Todo mi cuerpo arde y siento como ni siquiera soy capaz de mantener la mente clara. En ella solo hay ardiente deseo y necesidad de calmar el celo de mi omega. Totalmente expuesto ante mi. Desnudo. Jadeante.
-Tal como imaginé no tardarías demasiado en llegar a mi piso.
Giro el rostro y veo aparecer a Mugetsu totalmente desnudo caminando con un vaso de agua que acerca a Byakuya para que beba.
-¡Tu... desgraciado!- Grito sintiendo que realmente no puedo dejar de salivar ante el aroma a sakuras tan concentrado.
-Venga ya, Renji. Si realmente fuera un desgraciado...- Dice apartando el vaso de Byakuya y agachándose a su lado.- Lo habría tomado solo para mi.- Su mirada es brillante y oscura, y soy consciente de que lo dice en serio.
-Yo... te habría encontrado...- Le digo apretando los dientes pero incapaz de moverme de mi posición arrodillada. Tengo el cuerpo tan tenso y la polla tan dura que soy incapaz de moverme.
-No me lo habría traido a mi piso Renji.- Dice tomando el rostro de Byakuya y bajando hacia él para besarlo.
Abro los ojos sintiendo el inmenso dolor que me provoca la escena de mi omega totalmente desnudo, abierto y expuesto, y siendo besado por mi mejor amigo. Aunque mi maldito cuerpo no puede evitar excitarse aun más cuando escucho los ligeros gemidos de Byakuya a la vez que puedo ver claramente sus lenguas jugar fuera de sus bocas. Entonces, Mugetsu me mira, sin dejar de jugar con Byakuya y sus ojos parecen haber cambiado. Es... como si jamás hubiera visto esta versión de él.
-Vamos, Renji...- Dice sentándose al lado de Byakuya y tomando su polla para masajearla a la vez que mi omega comienza a gemir echando su cabeza hacia atrás.- ¿Es que no quieres saborear a nuestro precioso sensei?
***Byakuya***
Cuando he visto aparecer a Renji, tenía la sensación de que no era real, tan solo producto de mi mente nublada por el celo y mi deseo de estar con él, tal como estaba con Mugetsu, pero cuando su aroma se mezcla con el de Mugetsu y el mio propio, sé que no es falso. Él está aquí. Frente a mi. Mirandome con los ojos totalmente oscurecidos mientras se nos acerca gateando con ese aire de depredador que me hace sentir escalofríos.
-Ah...- Mis gemidos continúan saliendo de entre mis labios ante las caricias de Mugetsu y la visión de Renji llegando hasta mi.
Ni siquiera dice nada antes de bajar y atrapar en su boca mi polla, a la vez que Mugetsu la acaricia un poco más. Luego, la suelta para dejársela por completo a Renji que me devora como si no hubiera un mañana, lo que me hace gritar aun más fuerte mis gemidos.
Entonces, Mugetsu me toma por el rostro y me hace mirarlo. Oh, realmente he llegado a apreciar lo guapo que es. Esa parte melancolica con la que me miran sus ojos, mezclada con el puro deseo de seguir con todo lo que hemos estado haciendo hasta ahora. Mas gemidos escapan de mi cuando Renji acelera sus lamidas y succiones hasta que me corro gritando dentro de la boca de Mugetsu que me besa en ese momento. Lascivamente. Profundamente. Haciendo que mi cabeza solo pueda dar vueltas y sentir que me quemo desde dentro hacia fuera, explotando en todas direcciones.
-Eso es, precioso...- susurra sobre mis labios mirándome en la corta distancia.- Disfruta, siéntenos. Vamos a hacer que no seas capaz de olvidar este día, en toda tu vida.
Cuando voy a volver a hablar, siento como Renji ya no esta sobre mi polla, sino que ha bajado abriendo mis nalgas para comenzar a lamer mi entrada con tanta furia y desesperación, que es como si su lengua fuera una polla que comienza a follarme ante la sonrisa de Mugetsu que baja de nuevo a besarme tomando una de mis manos para que le masajee la polla aunque en cuanto siento como varios dedos de Renji comienzan a acompañar a su lengua, empujo a Mugetsu para tirar de su polla y metérmela en la boca.
