-Tienes que decirle-sugirió seriamente Hermione
-Pero...
-¡Harry y tu van a tener trillizos! ¡El tiene que saberlo!
Suspiraste y se colocaste la taza de té sobre la mesa de la cocina.
Te encontrabas con Hermione, de verdad necesitabas ayuda, tenías mucho miedo de decirle a Harry la gran noticia.
Teddy, el ahijado de Harry de apenas medio año de edad,se posó sobre tu regazo, masticando un trozo de una de las deliciosas galletas hechas en casa de Hermione.
-Usted han estado criando a Teddy juntos durante más de un año, van a estar bien-dijo tranquilizadoramente.
-Créeme, Harry estará tan emocionado y Teddy tendrá alguien con quien jugar-afirmó sonriendo.
-¡Bebés!- chilló Teddy golpeteando con sus pequeños puños la mesa
-¿Puedo entender que Teddy ya lo sabe?- preguntó Hermione mirando a Teddy divertida.
-Por supuesto que lo sabe-contestaste, rebotando la pierna hacia arriba y hacia abajo de manera que Teddy dejó escapar un grito de alegría.
-Le digo a Teddy todo.
-¡Estoy en casa y traje a Harry conmigo!-grito Ron desde la entrada.
Esa voz hizo que te pusieras más nerviosa de lo que ya estabas, Harry ya había llegado.
Tu y Hermione se sorprendieron. Agarraste la prueba de embarazo de la mesa, en la que se leer que el resultado fue positivo sobre la mesa y se lo metiste apresuradamente en el bolso de Teddy, en ese instante Harry y Ron entraron en la cocina.
-(T/N)-Harry dijo alegremente, cruzando la habitación hacia ti y besar tu mejilla suavemente para después ir hacía Teddy y despeinarle el cabelle cariñosamente.
-¿Qué haces aquí?
-Sólo quería hablar con mi mejor amiga- dijo Hermione rápidamente, golpeando con fuerza la mano de Ron lejos de la galleta que estaba a punto de tomar de su plato.
-Y ver a Teddy por supuesto.
-¡Bebés!-grito Teddy felizmente, tu y Hermione miraron preocupadas de como Harry miraba a Teddy, muy perplejo.
(...)
Hermione había cocinado unos excelentes espaguetis a la boloñesa, algunos de los cuales terminaron en sus cortinas ya que a Teddy le gustaba lanzar su comida tanto. Ron te había ofrecido un vaso de vino, pero ahora que estaba embarazada, se negó y Harry y Ron se sorprendieron.
-¿Por qué estás tan sorprendido que no quería beber esta noche?- le preguntaste a Harry,el cual conducía. Teddy, en su asiento trataba de cantar la música muggle que estaba sonando en la radio.
-¡Nunca rechazas una bebida!-respondió Harry, que te miro por unos instantes antes de fijar sus ojos en la carretera de nuevo.
-La semana pasada tu y Ginny bebieron tanto que estaban bailando en la encimera de la cocina de la señora Weasley- dijo seriamente,el trato de suprimir fallidamente una risita que se escapo de sus labios
-Yo sólo ... no tenía ganas de beber- dijiste con ligereza, con la esperanza de entendiera lo que en realidad querías decir.
Pero, lamentablemente, Harry no sospechaba nada. Ni siquiera sospecho cuando rechazaste una copa de vino que te ofreció George mientras cenaban en La Madriguera. Había pasado una semana desde que te enteraste de que estabas embarazada y todavía Harry no lo sabía. Sin embargo, decidiste que esta noche se lo contarías todo.
Hermione y Ron estaban buscando un peluche para tu confesión, mientras que Harry y tu tenían una agradable velada.
Comenzabas a sentirse nerviosa, no importa cuántas Hermione te aseguró que Harry estaría encantado; no podías dejer de sentirte así.
-¿(T/N),me estas escuchando?-dijo Harry, colocado dos platos sobre la mesa. De lo distraída que estabas no notaste que Harry te había estado hablandote.
Él puso los ojos en blanco y beso tu mano. -¿Quieres una copa de Whisky?
-Eh... no ... Voy a beber un poco de agua- dijiste y con un movimento de tu varita hiciste que dos vasos salieran volando del armario directo a la mesa en donde se encontraban cenando.
-No te he visto beber en un tiempo ¿estas esnferma?-pregunto, sirviéndose agua en uno de los vasos
-Algo por el estilo-murmuraste, poniendo un pedazo de pastel de pollo,una cucharada grande de guisantes y una cucharada de puré de patatas en cada plato.
Harry había encendido varias velas en la mesa y se comió su cena en la luz de las velas. Miraste los guisantes que estaban en su tenedor y sonreíste, recordando que Hermione te había dicho que tus bebés eran probablemente del tamaño exacto de un guisante en este momento.
-¿Por qué le sonríes a los guisantes?- Preguntó Harry, divertido.
Mordiste tu labio inferior y miraste a Harry. Sus ojos color verde esmeralda que tanto amabas brillaban de confusión y diversión mientras que bajo el tenedor y entrelazo sus manos con las tuyas.
¿Quieres oír algo increíble?- Le preguntaste, abriendo la mano y colocando un pequeño guisante en ellas, él parecía confundido y como si estuviera a punto de estallar en risas.
-Esto es lo pequeño que nuestros bebés son en este momento.
-¿Que?
Los ojos de Harry se abrieron por completo. Su confusión se convirtió en alegría y se puso de pie.
-¿Estas embarazada?-logro articualar por fin.
-¡Sí!-dijiste entre lagrimas, lanzandote a sus brazos .
-¡No puedo creerlo!- exclamó Harry, su rostro brillaba de alegría, su mano te sujeto por la parte trasera de los muslos y te levantó de un salto, enrollaste tus piernas encima de la cadera de él. Sus labios se fundieron en una dulce y largo beso, una de sus manos descansaban en la parte inferior de tu espalda y la otra te sujetaba en la parte trasera de tu cabeza.
Sentiste tu corazon parar por un segundo, tu podías ver la alegría reflejada en sus ojos.
-¿Estás feliz?
-¡Por supuesto que estoy feliz!- exclamó, girandote alrededor y casi derribando varias sillas en el proceso.
-Espera ... ¿así que esta es la razón por lo que no has estado bebiendo durante la semana pasada?
-¡Finalmente!-gritaste sonriendo.
Harry te puso abajo, tus pies firmemente pudieron tocar el suelo.
-Ahora que estás embarazada estaré más feliz que nunca-dijo Harry, entonces él sonrió y posó una mano en tu mejilla, acariciándola suavemente.
-Te amo (T/N), los amo.
-Nosotros también te amamos-dijiste riendo, para darle un beso en su mejilla.
-Será mejor que empecemos con la cena ¡ya que ahora estoy comiendo por cuatro!