Jungkook hace parte de los "Eternos", una legión secreta de seres con habilidades especiales. En medio de una misión conocerá a Taehyung, un joven y brillante estudiante que no sabe nada del mundo sobrenatural que lo rodea, pero terminará involucrad...
¡Hola! ¿Qué les parece si para curar sus corazoncitos por la muerte de Namjoon, van y leen mi fanfic NamJin? Se llama Volverte a Ver, recién lo publiqué ayer y espero puedan darle apoyo. ¡Los quiero! — Liz❀
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—Jungkook, por favor háblame, dime qué fue lo que sucedió.
Taehyung estaba entrando en pánico, Jungkook no le explicaba nada, no contestaba a sus preguntas, ni siquiera lo miraba. Sus heridas continuaban sangrando y él no tenía idea de qué hacer. No podía llevarlo a un hospital, las personas harían cuestionamientos y él no sabría qué decir, por lo que la única opción que le quedaba era atenderlo él mismo.
Este habría sido un excelente momento para aplicar los conocimientos aprendidos en su clase de primeros auxilios, si tan sólo hubiera asistido.
—Bien, Jungkook, vamos a entrar para que pueda lavarte las heridas y ver cómo detener el sangrado. —Taehyung habló con firmeza, en un intento por mantener el control de la situación y no sucumbir a sus nervios.
Extendió su mano hacia el pelinegro para que se levantara, sin embargo, él no la tomó. No hubo ninguna reacción de su parte, Jungkook simplemente se quedó allí, sin moverse ni decir nada, su mirada puesta en el vacío. Taehyung soltó un grito exasperado, necesitaba ayudarlo rápido ya que no sabía que tan grave eran sus lesiones y no podía permitir que algo irremediablemente malo le pasara.
—No importa, yo mismo te llevaré.
Taehyung se acercó a él, pasó uno de sus brazos por su espalda hasta rodear su cintura, inspiró profundamente y con todas las fuerzas que tenía logró levantar su cuerpo y hacer que Jungkook quedara sobre sus propios pies, sin embargo, aquella posición no duró mucho porque el pelinegro no logró mantener su peso y terminó por caer sobre el césped.
Al verlo de esa manera, sintió una preocupación tan grande que hizo a su pecho doler. Jungkook estaba completamente en estado de shock, su cuerpo permanecía ahí, pero su mente debía estar perdida en algo que no lograba entender.
Taehyung comenzó a llorar, no tenía la suficiente fuerza para llevarlo cargado a la casa y eso lo hacía sentirse completamente inútil. Era tan débil, habían pasado varias semanas de entrenamiento, y todo lo que él podía hacer era mantener una estúpida postura de defensa.
Corrió nuevamente hacia la casa y comenzó a buscar el maletín donde Jungkook guardaba las medicinas que la legión preparaba para tratar heridas de combate, le había mencionado cómo utilizar algunas, pero Taehyung tenía problemas para distinguirlas. Si tan sólo hubiera crecido como un Eterno, podría saber estas cosas, no se paralizaría ante una situación de emergencia y poseería la fuerza y conocimientos para ayudarlo. Pero no, tuvo que vivir una maldita mentira en un mundo mortal al que no pertenecía, y ahora sufría las consecuencias de su ignorancia.
Al encontrar el maletín, lo llevó hasta donde se encontraba Jungkook. Notó que él ya no estaba mirando a la nada porque ahora sus ojos permanecían cerrados, su piel lucía más pálida de lo normal y sus labios estaban completamente secos. Taehyung se apresuró a retirarle por completo la camisa para observar que tan grave era la situación. Tuvo que ahogar un grito al ver como su abdomen y pecho estaba totalmente marcado por profundas y horribles heridas.