-Oh... joder... si...- Su voz es ya un detonante para que mi cuerpo ascienda y no puedo evitar gemir corriéndome cuando baja sobre mi polla para lamerla, en un sesenta y nueve totalmente acrobatico.
***Mugetsu***
Saboreo el dulce semen de Byakuya justo cuando Renji alza su mirada encontrándonos en tan corta distancia que puedo notar su aliento contra el mio. Aun hay ira en sus ojos y eso me hace morderme el labio inferior dudando si intentar un acercamiento hacia él, pero se aparta para librarse de su ropa, y así estar a la par nuestra.
-No me he corrido en él.- Le digo sintiendo como poco a poco estoy a punto de hacerlo de nuevo en su boca.
-Ya. Toda una consideración.- Dice prácticamente gruñendo.
-Vamos, Ren.- Le digo mirando hacia atras, para contemplar como Byakuya se traga toda mi polla haciendo que de nuevo obtenga uno de los mejores orgasmos de mi vida.- Mmmm... no pienses... ah...- me muevo para besar a Byakuya a la vez que tiro de las ataduras para liberar sus piernas y tirar de él para sentarlo sobre mi en el sillón.- Sé que es lo que quieres...- Digo sosteniendo las piernas de Byakuya abiertas y exponiéndolo hacia Renji.- Hazlo, Ren. Lo estas deseando. Byakuya es increíble en todos los aspectos.- Ver como la polla de Renji se mueve sola ante la excitación y la expectación de lo que esta por venir, me hace relamerme.- Toma.- Le digo tirándole un condon que atrapa y mira por un segundo como si fuera la primera vez que ve uno.- No querrás preñarlo a la primera ¿no?
En cuanto veo su mirada, sé que sí. Claro que quiere preñarlo. Yo quiero preñarlo, aunque he intentado controlar ese instinto alfa por el bien de Byakuya.
-Hazlo...- Gime el moreno haciendo que la piel de Renji se erice.- Lo quiero... ah... tu semen... ah... ah... duele... te necesito... Ren... ji...
***Byakuya***
Sé que debería hacer caso a mi cabeza y a las palabras de Mugetsu, el cual siento totalmente pegado a mi espalda, incluso su aliento contra mi cuello me excita demasiado como para pensar con claridad.
-No lo hagas, Renji.- La voz de Mugetsu me llega desde atrás, excitada mientras siento su cuerpo bajo el mio moverse rozando su polla contra mis huevos y parte de mi polla.- Piensa en él. En su futuro. En su trabajo.- Cuando muerde el lóbulo de mi oreja, no puedo evitar gemir arqueándome para rozarme más contra su polla.
-No...- digo volteando la mirada para besar a Mugetsu y que deje de hablar. No quiero escucharlo. Él es la voz de mi razón y ahora mismo, todo mi cuerpo arde demasiado. No quiero escucharlo. No quiero lógica en este momento. Tan solo quiero una cosa.
-Ah... Renji... ah... ahora...- Digo alzando una mano hacia él.
***Renji***
Mierda. Lo único que quiero es follarme a Byakuya tal cual, a pelo, sentirlo piel con piel y hundir mi polla hasta llegar a su zona omega para fecundarlo. Pero Mugetsu tiene razón, por mas que lo odie y odie todo lo que ha hecho con él. Yo quería a Byakuya para mi. Solo para mi, pero llegados a este punto, incluso tendría que agradecerle que no se lo quedara para él solo como pensaba hacer yo. Tal como dice, podría haberlo hecho perfectamente, pero no lo ha hecho.
