Positivamente No

37

Selene colocó dos cafés en la mesa, habían decidido ir al jardín del hospital para hablar más tranquilos. Sabían que en su habitación iba a estar Charlie y podían también ser interrumpidos por alguna enfermera. Duncan observó a Selene en silencio esperando que ella comenzara a hablar, no sabía exactamente lo que ella le quería decir pero sí lo que él se moría por contarle.

Empezó a jugar con el vaso sin saber qué más hacer, ella sólo lo observaba y eso lo hacía ponerse un poco nervioso. ¿Cómo era posible que él siendo un chico tan seguro se sintiera de esa forma a su lado? Quizás el amor le hacía dudar de sus acciones, quizás sólo no sabía cómo actuar ante todo.

—Estuve hablando con Matías de lo que sucedió entre nosotros—empezó a hablar.

—Sé que es tu novio.

—Realmente no lo es. Tenemos algo pero no tiene un nombre, ¿comprendes? Yo le digo a todo el mundo que es mi novio y él le dice a todos que soy su novia, pero nunca quedamos en decir que éramos novios.

—No sabía eso—ella le dio un sorbo a su café.

—Estuve hablando con él y dice que tú me haces bien—habló—. Dijo que debería pasar más tiempo contigo, salir un poco, ver películas, esas cosas. Es alguien que entiende por lo que estás pasando, sufrió de algo parecido cuando era más joven, quizás se proyecta en ti y por eso no quiere que tú sufras. Es un gran chico, el mejor creo.

—Le tienes mucho aprecio.

—A ti también te tengo aprecio, Duncan. Lo que pasa es que con Matías la cosa es distinta, quizás por el tiempo que tengo conociéndolo o por lo rápido que nos acercamos, pero lo que él y yo tengamos no se debe comparar nunca con lo que tú y yo tenemos, ¿vale?

— ¿Y qué es lo que tenemos?

Y esa era la pregunta que él se moría por hacer pero tenía miedo de la respuesta.

—Creo que somos amigos. Sé que te gusto, tú ya me lo dijiste pero las cosas no son así de fáciles.

—Porque yo no te gusto.

—No es eso—respondió ella—. Rompí la pared que teníamos cuando nos besamos, no me arrepiento si eso es lo que estás pensando. Matías lo sabe todo y él piensa que tú y yo deberíamos hablar sobre ello porque quizás fue mi culpa al hacer como si nada de esto hubiese pasado.

—Quizás fue mi culpa al haber pensado que sería buena idea besarte—ella negó con la cabeza y lo miró.

—Las cosas que sucedieron en el pasado no están mal, lo que está mal lo que sucede ahora. Parecemos dos personas que no saben qué hacer con la situación; eres el segundo chico que beso, no sé realmente como llevar la situación.

—Entonces no parecemos, lo somos.

—Lo somos—repitió ella.

Duncan tomó su mano sobre la mesa, por un momento tuvo miedo de que ella se soltara, pero Selene no lo hizo.

—Te quiero—le dijo él, ella le dio una mirada tierna y le sonrió un poco—. Eres muy importante en mi vida, Selene. Te quiero mucho.

—Yo también te quiero.

—Matías me pidió un tiempo, ya sabes conocer otras personas, estar con alguien más quizás. No es culpa tuya, no es culpa de nadie, es algo por el cual las personas pasan—comentó—. Quiero que vengas a mi casa.

— ¿Qué? —realmente quedó en un pequeño estado de shock por lo que ella le había dicho primero. Pero no intentó regresar a esa conversación, ella parecía no querer hablar de ellos.

—Mi mamá hará pizza y compraremos un pastel, solemos hacerlo una vez al mes como tradición; quiero que vayas. Es mañana en la noche, le diré al Doctor Parks para que te deje salir si aceptas, puedo hablar con tus padres también.

—Sí quiero—ella sonrió.

—Vendrán mis hermanos y seguro vemos alguna película—Duncan sonrió, le gustaba que Selene lo incluyera en sus planes con su familia.

Aunque iba a conocer a su familia y él no sabía cómo podía actuar con ella. Ya había conocido a Jane, su hermana mayor pero ella no era el problema realmente sino su hermano y su padre que podrían quizás intimidarlo un poco.

—Si quiero—repitió.

—Entonces hablaré con el Doctor Parks y con tus padres hoy mismo—le respondió—. Es mañana en la tarde, te pasaré buscando a las seis. Ahora debo llevarte nuevamente a tu habitación porque te toca chequeo con la enfermera—tomó su mano y juntos caminaron hasta la habitación.

Selene lo dejó en su puerta.

—Normalmente esto es trabajo del hombre.

—Sabes que amo aventar los papeles, corazón.

Y se acercó para darle un beso en la mejilla e irse.

...........................

No sé si lo coloqué aquí pero hace unos días subí la historia de Kloss y más o menos lo que sucede con Jane (la hermana de Selene), apenas está comenzando así que pueden pasar a leerla.

¿Qué les pareció el capítulo?