Hola Hola Corazones!! Estuve realizando algunos cálculos matemáticos con una fórmula especial de desarrollé yo misma. Actualmente tengo 280 seguidores en mi perfil, tomando en cuenta que cada capítulo de Crossing Roads posee al menos 125 votos, los de Who killed that bitch? alcanzan tambien más de 100, y la cantidad de lectores(uniendo a los activos y los fantasma) son superior a 1000. Y luego debemos agregar también a los lectores de Instituto de Delincuentes Juveniles... Entonces tomamos que a 125 le sumamos 100, y a 1000 le sacamos el promedio entre 3 historias y lo dividimos entre la cantidad de votos por capítulo, por la cantidad de capítulos, dividido entre dos, porque la mitad son de Amer... Entonces....
Jajajajaja yo no tengo ni puta idea de como hacer formulas matemáticas y ustedes siguiéndome la corriente jajajajajaja Los amo... Pero bueno solo quería invitarlos a seguirme al lado oscuro corazones de mi vida. No sean malitos, no cuesta nada, solo darle al botón de seguir en mi perfil. Vamos, vamos, vamos!!!
Ahora si, disfruten el cap :) (pero pimero siganme >:/) ¿Qué? ¿Qué pensaron que ya nunca iba a actualizar esta historia y por eso esperaban que les dijera algo como "Esto no es un simulacro"... Nahhh ya eso esta pasado de moda, disculpenME..
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-¿PERO QUE MIERDA TE PASA, IMBÉCIL?- me di cuenta de que todo el mundo daba al menos un paso hacia atrás, atemorizados por mi reacción, pero no me importaba ni un carajo. No me importaba nada, mi cuerpo se movía solo, mi boca hablaba y lanzaba insultos que ni yo mismo era capaz de recordar.
Antes de darme cuenta, ya estaba frente a Julian, no sentía mis manos, y sabía que esto era porque estaba ejerciendo demasiada presión al cerrar mis dedos en puños. Uno de sus gorilas se colocó en medio antes de que pudiera ponerle las manos encima.
-Un paso atrás di Angelo, - exclamó el muy idiota empujándome de un manotazo por el hombro.- Ni un paso más o ni siquiera tu cuñadito será capaz de defenderte.
Esas palabras, fueron el peor error que el chico cometió en su vida. Hay una especie de chip en mi cerebro, un cable, que tiende a desconectarse cuando mis niveles de ira superan las expectativas. Como si se apretara un botón de apagado de la parte sensata de mí, y entonces esa parte salvaje, malvada, adquiriera dominio absoluto sobre todas mis reacciones. Si Hazel estuviera aquí, habría lanzado la advertencia. Pero mi hermana no estaba aquí.
Fue como si todo pasara en cámara lenta, fui consciente, por un par de segundos, de que había dos gorilas (amigos de Julian) frente a mí. Entonces, mi puño derecho se estrelló contra la mejilla de uno de ellos, tan fuerte, que incluso pude escuchar sus músculos faciales contrayéndose. El idiota se vio obligado a retroceder varios pasos. El segundo de ellos era quien sostenía a Will y Fountain, por lo cual, y al ver a su amigo completamente indefenso, se los lanzó a Julian (si, como si fueran un par de sacos de patatas) y luego salió "en defensa"
Le di un rodillazo contra el estómago que lo dejó sin aire y cayó hincado al piso, una vez ahí, solo fue necesaria una patada en su pecho y el desgraciado terminó completamente acostado en el piso, intentando recuperarse.
Mi vista entonces se dirigió hacia Julian, quien me miraba con las cejas levantadas y una sonrisa en su rostro. Fountain se mantenía apenas en pie e intentaba escaparse del brazo de Julian, que en el momento lo abrazaba del cuello, pero la reacción más tosca, la que nunca me esperé, fue la de Will.
-No pedí tu ayuda, di Angelo- exclamó el rubio, que estaba cruzado de brazos, también siendo sujetado por Julian, pero tan en calma como si estuviera platicando con un par de amigos en un hermoso día de campo, y yo hubiera llegado a interrumpirlos de una forma abrupta.
-TU TE CALLAS- le espeté, señalándolo con mi dedo índice. No tenía tiempo para seguirle su estúpido juego de "Estoy enojado contigo, no me hables". Mi atención volvió a Julian pero fue él quien habló primero.
-Escucha no es mi culpa- dijo con la voz amigable que utilizaba rara vez- Tu rubio se metió y Boris se defendió. Todo pasó muy rápido no pude evitarlo. Pero mira, aquí está, sano y salvo- dijo tomando a Will por la parte trasera del cuello de la camisa y extendiendo el brazo, hasta empujarlo en mi dirección, como si me estuviera entregando un objeto- Nada le pasó, solo se despeinó un poco.