Con la ultima pizca de autocontrol, rompo el paquetito y me coloco el condon dejándome caer de rodillas frente a Byakuya. Ver el rostro sonriente de Mugetsu junto al suplicante de Byakuya, me hace querer gruñir de furia, pero me sorprende ver cierto morbo en su mirada y en como hace que Byakuya gima cuando muerde su oreja o voltea su rostro para besarlo, jugando con sus lenguas fuera de la boca. Y todo ello sin dejar de mirarme. Las palabras que me dijo sobre que yo le gustaba, resuenan en mi cabeza, pero me centro en lo que realmente quiero, y eso es Byakuya.
Sus manos se alzan acariciando mis brazos hasta mis hombros y entonces rompe el lascivo beso con Mugetsu y tira de mi cuello para alcanzar los mios. Ya había probado su sabor antes, pero hacerlo de nuevo es tan increíble que todo mi cuerpo se dispara en todas direcciones, sobre todo, en la suya. Quiero devorarlo, quiero todo su cuerpo, quiero sentirlo y no me lo pienso antes de tirar de sus caderas para situar mi polla en su dilatado agujero y penetrarlo de una sola embestida que le hace gritar de placer, arqueando la espalda y siendo sostenido por Mugetsu que lo muerde varias veces sobre su collar omega a la vez que sus manos juegan con sus pezones endurecidos.
***Mugetsu***
Ni en mis mejores sueños podría haber imaginado una escena como la que estoy viviendo y contemplando. El cuerpo de Byakuya, se balancea sobre él mio, totalmente sudoroso, movido por las embestidas de Renji, y no deja de desprender ese aroma que no permite que mi polla se venga abajo por mucho que me corra una y otra vez. Encima, Renji también está soltando su aroma a césped recién cortado y eso solo me pone más duro aun. Ni siquiera sé las veces que me he masturbado oliéndole, mientras dormia en su habitación tras una noche de estudios o de fiesta.
La sensación de mi polla rozando los testículos de ambos me hace gemir y mis manos no pueden evitar viajar del pecho de Byakuya hasta las nalgas de Renj para apretarlas. Oh, sí. Esta sensación es mejor que cualquier sueño que haya podido tener con algo parecido. Su piel está completamente mojada por el sudor, arde al contacto con mis manos, puedo notar lo duras que estan sus nalgas cada vez que las aprieta para embestir de nuevo a Byakuya. Joder... podría morirme ahora mismo y ya sería el hombre más feliz del mundo.
Él parece sorprenderse cuando lo he agarrado. Sus ojos oscuros me miran directamente, provocándome nuevos escalofríos, ante lo que respondo apretándole más. Su respuesta va directa a mi polla, ya que sus gemidos aumentan al estar siendo ayudado a penetrar más profundamente a Byakuya con el empuje de mis manos. Mientras veo como se besan de nuevo, llevados totalmente por el momento, bajo al cuello enrojecido de Byakuya para morder de nuevo sobre la piel dura de su collar y lamer su piel, la poca que queda al descubierto por el collar omega. Su sabor es increíble, adictivo, sin duda quiero más de él. Necesito mucho más de él aunque ahora que Renji también está aquí, quiero obtener todo lo que siempre he deseado y jamás me atreví a tomar.
***Renji***
El interior de Byakuya es tal y como imaginé, aunque no había imaginado nuestro sexo con condon de por medio y menos con Mugetsu bajo su cuerpo, tocándonos a ambos y con su polla rozando nuestros huevos.
Cuando los ojos de Byakuya se centran en los mios y me toma por el rostro, siento que ya nada más importa. Él está aquí. Estamos juntos y yo, estoy en su interior, moviéndome rápidamente, profundamente y sintiendo como poco a poco llego hasta mi objetivo, su zona omega. Cuando lo hago, siento como si traspasara una nueva entrada que me aprieta tal como lo hace su ano. Joder, no es mi primer omega, pero si el primero en celo y la sensacion de su zona omega es muchísimo mejor. Por lo habitual, está mas cerrada, no tan lubricada y a veces, ni siquiera se puede entrar sin forzarla un poco. Pero Byakuya me acoge tanto interiormente como con sus brazos y su boca abierta para mi.
