Entendido, profesora. TERMINADA.

Epílogo.

__ ¿Aquí? Pero nos van a ver.

Estaba tratando de detenerla sin realmente intentarlo, Elena me tenía recostada sobre el asiento trasero del auto, ya había abierto los dos primeros botones de mi camisa y estaba besando mi cuello mientras continuaba abriendo los demás.

__ No nos verán __ Ella terminó de abrir la prenda por completo y empezó a jalarla por los lados para sacarla de debajo de mi pantalón, empujó la tela de mis brazos dejando la camisa completamente abierta.

__ Amor __ seguía nerviosa porque estábamos en el estacionamiento de la escuela, claro que era de noche y casi ya no quedaba nadie, pero eso no significaba que estábamos solas, y Elena no dejaba de llenarme de besos y acariciar mi vientre desnudo. __ Vamos a la casa, a nuestra cama.

__ Shh __ Sus labios regresaron a los míos, dios sabe que no hay manera de que yo me pueda resistir a sus besos, a esa forma de acariciar su lengua con la mía, sentí una de sus manos en el botón de mi pantalón y el ruido del cierre ser bajado, yo no tenia suficiente espacio para extender las piernas, así que las tenía un poco flexionadas hacia los lados, su mano entró bajo las prendas sin problema, y sus dedos no tuvieron ningún tipo de impedimento para llenarse de mi humedad.

Ya no solo me besaba, ahora podía sentir la punta de su lengua recorriendo mi cuello y la parte expuesta de mis senos.

__ Elena __ suspiré cuando la sentí frotar ligeramente sus dedos contra la parte más sensible de mi cuerpo, mis caderas habían empezado a corresponder buscando más contacto con ella, no tardo en darme lo que buscaba, tan pronto como libero uno de mis senos y se lo llevó a la boca, sus dedos entraron en mi tomándome por sorpresa y haciéndome arquear la espalda.

Estaba entrando y saliendo de mi, mis caderas se movían de arriba hacia abajo a lo largo del asiento, el auto podría estarse moviendo ligeramente y ella tenía una de sus manos ahora sobre mi boca silenciando mis gemidos, sus ojos estaban sobre los míos, mirándome directamente mientras interrumpía en mi cuerpo.

__ Me encanta tenerte debajo de mi __ me abrace a su cuerpo y cerré los ojos, la sentí comenzar a morder ligeramente mi mentón.

No se cuanto tiempo estuvimos ahí, el suficiente para que nos descubrieran pero absolutamente nadie lo hizo. Aunque toda la escuela ya sabía que estábamos juntas no significaba que debíamos dar espectáculos. Y ese sí que hubiese sido uno muy grande.

Ahora estaba de vuelta en el asiento copiloto, un tanto incomoda con la humedad entre mis piernas después de que ella me hiciera llegar, cerrará mi pantalón y metiera sus dedos a su boca justo frente a mis ojos.

Sabía que lo haríamos de nuevo en casa, Elena había dejado muy en claro que el no poder desnudarme por completo la dejaba insatisfecha. Así que ahí estaba, preparándome mentalmente y mordiéndome el labio solo de imaginarnos al llegar a casa.

Mi noche de pasión no fue exactamente lo que me encontré.

Lo que si había justo en la puerta y tocando el timbre eran dos mujeres tocando el timbre.

Aunque ver aquella cabellera morada desde lejos me hizo saber exactamente de quienes se trataba.

__ ¡Valentina! __ abrí la puerta del auto y corrí hacia ella, abrazándola, ella estaba extrañamente sonriente, y extremadamente feliz porque me abrazo de vuelta, con tanta fuerza que incluso empezó a hacerme falta el aire.

__ ¡Angie! __ ella se separó de mi y luego fue hacia Elena, también la abrazó y casi la levanta en el aire.

Tony simplemente estaba ahí, mirándo todo con una gran sonrisa en el rostro, se acercó a mi y me saludo con un beso en la mejilla.