Eterno | KookV♡

｢Capítulo 31 ❃｣

—Jungkook, basta, no tiene caso, has registrado todo el lugar unas tres veces. Seokjin no está aquí.

Namjoon, al ver las horas transcurrir, decidió que era momento de dar por terminada su infructuosa búsqueda. Odiaba admitirlo, pero Seokjin escapó de nuevo y no existía nada más que pudieran hacer en esos momentos. Sin embargo, Jungkook parecía decidido a encontrarlo, se negaba a escuchar razones, mostrándose totalmente desesperado ante la situación.

No le resultaba nada agradable verlo involucrarse de esa manera con una misión, y sabía que su imperiosa necesidad de encontrar a Seokjin era a causa de Taehyung. De otra manera, jamás habría perdido el control en medio de un trabajo. Jungkook era del tipo analítico, frío, calculador, pero en ese instante sólo lucía como un chiquillo inexperto y asustado.

—Jungkook, te dije que te detuvieras, y por si no ha quedado claro, es una orden. —Sentenció de manera firme al ver que Jungkook se disponía a entrar nuevamente a la cabaña.

—Namjoon, permíteme recordarte que yo estoy a cargo, Seokjin es mi protegido, es mi deber encontrarlo.

—No, Jungkook. Desde que empezaste a hacer todo por tu cuenta sin contar conmigo, rompiendo cada una de las reglas, ya no estás a cargo. Fui asignado para supervisarte, y cometí un error al permitir que hicieras tu voluntad, pero, eso se acabó. Desde hoy, yo tomaré las decisiones en lo que respecta a Kim Seokjin, y eso incluye lo que pasará con Taehyung.

Jungkook, quien había mantenido su mirada en la cabaña tratando de descubrir algo que no hubiera visto antes, se giró de forma frenética ante la mención de Taehyung. Sus ojos llamearon con enojo, no le importaba ser relevado de su liderazgo en esta misión, pero no permitiría que Namjoon o la legión se acercaran a él.

—Él está fuera de discusión, Namjoon. Puedes hacer lo que quieras con Seokjin y la información que tienes, pero sabes que no permitiré que tomes ninguna decisión respecto a Taehyung, él no tiene nada que ver en esto, y no me importará que seas tú, si vuelves a insinuar algo así de nuevo, te asesinaré con mis manos.

Namjoon se quedó estupefacto ante sus palabras, Jungkook jamás lo amenazó de esa manera. Solían tenían diferencias de opiniones, pero el pelinegro nunca se mostró tan agresivo frente a una situación.

—Jungkook, no vuelvas a hablarme de esa forma. Soy tu mayor y tu superior a cargo. Una falta de respeto más y tendré que reportarte a La Corte.

El mencionado no temía por ser reportado, sabía que, de alguna manera, llegaría el momento de pagar por todas sus faltas. Sin embargo, sintió una sensación de remordimiento por haberle hablado así a Namjoon, no entendía por qué había reaccionado de esa forma, pero la sola mención de Taehyung lo alteraba y le hacía perder el control.

—Hyung... —Jungkook se giró para verlo a los ojos, notando que había herido a Namjoon. Hizo una reverencia ante él y volvió a hablar. — Me disculpo, no fue mi intención amenazarte, es sólo que, le prometí a Taehyung que encontraríamos a Seokjin y todo se solucionaría. Se lo debo. No puedo fallar en esta misión.

—Esta no es una misión como las que has tenido antes, Jungkook. Estamos lidiando con un sujeto peligroso, Seokjin es hábil y tiene un poder inusual, no sabemos con seguridad las cosas que puede o no hacer, lo que lo hace impredecible.

Namjoon sabía la forma en que Jungkook siempre había destacado dentro de la legión, su increíble habilidad y su destreza en combate, lo convirtieron rápidamente en uno de los Eternos más preciados. Siempre le fueron encomendados protegidos importantes, y él había logrado reclutarlos y entrenarlos a la perfección, sin embargo, Seokjin no era como nadie que hubieran visto antes.