Su suave lengua me invita a entrar y follar su boca como hago con su culo. Sus gemidos constantes son un reflejo del placer que está sintiendo, que le estoy dando. Yo soy el responsable de esos gemidos, miradas y gestos en su rostro que me hacen apretar más el ritmo.
Para mi consternación, las manos de Mugetsu siguen apretándome las nalgas, acompasando mis movimientos lo que hace que aun sea capaz de entrar más de mi omega. Joder, su polla está realmente dura y no deja de rozarse cada vez con más fuerza contra mis huevos, con cada uno de mis movimientos. Joder, casi es como si fuera yo el que se roza contra él con cada nueva embestida a Byakuya y por bizarro que pudiera parecerme antes de este día, un ligero escalofrío me recorre excitándome aun más.
-No lo... pienses...- Me dice entre gemidos mientras clava sus ojos rojos en los mios.- Dejate llevar... Ren...- Susurra cuando Byakuya se vuelve un poco para mirarlo y lamer sus labios para luego morderle el de abajo. Mientras mi amigo, no deja de mirarme, apretarme las nalgas y mover sus propias caderas para rozar más su humedecida polla por mis huevos.- Sabes... lo... mmmm... que siento por... ti... ah...
Escuchar su voz así, entre gemidos me excita tanto que no tardo en sentir como mi polla comienza a hincharse haciendo que Byakuya me bese de nuevo gimiendo sonoramente ante mi anudación y haciendo que los tres nos corramos. Eso me jode tanto como me hace sentir completo.
***Byakuya***
Sentir como Renji me anuda mientras su aroma me rodea y sus labios siguen besándome, aunque algo más suavemente, es como si hubiera conseguido mi objetivo en la vida. No me pasa desapercibido, que Mugetsu jadea más sonoramente cuando termina de correrse bajo mi cuerpo. Puedo sentir su semen caliente lubricar su polla contra mis testículos y los de Renji que están pegados a los mios.
Esto es realmente antinatural, pero en ningun momento he sentido asco o repulsión por la situación en la que estamos. De hecho, sentir el calido aliento de Renji contra mis labios húmedos a la vez que la respiración alterada de Mugetsu roza una de mis orejas, hace que apriete mi ano, provocando un leve gemido en Renji.
-¿Mejor?- Me susurra Renji en la corta distancia mientras siento leves besos en mi cuello y hombro.
-Si...
-Aunque no durará mucho.- Añade Mugetsu haciendo que Renji le gruña.
Instintivamente, acaricio su rostro atrayéndolo hacia mi. No quiero que se enfade o se distraiga y mucho menos que comience una pelea con su polla anclada en mi interior. Además, por extraño que parezca, ahora mismo, me siento agradecido con ambos por estar haciendo que mi peor celo, no sea tan malo. Es más, no se me ha pasado el detalle de que ambos han tenido la precaucion de no follarme a pelo. Tal como estoy comportándome en este celo, estoy seguro de que mi cuerpo no desperdiciaría la oportunidad de quedarse en estado y eso sería el fin de mi carrera, pero... Ah... tener un hijo... nunca había sido una idea atractiva o siquiera posible en mi mente, en mi futuro, hasta ahora que siento como Renji vuelve a bajar sobre mi cuerpo, besando y mordiendo mi collar omega, y la idea de llevar en mi interior un hijo suyo, no se me hace tan desagradable u horrible.
En cuanto su polla comienza a deshincharse la siento escurrir de mi interior hasta que se sale haciéndole chasquear la lengua cuando tiene que quitarse el condon y anudarlo.
***Mugetsu***
En el instante en que Renji abandona el cuerpo de Byakuya, aprovecho para moverlo sobre mi y poder ponerme un condon lo mas rápido que puedo. Sin tan siquiera avisarlo lo penetro haciéndolo jadear y eso alerta a Renji que viene directo hacia mi para tirar de Byakuya, pero lo sostengo mirando a mi amigo de manera desafiante.
-Sueltalo.- Gruñe furioso.