Tomé a Will del brazo y lo empujé hacia donde sabía que estaba Jason para atajarlo y que no tropezara. Escuché los reclamos de mi novio, pero no reparé demasiado en ellos, mi mirada se quedó en Julian. Justo ahora, quería destrozarlo por completo. Arrancarle los dientes de un golpe, desfigurarle los ojos con una patada y desgarrarle los músculos sin piedad.
Pero...Aun estaba Loui... Y Will quería que Julian dejara de golpearlo y... y... Ahhhhhh... ¿Por qué siento esta absurda necesidad de cumplir cualquier estúpido capricho de este bobo-rubio-cabeza-hueca?
-Suéltalo- le digo a Julian básicamente entre dientes, creo que nunca en mi vida me había costado pronunciar tanto una palabra... Ok, excepto las palabras cursis que Solace quiere que le diga, pero eso no cuenta. -Déjalo en paz... ¡ahora!
La mirada de Julian se dirige hacia Fountain, luego hacia mí, confundido y un poco ofendido, como si le estuviera quitando un juguete muy preciado, que justo acababan de comprarle. Y a decir verdad lo entendía, y no quería quitarle su diversión. Entonces él se acercó a mí, y me habló en un susurro al oído.
-¿Me estás jodiendo?- dijo, a un nivel de voz que nadie más escuchó- No he tenido nuevos desde hace más de un año. Aparece el rubio y no lo toqué... Ahora aparece Miss Francois... ¿y me dices que lo deje en paz? Ni siquiera es tu amigo.
-Es amigo de Solace- le susurro de vuelta- Lastimarlo es como lastimarlo a él... así que...
-Pero...-inicia él, sin embargo se interrumpe y lanza un suspiro forzado- Bien... pero me deberás un favor.
-No tengo por qué deberte nada- le contestó de inmediato. Todo el mundo está en silencio, intentando escuchar lo que decimos, sin embargo los susurros son apenas audibles entre nosotros.
-No seas así- me insiste él- Solo te iba a pedir una salida juntos a un bar. Desde que ese apareció ya ni me hablas.
Ja. Como si fuéramos amigos, como si mi deber fuera salir con él cada que se le antoje y hablar de cosas sin sentido. Pff. Intento mantenerme en calma, porque sé que de todas formas no es tan malo. De hecho a veces es un poco divertido pasar el rato con Julian. Solo un poco. Pero eso no significa que seamos amigos.
-¿Cuándo?- le pregunto, aun en susurros.
-Viernes- contesta él con tono patéticamente alegre.
-No puedo el viernes...
-Déjame adivinar... Lo pasaras con Miss Sunny-face- se queja él, sin embargo no insiste- ¿Jueves, en la noche?
-Hecho.
Ambos nos alejamos y Julian adopta nuevamente su modo de "Pandillero-patea-traseros", endereza los hombros y su rostro se torna tosco y malévolo.
-Tenemos un acuerdo entonces- dice, para luego lanzarme a Loui, apenas el francés toca mi pecho, yo lo lanzo también, lejos de mí, hacia la dirección en la que está Will. Luego, mientras va caminando hacia atrás, con sus esbirros siguiéndolo, me dirige unas últimas palabras –Es como un pacto de sangre, di Angelo. No lo rompas- termina con tono amenazante, que todo el mundo se cree, excepto yo.
Me limito a rodar lo ojos, dar media vuelta y largarme hacia la salida antes de que me dé un impulso y termine continuando el trabajo de Julian de destrozarle los huesos a Fountain.
-¿A dónde vas?- salta él, como si hubiera leído mis pensamientos- En cinco minutos entramos a la próxima clase.
-A la casa de "No te metas", en el callejón de "Qué te importa" y contiguo a "si me vuelves a hablar te mato yo mismo"- le contesto con el tono más grosero que tengo en mi repertorio, sin embargo esto no llama en lo más mínimo la atención de Will. De nuevo me está ignorando.
-¿Cómo es que pasas las materias si te saltas tantas clases?- pregunta Percy en un susurro mitad triste mitad celoso- Dime el secreto por favor.
-Porque es Nico- contesta Leo- No hay más explicación.
-¿Y tú como caracoles estabas tan seguro de que Nico iba a intervenir?- preguntó Frank con tono tranquilo.
-Porque soy sexy Leo Valdez- contestó el latino- Yo lo sé todo, siempre.
