Aquel sonido molesto se había ido por lo que dejé de taparme los oídos con mis manos y he abierto mis ojos notando así que Itachi me había protegido de Kabuto.
—Saben, aunque los tres unan sus fuerzas no podrán derrotarme. —decía Kabuto dando unos pasos hacia atrás. —Bueno. Hasta el momento la única que interfiere es ____, pero suponiendo en cómo se encuentra ahora no será capaz de volver a utilizar su habilidad.
—Me subestimas demasiado. —dije formando una media sonrisa mientras me colocaba al lado de Itachi. —Itachi. Sasuke. ¿Recuerdan la vez que entrenamos los tres juntos?
Sasuke e Itachi me miraron unos segundos para luego fijar su vista en Kabuto y entonces ambos realizaron su Susano por lo que yo he formado unos sellos formando así unos espejos alrededor de todos nosotros. Itachi había lanzado unos shuriken con su Susano haciendo que Kabuto tuviera que saltar, por lo que aproveché el momento en que tocó uno de mis espejos para congelar su brazo.
—¡Ahora! ¡Sasuke!
Sasuke lanzó una flecha con su Susano apuntando a la cola de serpiente que tenía Kabuto.
—¡Quiere tomar mi espada para liberarse cortando la cola de serpiente! —gritó Sasuke al ver lo que intentaba Kabuto.
Itachi se lanzó de cara para detenerlo y entonces Kabuto logró tomar la espada de Sasuke, pero en vez de cortar su cola de serpiente, le clavó aquella espada a Itachi.
—Por eso les he dicho que no se apresuraran. —decía Kabuto formando una gran sonrisa. —Ustedes no son rivales para mí.
Kabuto había formado un sello por lo que con Sasuke nos hemos puesto en alerta, pero entonces él dejó de moverse.
—No podrá escapar de ese ciclo infinito...de ese bucle. —decía Itachi con mucha seriedad en sus palabras mientras se quitaba la espada que se encontraba en su pecho. —Este es el jutsu que decide el destino...esto es Izanami.
—¿Estás bien? —pregunté mientras me acercaba a Itachi dándome cuenta que su ojo izquierdo se había vuelto blanco. —Itachi...tu ojo.
—Ahora detendré el Edo Tensei. —decía Itachi quitándole los anteojos a Kabuto. —Así desaparecerán todos los muertos revividos y esta guerra se acercará a su final.
—Entonces...tú también...—murmuré mientras presionaba mis puños.
—Como Uchiha Itachi de Konoha, habré protegido mi aldea una vez más.
—¡¿Por qué?! ¡¿Por qué tienes que hacer todo esto por Konoha después de lo que te hicieron?! —preguntaba Sasuke mientras presionaba sus puños. —¡Aunque tú los perdones, yo no puedo!
—Yo ya no puedo cambiarte. Así que lo menos que puedo hacer ahora es detener este jutsu para no fallar aquello que dejé en manos de Naruto. —decía Itachi mientras colocaba su mano en la cara de Kabuto. —Enséñame el sello...
—¿No hay otra forma en que puedas quedarte? —pregunté esperanzada a lo cual Itachi negó. —Itachi. No quiero que te vayas nuevamente...no puedo soportarlo...
—Esta es la única forma que hay para detener este jutsu. Si no lo detenemos ahora podría ser perjudicial para todos. —me dijo mirándome fijamente. —No te preocupes. Yo estaré siempre contigo.
—¡No quiero que las cosas termines así! —exclamé bajando la mirada mientras contenía las ganas de llorar. —No quiero...
Sabía que estaba siendo egoísta, pero no quería que Itachi volviera a irse y que esta vez sería para siempre. Yo no quería volver a sufrir verlo morir nuevamente, no quería que todo esto acabara así; él merecía seguir con vida, merecía una vida mejor y una gran felicidad.
—Rata, buey, mono, tigre, dragón, jabalí...
Kabuto había nombrado los sellos para deshacer el Edo Tensei por lo que Itachi comenzó a pronunciarlos y entonces Kabuto realizó cada sello.
—Al parecer cualquier cosa que te diga será en vano. —dije mordiendo mi labio inferior aun reteniendo las lágrimas. Tenía unas grandes ganas de echarme a llorar en estos momentos, pero no quería mostrarme débil. —Sabes, el que me estés abandonando en estos momentos te saldrá demasiado caro y te aseguro que no llevaré dangos a tu tumba.