-Tal vez debería de ser él mismo el que dijera si quiere que lo suelte...- Digo moviendo mis caderas como sé que le gusta más, lo que lo hace gemir echando la cabeza hacia atrás.- Dime sensei ¿deseas que deje de follarte o prefieres que te follemos ambos?
En cuanto digo eso, puedo ver el horror en el rostro de mi amigo, pero en cuanto Byakuya comienza a mover sus caderas sobre mi a la vez que alarga la mano para atraer a Renji a su lado, mi amigo lo mira con cierta tristeza, pero mucha más excitación y más cuando el moreno toma su polla semi rigida y se la lleva a la boca comenzando a mamársela.
-¿Es... bueno... a que sí?- Le digo sonriendo a mi amigo.
-Esto... no quedará así... mmmm...- Dice mirándome con tanta ira que siento mi polla palpitar de excitación.
Puede que más tarde lo pierda todo, pero no pienso desaprovechar ni una sola oportunidad de conseguir tener todo lo que quiero.
***Renji***
El aroma de Byakuya no deja de aumentar y aumentar llevándome al borde de la locura por la excitación. ¿Es que este hombre no comprende que si sigue así, perderé completamente mi mente?
Tras follarmelo dos veces más, aparte de la primera, y dos mamadas que me han dejado seco por completo. Me dejo caer en el suelo del piso de Mugetsu viendo como mi amigo respira alterado con su polla totalmente anudada en el interior de Byakuya. Odio reconocerlo, pero tras las horas que llevamos aquí follando, es como si el hecho de no haber podido pasar el celo de Byakuya a solas con él, cada vez fuera menos importante.
-Mas....- gime Byakuya cuando la polla de Mugetsu por fin abandona su interior.- Necesito... ah... más...
-Deberías descansar.- Le digo viendo el estado en el que está.
Su cuerpo está completamente empapado de sudor y semen. Su respiración denota cansancio. No sé ni siquiera cuanto hace que no come nada, aparte de nuestro semen, que de eso si que se ha llevado lo suyo. Su ano no deja de palpitar y está tan enrojecido que realmente me preocupa lo que le va a doler cuando todo esto pase.
-No... ah... no puedo... vuelve a...
-¿Duele de nuevo?- Dice Mugetsu mirándolo con verdadera preocupación.
-¿Qué sucede?- Le digo acercándome a ambos.
-Son las ocho de la tarde. Lleva en celo desde primera hora de la mañana y por más que nos lo hemos follado, no parece menguar. Creo que es el celo más fuerte que he visto en mi vida, hablando desde el punto de vista medico.
Dice mientras Byakuya se incorpora para dejarse caer al suelo y gatea hasta donde estoy de rodillas.
-Es por... los supresores...- Jadea mirándome tan lascivamente que tengo que obligarme a tragar. Sus ojos están totalmente nublados y su medio sonrisa es diabólicamente caliente. En cuanto su mano toca mi pecho desnudo y baja por mi piel erizada hasta rozar mi vello pubico, mi polla se endurece.
-Joder... si no deja de emitir sus feromonas...
-Lo sé... me cuesta pensar...- Dice mi amigo pasandose sus manos por la cara.- Encárgate de él un momento, voy... a por algo que podría sernos útil.
-Si esto es producto de los supresores, dudo que nos sirvan de algo.- Le digo imaginando que va a por alguno de los que solemos guardar para una emergencia.
-Follame Renji.- Dice Byakuya en su propio mundo, mirándome tan de cerca que quedamos pecho con pecho mientras masajea nuestras pollas juntas.- Duele... ah... te necesito Ren... ji...
-Oh, precioso... yo siempre haré todo lo que me pidas...
-Pues entonces hazlo Renji. Ahora...- Dice dándose la vuelta y ofreciéndome su trasero elevado hacia mi.
Antes de ser consciente de lo que hago, mi cuerpo se mueve solo y lo penetro hasta el fondo haciéndolo gritar de placer.
-Oh, dioses... joder... esto... si que es... Ah...