-Excepto las respuestas del examen- intervino Percy- Con esa ayuda para qué enemigos, Valdez.
Fue todo lo que toleré escuchar, me di media vuelta de nuevo y estaba a punto de desaparecer cuando una fuerte mano me sujetó por el brazo.
-Espera, Nico- fue la voz de Frank. Mi mirada se dirigió desde su mano sujetando mi brazo hasta su rostro, fulminándolo. ¿Por qué me detiene así? ¿Qué no sabe que odio que me toquen?- Tomaré tu PS4 para jugar hoy en la tarde ¿Está bien?
Lo dijo así, como si nada, como si mi mirada fulminante no le hubiera afectado en lo más mínimo. Entonces comprendí algo de lo que no me había percatado hasta el momento. Frank Zhang ya no era un simple compañero de casa, ni siquiera era "ese" amigo con el cual podía jugar Mitomagia a escondidas en su habitación, y luego juraríamos ante el mundo que nuestras partidas clandestinas no existían y que nuestros blocks de cartas los manteníamos como un simple recuerdo de nuestra infancia. No. Ese chico me había sido arrebatado. Ya no existía y la única culpable era mi hermana.
Porque ese era el motivo de su cambio. Era muy sencillo darse cuenta. Antes de ella, Frank y yo apenas y nos dirigíamos la palabra frente al resto del mundo, ni hablar de este arrebato de hoy. De hecho, creo que antes, Frank me temía un poco, incluso. Pero ahora, estaba frente a mí, reteniéndome, y pidiéndome algo que sabía que yo no haría en circunstancias normales.
Y no, no me refiero a pedir el PS4, porque eso nunca me ha importado, y él lo sabe. Frank es el único que puede tomar cualquiera de mis consolas sin pedirlo, porque sé que las cuida tanto como yo lo hago. No. Frank está pidiendo mucho más que eso, en un código secreto que sabe que solo yo comprendo. Y lo hace por una única razón. Él considera que tiene el poder para hacerlo sin que lo mande al Tártaro. Y cree que ese poder se lo ha ganado al salir con mi hermana. La traducción de su mensaje es: Vamos a jugar en casa, y ese "vamos" incluye a Fountaine. En otras palabras, me está pidiendo permiso para que Loui pueda tocar los preciados controles de mi bebé favorito.
La verdad llega ante mis ojos como los zombis aparecen en Resident Evil: Sorpresiva e inminentemente, sin que pueda evitarlo. Frank Zhang ya no es, ni será mi amigo nunca más. Ni tampoco yo lo soy para él. Esa relación quedó completa y totalmente en el olvido.
-Dejé una partida iniciada en Mortal Kombat- le digo al tiempo que él libera mi brazo de su agarre y yo asiento en aprobación a lo que pide- Destroza a Johnny Cage por mi... hermano.
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-¿Está todo bien, Annie?- pregunta Piper cuando la rubia cuelga su llamada.
-Perfectamente- dice ella, acercándose al grupo con una sonrisa perversa reflejada en su rostro, y sentándose en la mesa del jardín del Instituto donde estaban sus amigas.- Les contaré todo cuando estemos en casa.- Se acerca algo grande.
-Ni me lo digas...- dice Calipso, y todas saben que ella se refiere a su duelo con Quione. – No sé cómo, pero la voy a vencer cueste lo que cueste.
-Y nosotras te vamos a ayudar- responde Annabeth- Sin embargo, no me refería a eso.
-¿Ah no?- Calipso pregunta, pero al notar la cara de póker de Annabeth, se limita a asentir y guardar silencio, en una clara aceptación de que lo hablarían más tarde. – ¿Se te ocurre algo para hacer que Thalía vuelva a amar a Piper? Porque por el momento creo que ella es quien más ayuda necesita.
-De hecho estuve pensando en eso y...- empezó Annabeth, pero entonces se distrajo al observar la velocidad con la que Hazel tecleaba las letras en su teléfono celular, escribiendo un mensaje de texto que bien podría competir con la Biblia en cuanto a longitud.- ¿Con quién hablas, Haz? ¿Problemas en el paraíso con Frank?
-¿Eh?- Hazel salió de su ensimismamiento, sin embargo estaba confundida- ¿Frank? No, hablo con Kaleb.
La reacción de las tres chicas fue similar, levantaron una ceja en señal de incredulidad. Por lo cual la morena sonrió con inocencia, como quien es atrapada haciendo una travesura. Como niña encontrada por su padre mientras se comía las galletas en la cocina.
