voz de su mamá, jamás lo había escuchado hablar así de alguien que no sea él.

—¿Algún día conoceré a mi papá?—Wei Ying asintió con una ligera sonrisa—lo harás, pero él tampoco sabe mucho de ti, así que él también va a conocerte—A Yuan asintió sonriente—¡Seré una sorpresa para papá!—Wei Ying asintió animándolo.

¡Que difícil es ser hermano mayor!Where stories live. Discover now