***Mugetsu***
Cuando regreso con un par de botellas de agua veo como Renji ha comenzado a follarse de nuevo a Byakuya, esta vez por detrás y a cuatro patas en el suelo. Ver su cuerpo tensándose con cada nueva embestida mientras gruñe cada gemido, me excita y no me lo pienso antes de acercarme hasta donde ambos estan follando para arrodillarme frente a Byakuya y alzarlo de cuatro patas a de rodillas. Su polla roza la mia y lo tomo del rostro para besarlo sin dejar de mirar a Renji por un lateral de Byakuya. Su mirada esta oscurecida y llena del placer que está sintiendo. Antes de pensar en más, estiro una mano y acaricio su rostro por el lateral, rozando mi pulgar con sus labios entreabiertos para luego, sentir como saca levemente su lengua y lo lame.
Todo mi cuerpo se estremece ante ese simple acto. Sus ojos estan totalmente oscurecidos y su mirada es tan lasciva que, junto al hecho de que no me ha apartado, ya sería todo un milagro, pero conforme meto mi dedo en su boca, él lo acoge lamiéndolo. Joder, podría correrme y morirme ahora mismo y me sentiría el hombre más afortunado del mundo. Cuando siento sus dientes apretar mi piel, retiro mi dedo bajando mi mano por su rostro y cuando hasta bajar por su brazo tomando parte de su cabello, húmedo y pegado a su piel. Mi mente casi no es capaz de funcionar con claridad, debido a nuestros aromas mezclados y disparados. Sobre todo el de Byakuya. Casi es como si los tres estuviéramos en celo, aunque lo cierto es que solo lo está Byakuya. Pero el efecto que su celo tiene en nosotros es increíblemente fuerte. Jamás pensé que el celo omega influyera de esta manera tan intensa y aterradora.
-Ah... ah... Mu... getsu...- Los gemidos de Byakuya contra mi cuello me hacen gemir incluso sin estar en su interior... oh, la polla de Renji está ahora mismo en su interior.
Bajo la mano por el lateral de Byakuya y rozo su propia mano que nos está masturbando a ambos, pasa pasar por sus testículos y comenzar a rozar su entrada. Está totalmente empapada y me es muy fácil rozar con mis dedos la polla de Renji que está incrustada en él. Es la primera vez que puedo tocarla y eso me hace jadear de nuevo separándome de Byakuya y mirando como Renji está ahora con los ojos cerrados y la cabeza hacia atrás. Entonces me aventuro un poco más bajando para lamer la polla de Byakuya mientras sigo explorando con mi mano, su entrada y la polla de Renji.
Byakuya tiene el esfínter tan flexible que me permite meter un dedo sin problemas, lo que lo hace jadear a la vez que Renji empuja más fuerte.
-Ah... joder, Mugetsu... ¿qué haces?- Dice apretando los dientes cuando saco el dedo y rodeo su polla justo fuera del ano de Byakuya, de forma que es como si se follara mi mano y luego su culo.
Esto a cuatro patas, prácticamente cubierto por el cuerpo de Byakuya que está inclinado sobre mi espalda mientras se la mamo y Renji se lo folla, así que cuando alzo la mirada, los ojos de Renji me miran con un poco de furia, pero sus manos no me apartan cuando sigo tocándolo.
Entonces caigo en que no toco condon. Oh, mierda. No se lo ha puesto. Si lo anuda esta vez... seguramente será el fin de todo. De "mi" todo. Miro mi otra mano y aprieto su contenido tomando una decisión que tal vez rompa todo mi mundo, pero llegados a este punto, no puedo echarme atrás. Es un todo o nada.
Me incorporo abandonando la polla de Byakuya y lo miro a los ojos besandolo de forma arroyadora.
-Dime precioso... ¿quieres sentirnos a los dos dentro de ti?- Veo como sus ojos nublados se abren al igual que su boca.
-Sí...- Gime antes de poseer mi boca.- Follame Mugetsu... folladme... ah... los dos... os quie... ah... ro a los dos...- Grita echando la cabeza hacia atrás y cayendo prácticamente sobre el pecho de Renji.