-No tiene nada de malo- dice ella- El único tema de conversación es mi hermano. Tienen que ver esto. Es... Wow... Creo que este chico podría hacer un libro completo enumerando las razones por las cuales está enamorado de Nico di Angelo.
(N RL: Kaleb es yo... Yo también podría hacer ese libro :'( y tendría como 200 capítulos)
-Haz... No creo que ni a Frank, ni a Nico, le agrade que tú hables con el patinador- sugirió Piper en todo conciliatorio.
-Kaleb no es un mal chico- contestó la morena rodando los ojos- ¿Es su culpa que mi hermano sea tan sexy que el hielo se derrite con su sola presencia? Palabras de Kaleb, no mías... Pero tiene razón, no es su culpa.
-Bueno... No... No es culpa de él- inició Annabeth- Pero tampoco es culpa de Nico que él se enamorara.
-Tomando en cuenta que di Angelo lo besó primero...- intervino Calipso- Sí es, un poquito, su culpa.
-Además Kaleb me ha jurado una y otra vez que no va a intervenir en Solangelo- continuó Hazel- Dice que nunca había visto a mi hermano tan feliz y que no piensa intervenir en eso. Él solo quiere que sea feliz... Lo cual me hace pensar que la vida es injusta.
-¿Estás diciendo... que... preferirías a Kaleb con Nico, en lugar de Will?- preguntó Piper, uno de sus ojos había comenzado a temblar, en un tic nervioso causado por la ira.
-Claro que no- saltó de inmediato Hazel- A eso me refiero con que la vida es injusta. Porque todos sabemos que el Solangelo no va a acabar ni siquiera en mil años. Pero Kaleb tendrá que sanar su corazón a la fuerza. ¿Por qué no puede aparecer alguien que haga feliz a Kaleb? Así, sencillamente, como si fuera un truco de magia.
-¿Sabes Haz?- dice Piper- Creo que tienes razón... Todo sería más fácil. Pero justo ahora, no se me ocurre nadie que pueda hacer buena pareja con Kaleb. Él es... demasiado... libre. Tiene que encontrar a alguien que comparta eso.
-O a alguien que necesite esa libertad- apoyó Calipso- Pero no hablemos de eso. Me recuerda a Quione y me pone de mal humor. Además, insisto en que a Frank no le agradará que hables tanto con él.
-A Frank no le importa- contesto la morena- Se lo comenté hoy en la mañana y me dijo: ¡Qué bueno, Haz! Tal vez lo ayudes a superar a di Angelo- terminó la morena, poniendo su voz grave, haciendo una muy mala imitación de su novio.
-Bueno... Al menos sabes que no tendrás problemas con él- dijo Annabeth.
-Nunca tengo problemas con Frank- contesto Hazel- Nunca se molesta por nada. A veces es como si simplemente no le importara.
-Créeme cuando te digo que es mejor así- dijo Calipso- No hay nada peor que un novio controlador.
-Si hay algo peor- intervino Piper- Un novio "controlado" es mil veces peor- luego dio un largo suspiro y se recostó contra la mesa. - ¿Por qué la vida tiene que ser tan difícil?
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Lanzo una estocada que golpea con fuerza su espada, avanzo varios pasos, luego él me devuelve el movimiento y ahora soy yo quien camina hacia atrás. El sonido metálico de los filos rozando uno contra el otro, calientan mi pecho. Adrenalina pura.
Doy un paso en falso y caigo al suelo, pero antes de que él me toque con la punta de su espada, giro, varias veces, alejándome, puesto que él no se rinde y sigue insistiendo, una y otra vez, siguiéndome. Doy un salto y me pongo nuevamente en pie.
Ambos sabemos que estas no son las reglas del deporte, pero no nos importa, en momentos donde el estrés nos agobia demasiado, optamos por tener una pelea de espadas. Sin reglas. Sin limitaciones. La mejor forma en que los dos conseguimos liberarnos un poco.
Me lanzo nuevamente en ataque y consigo la delantera. Lo obligo a caminar hacia atrás, a dar pasos torpes y apresurados, pues es la única forma en que consigue evitar todos mis movimientos. Solo así mantiene su pecho lejos del filo de mi espada.
-¡Wooooo! ¡Vamos Thalía! Muéstrale quien manda- la voz de Reyna me apoya desde un lugar cercano. No esperaba escucharla. Se supone que ella no debería estar aquí, pero aun así, me causa cierto regocijo que me mire mientras estoy casi ganándole a mi profesor de esgrima.
Lamentablemente, su intervención también me desconcentra, y provoca que Luke recupere fuerzas y en un rápido movimiento me desarma, para luego tomarme por la cintura y abrazarme. Tal y como lo hace cada vez que me gana. Cuando yo gano, hago un baile del triunfo y río con ganas mientras le digo: "En tu cara, idiota". Pero ese no es el punto.
