Capitulo 14.

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Atravesaba la ciudad lo mas rapido que podia, tomando mis precauciones con ella. Obviamente habia perdido ya el conocimiento; en el camino ya le habia llamado al doctor y me dijo que me iba a estar esperando en urgencias. Esto era una urgencia, no sabia bien lo que habia pasado antes de que yo llegara con esa mujer. La miraba de reojo y su semblante cada ves era mas palido.


-Dios mio, ruego que estes bien.- mis facciones de la cara estaban muy tensas. Al fin ya estaba en la esquina del hospital, unas lagrimas sin querer salieron de mis ojos. Temiendo perderla y solo yo tenia la culpa por haberla dejado sola.

Me estacione y baje de inmediato, importandome poco como habia dejado el coche. Enseguida la desabroche y la tome de la cintura para poder cargarla. Pero al hacer eso, ella se quejo; eso llamo mas que mi atencion y antes de entrar al hospital, levante su blusa de pijama y vi que tenia un hematoma en las costillas. Ya casi se le estaba haciendo negro, yo jadee sorprendido. Definitivamente algo mas habia pasado antes de que yo llegara y ahora mas que nunca me daba mucho coraje no haber llegado a tiempo o no haberme quedado en casa con ella.

-Quien quiera que te haya hecho esto, lo lamentara.- bese su frente y la tome en mis brazos. El doctor ya me esperaba con una camilla y una enfermera.

-¿Que fue lo que paso?- me pregunto, mientras me miraba intrigado.

-No se, ella tenia antojo de un esquite y sali. Tiene un familiar que le hace mucho daño y al parecer cuando me fui aprovecharon para molestarla.- me recargue en la pared frustrado y enojado conmigo mismo.- Tiene un hematoma en la costilla izquierda, quisiera que la revisaran y saber si mi hijo esta bien.-el doctor me miro con pena y asintio.

-No te preocupes, todo estara bien. La enviare a la sala de examinacion y despues le hare un ultrasonido.- anoto algo en unas hojas y prosiguio.- Lo importante ahora es que reaccione.- sabia que tenia mucha razon, yo no podia perderla.

-Pense que solo era un desmayo, pero ya lleva un rato inconsciente.- a causa de mi frustracion, las lagrimas viajaban por mi rostro. Estaba desesperado.

-Tranquilo. muchacho. Tu mujer estara bien, esta en buenas manos y no dejaremos que le pase nada.- el doctor me dio un apreton en el hombro y desaparecio, para asi poder atender a mi mujer lo mas pronto posible.

Me preocupaba ella, mi hijo; saber que algo malo les podia pasar a causa de ese golpe que le dieron. No sabia si habia sido aquella mujer o alguien mas con mas fuerza. No entendia nada, pero lo que si sabia es que no iba a dejar que estuviera sola o que me alejara de ella. Me sente en las sillas de espera y escuche como mi celular sonaba, lo tome en mis manos y vi que era mi madre.

¿A estas horas? Conteste, pues si no lo hacia se iba a preocupar y no queria otro problema mas.

-Hijo, ¿estas bien?- fue lo primero que me dijo en cuanto respondi la llamada y yo solo frunci el ceño.

Matrimonio a cambio de Amor III (Trilogía)Where stories live. Discover now