***Renji***
Mierda. Arrugo el entrecejo cuando escucho lo que grita Byakuya y más cuando veo la mirada seria y provocativa de Mugetsu. Joder, esto se me está yendo de las manos. Antes, si Mugetsu me hubiera metido un dedo en la boca mientras me miraba así, se lo habría arrancado, pero mi cuerpo ha reaccionado de otra forma muy diferente a como habría tenido que hacer. Me ha gustado lamerlo. Ha sido super morboso y repugnante a la vez, pero con la polla dentro de Byakuya no es que pueda pensar demasiado. Incluso cuando he notado que me estaba tocando la polla a al vez que el ano de Byakuya ha sido todo un subidon.
-Levántate.- Dice ayudando a Byakuya a hacerlo sin que yo abandone su interior.- Siéntate.- Me dice empujando a Byakuya sobre mi para que yo caiga en su sillón con mi omega sobre mi.
Yo le obedezco porque llegados a este punto no me voy a poner tiquismiquis con como hacemos las cosas, además, lo que estoy sintiendo esta ultima vez es tan increíble que ya nada me importa. Ni siquiera que mi mejor amigo se coloque frente a mi, de rodillas y me indique como sostener las piernas de Byakuya dándole total acceso a su entrada. Jamás he hecho un trio que no fuera con dos omegas o un omega y un beta, aunque eso segundo solo sucedió una vez. Lo mio son los omegas. Sin embargo, estoy a punto de hacer un trio con otro alfa. Mi mejor amigo. Mi hermano, y en lo único que puedo pensar es en lo bien que huele el pelo de Byakuya cuando rozo mi rostro contra su cuello.
***Mugetsu***
Siento algo de nerviosismo cuando miro atónico la entrada de Byakuya siendo penetrada por Renji. Joder, lo veo perfectamente de entrar y salir de él con cada nuevo movimiento de caderas y eso me hace relamerme. Antes de pensar en consecuencias me agacho de nuevo a la polla de Byakuya para lamerla un poco y aprovechar a bajar por sus testículos. Los aparto ligeramente dejándome libre acceso a lo que realmente me interesa y cuando lo alcanzo, saco mi lengua para comenzar a lamer la entrada de Byakuya junto con la polla de Renji.
-¡Ah!¡Joder Mu!- La voz excitada de Renji solo me anima a seguir con mi juego.
Dioses, no solo voy a follar con él, sino que le estoy chupando la polla aunque sea de forma indirecta. Vuelvo a acariciar la zona con los dedos mientras sigo lamiéndoles y repito lo que hice antes, penetrandole con un dedo a la vez que lo hace Renji con su increíble polla.
-Cuidado.- Jadea Renji mirándome con el ceño arrugado. Uf, esa expresión de preocupado y excitado me hace lamerle con más ganas.- Oh... joder...
Sí. Le está gustando. Puedo sentirlo en como su polla aumenta un poco de tamaño lo que me advierte que no siga jugando demasiado tiempo o llegará a su limite, se anudara y se correrá antes de que pueda entrar yo también.
***Byakuya***
Pensaba que mi mundo estaba en llamas hasta que he sentido como Mugetsu ha comenzado a entrar en mi cuerpo junto con la increíble polla de Renji. Sus ojos rojos se clavan en los mios y emite un largo gemido a la vez que se va introduciendo en mi. Renji ha dejado de penetrarme y puedo escuchar su respiración forzada al sentir la presión que tengo ahora mismo en mi interior. Oh, dioses. No solo estoy siendo follado por dos alfas desde no sé cuando, sino que ahora los voy a tener a los dos en mi interior.
-Ah... sí... - Gimo tirando de los cabellos de la nuca de Mugetsu para que baje hasta mis labios.
Sus besos son realmente apasionados. Su lengua me penetra la boca con desesperación a la vez que siento como termina de introducirse por completo.
-Ah... mierda...- Dice sobre mis labios.- Casi no puedo... mmm...