Nos separamos y ambos nos deshacemos de las máscaras de esgrima. Me volteo y ahora noto que Reyna no viene sola, sino que Nico di Angelo la acompaña. Esta cruzado de brazos, con su típica expresión soberbia, pero cool, en su rostro.
-Si hubiera sabido que te iba a desconcentrar no te habría gritado- dice Reyna con tono burlón, aunque ambas sabemos que se está disculpando. Yo me limito a hacerle un gesto con la mano, quitándole importancia. Por suerte el ejercicio me ha puesto de buen humor, al menos por ahora.
-A Calipso no le harían daño unas clases de esas- interviene Nico señalando a Luke con la cabeza- ¿Ya te contó en el lío en que se metió?
-El lío en que tú la ayudaste a meterse- corrige Reyna- En serio, Nico... ¿Cómo se te ocurre dejarla hacer algo así?
-Esperen, esperen- los interrumpo, al tiempo que Luke me da una botella de agua. Rodeo los ojos al notar que la abrió para mí, como todo un caballero. Él nota mi gesto y me dirige una sonrisa encantadora para luego encogerse de hombros- ¿De qué estamos hablando exactamente?
-¿Qué tienes en contra de Piper?- me pregunta Nico de pronto. Sus palabras son tan repentinas y sorpresivas que incluso Reyna voltea a mirarlo con incredulidad.
-Eso a ti no te incumbe- le contestó cortante- Dime... ¿a qué te refieres con que Calipso está en un lío?
-Eso a ti no te incumbe- contesta él, repitiendo mis palabras. Luke a mi lado se pone una mano sobre los labios disimulando una sonrisa.
-Con que quieres un trueque...- le digo al comprender lo que está haciendo. Buen plan. Muy buen plan. Tentarme primero, despertar mi curiosidad, y luego exigirme un pago a cambio.- Puedo preguntarle a Reyna de todas formas...
-Pero Reyna no te dirá nada- contesta él muy seguro de sí mismo.
-Ah no... A mí no me pongan en medio de sus jueguitos de niñas- interviene ella, poniendo sus dos manos en señal de alto.
-Yo puedo darle clases a tu amiga de todas formas- interviene Luke- Para lo que sea que las necesite
-Duelo de espadas mientras patina sobre el hielo- contesta Nico mirándolo a él, al parecer no va a insistir en su pregunta- Apuesto a que no le ha pedido ayuda a Thalía solo porque no quiere causar más problemas entre ella y Piper.
-Y tú vienes a pedir esa ayuda en su nombre porque...- inicia Luke.
-De hecho no vine a eso...- contesta di Angelo encogiéndose de hombros- Solo fui a buscar a Reyna y ella venía hacia acá. Y ya que estamos aquí...
-Además Nico ya se acostumbró a estarles salvando el trasero a sus idiotas amigos- aporta Reyna- Y como nuestras chicas tienen mal gusto y se fijaron en ellos...
Compartí una mirada con Luke y él me sonrío de vuelta, brindándome confianza y tranquilidad. Dándome una clara señal de que podía ayudar a Calipso con lo que sea que esta se propusiera hacer. A continuación, me despedí de ellos, para ir a cambiarme. Y a respuesta que no le di a Nico empezó a torturar mi conciencia, a tal nivel, que me vi obligada a pronunciarla en voz alta, cuando supe que ya nadie me escuchaba.
-No es nada contra ella- dije en un susurro- Pero si Piper y Jason se enteran de lo que yo sé... Les será imposible, incluso, mirarse a la cara.
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Wow, a que no se esperaban ese último POV jajajaja raios, debí apostar. ¿Te lo esperabas Mario? Se sincero, yo sé que no lo viste venir jajaja.
¿Saben? Justo hoy estaba pensando en mi inminente retiro de los fanfics de PJO. En resumen, siento que no los satisfago a ustedes, mis queridos lectores, y si no cumplo esa misión, pus... entonces para qué escribir ¿no? Ya dirá el tiempo que pasará conmigo. Eeeeen fin.
Pregunta Random: ¿Cuantos leerían una historia completamente propia escrita por mi? No es que esté pensando en hacerlo pfff, claro que no... Mucho menos en colaboración con Amer, pfffff, quien haría eso. Esto es solo una pregunta que surgió en mi cabeza, no más.
Espero que les haya gustado. Y no se pierdan los próximos capítulos de CR, que nos acercamos al final.
Besitos, nos leemos pronto.