—Gracias, ____.
—Nii-san. Yo te he seguido porque quería comprobar si lo que me dijeron ____, Tobi y Danzo era cierto o no. —habló Sasuke con tristeza. —Pero eso no fue todo lo que pude comprobar. Al estar contigo recuerdo los días de mi infancia, cuando adoraba a mi hermano mayor.
—Antes de la despedida, te mostraré lo que querías confirmar. —decía Itachi mientras miraba fijamente a Sasuke. —Lo que hice aquella noche, todo fue tal como te dijeron ____, Danzo y Tobi...esta es toda la verdad.
Una luz brillante comenzó a rodear a Itachi, yo lo he mirado sin siquiera moverme de mi lugar, sentía que si me movía aunque sea un poco me iba a quebrar, lloraría sin parar y no podría dejar ir a Itachi sin algún arrepentimiento. Debía de ser fuerte por él, tenía que asimilar que él ya no pertenecía a este mundo y que debía de volver.
—Nii-san...
—Te mostré toda la verdad. Siempre te mentía pidiendo que me perdonaras, usaba mis manos para mantenerte siempre lejos de mí...no quería que te vieras involucrado. —decía Itachi mientras se acercaba a Sasuke y le dedicó un cálido abrazo. —Siempre te he querido mi tonto hermano menor.
Aparté la mirada en ese momento, no podía soportarlo más el ver como Itachi se despedía, me limpié las lágrimas que habían salido unos segundos atrás y entonces sentí como tocaban mi cabeza.
—No. No quiero que me digas nada. —dije sin siquiera mirarlo. —No pienso despedirme.
—____.
—No digas mi nombre. —presioné mis puños con más fuerzas mientras intentaba torpemente retener las lágrimas que se iban acumulando en mis ojos. Sentí como Itachi me abrazó y entonces todas mis fuerzas de mantenerme firme se esfumaron en ese momento, comencé a llorar en el pecho de Itachi; en verdad no quería que él se fuera. —Te voy a extrañar demasiado, Itachi.
—Gracias por estar a mi lado todo este tiempo. Gracias por nunca dejar de confiar en mí. —agradeció mientras me acurrucaba más a él. —Gracias por amarme y darme felicidad.
—Nunca dejaré de amarte. Serás el único para mí.
—Quiero que seas feliz, ____. —decía separándose un poco para luego juntar nuestras frentes. —Cuídate mucho y sé feliz.
—Te dije que mi felicidad eras tú, ¿no? —dije formando una débil sonrisa. —Aun así, lo intentaré. Intentaré ser feliz a pesar de no tenerte a mi lado.
—Yo siempre estaré contigo. —me dijo formando una sonrisa mientras colocaba su mano en donde se encontraba mi corazón. —Estaré aquí. Contigo.
—Itachi...te amaré por siempre.
—Mi querida esposa...—murmuró depositando un suave beso en mi frente. —Pase lo que pase a partir de ahora...siempre te amaré.
La luz que rodeaba a Itachi comenzó a hacerse cada vez más fuerte y entonces su alma comenzó a elevarse.
—Hermano...
—Sasuke. Te pido que la cuides. —decía Itachi mientras su alma seguía elevándose. Itachi nos miraba a ambos con una sonrisa, él se estaba despidiendo con una sonrisa.
Cuando ya no logré ver más a Itachi caí de rodillas al suelo y comencé a llorar, lloraba por que esa era la última vez que podría verlo. Esta fue nuestra despedida, él ya no volvería y debía de asimilar eso...
¿Pero cómo hago eso?
—Quiero volver...—murmuré mientras miraba el suelo donde se estaba mojando por mis lágrimas. —Quiero volver...
Presioné mis puños con fuerza para luego golpear el suelo, no me importaba si me estaba haciendo daño, el dolor que estaba sintiendo en estos momentos era más fuerte que esos simples rasguños en mis manos.
—Detente, ____. —decía Sasuke con la voz un tanto quebrada. —Detente...
—¿Cómo quieres que me detenga? —pregunté con un sollozo. —¡No quiero que esto termine así! ¡Ojalá Itachi no hubiera muerto aquel día!
Algo comenzaba a brillar de mi porta shuriken, yo he revisado notando así que la esfera que saqué del agua aquel día en la cascada con Itachi brillaba sin parar.