-Sí, lo se.- Dice Renji sobre la curva de mi cuello antes de morder sobre mi collar de nuevo.- Ah... muévete... despacio... mmm...
La voz oscurecida de Renji me eriza la nuca y me hace desear cosas que ni siquiera sabía que querría algun día. Sentirlo dentro... sentirlos dentro es el mejor infierno que he sentido jamás y cuando comienzan a moverse en mi interior, de forma alterna y tan lenta como una tortura, echo la cabeza hacia atrás para gemir y gritar por mas.
***Mugetsu***
Estoy dentro de Byakuya mientras siento como la polla de Renji está rozando mi propia polla en su interior. Por todos los dioses juntos. Esto es... ¡indescriptible! Es la primera vez que me estoy follando a Byakuya a pelo y eso me hace sentirlo todo muchísimo más. Sé que debería ponerme un condon, pero no sé si será la ultima vez que pueda sentir mi polla rozar la de Renji y quiero poder recordar cada placentero roce que nos demos sin barreras de por medio.
Poco a poco voy moviendo mis caderas más rápidamente, instando a Renji para seguir un ritmo entre los dos que parece estar volviendo loco a Byakuya que no deja de gemir y gemir casi sin voz ya. Veo a Renji por encima del hombro de Byakuya que se me ha abrazado, como aprieta los dientes en un claro indicio de que está al limite.
***Renji***
-Tran... quilo...- Cuando alzo la vista hasta Mugetsu, le veo morderse el labio inferior cuando me gime esa única palabra. Supongo que ambos estamos al limite de nuestro aguante, incluido Byakuya.
-Re... almente lo... mmmm... estas disfrutando ¿eh?- Escupo las palabras sin poder evitar como su forma de torcer su sonrisa algo maliciosa me excita sin que pueda evitarlo.
Jamás vi a Mugetsu con otros ojos que como un hermano mayor. Solo mayor por unos meses, pero siempre actuó como si fuera mucho mayor que yo y eso, me hizo admirarlo y quererlo, pero jamás imaginé que él me veía de esa otra forma.
-No sabes... mmm... cuanto tiempo llevo es... perando esto.- Casi puedo imaginármelo si contemplo como Byakuya echa los brazos hacia atrás atrapándome para volver el rostro y besarme desesperado.
-¡Mas!- Grita rompiendo el beso para tirar de mis cabellos y los de Mugetsu a la vez.- Ah... ah... Ren... ah... ah... Mu... ah... ah...
-Oh... voy... ah...- miro a Mugetsu y veo como él también está a punto. Incluso puedo notar como nuestras pollas estan llegando juntas hasta su cavidad omega, entrando en ella de forma alterna y obligando a que nuestros glandes se rocen el uno contra el otro en ese diminuto espacio llevándome a la autentica locura del placer.
Entonces siento un ligero sonido y veo casi a cámara lenta como el collar de Byakuya se abre y desaparece caído con los bruscos movimientos que hacemos los tres.
***Byakuya***
-¡AH!¡SI!¡¡SI!!
En el momento en que siento como ambas pollas de mi interior me penetran hasta lo más profundo de mi ser, hinchándose y anudandose de forma tan dolorosa como placentera, el dolor llega fuerte y punzante desde mi cuello para hacer que el placer se multiplique de tal forma que todo a mi alrededor deja de existir. Tan solo hay placer. Tan solo hay calor y en especial ese ardor en mi interior que me llena y me satisface de tal modo que todo mi cuerpo por fin parece relajarse. Una calidez que sigue llenándome, haciéndome consciente de que mi interior está siendo llenado de esa esencia tan deseada por mi cuerpo, como rechazada por mi mente. Pero también está ese otro ardor. Uno mucho más intimo. Uno que me hace doler el corazón y que proviene de mi cuello haciéndome llorar y reir a la vez.
Poco a poco, todo el dolor, toda la angustia, toda la necesidad, incluso el placer, comienza a desaparecer.
Ah... si... por fin me siento en paz.