¡Solo tiene 7 años! [NamJin]

Tal vez, quizás.

Tap, tap, tap.

Las suelas de los zapatos de Mark resonaban con fuerza sobre el largo pasillo, con cada paso sentía un nuevo malestar en el estómago, escuché la puerta ser golpeada tres veces y no necesité más para confirmar su presencia. Tenía la respiración agitada, seguramente por la rapidez con la que vino a mi departamento, y sus manos temblaban ligeramente, podría decir que estaba peor que yo.

–¿Dónde está?– fue lo primero que dijo empujándome con el hombro al entrar, no lo tomé a mal, hice exactamente lo mismo cuando llegué y Jimin abrió la puerta para mí.– ¿Por qué no lo están buscando? Estamos perdiendo el tiempo reuniéndonos aquí a tomar el té, maldita sea. TaeHyung está llegando, lo mejor será que nos separemos y busquemos los lugares que frecuenta...

Yoongi desde su lugar solo negó con la cabeza y se levantó del sillón con un papel un poco arrugado en mano. Podía adivinar lo que haría después, parecía un juego sin sabor de copiar y pegar.

Leyó la carta en silencio, sus manos temblaron, su mirada se oscureció y la respiración pareció faltarle.

No.

No estaba peor que yo.

–¿Qué le hiciste?

Sabía que preguntaría eso también, desde que llegó, desde que llegó Hoseok, por sorpresa, y Yoongi, desde que Jimin me mostró la carta y llamé por celular a Mark. Desde que bajé al piso de WheIn y pregunté a la señora de al lado. En ese momento parecía que lo sabía todo a excepción de una cosa, la única maldita cosa que me importaba saber.

¿Qué le hice?

–¡Responde!

–¡Hey, cálmate!– intervino Hoseok levantándose de su asiento con anticipación a lo que seguramente sería un golpe en mi rostro.– NamJoon no tiene la culpa de nada, esto solo pasó y él tomó una decisión.

–¿Solo pasó?– repitió sonriendo de manera irónica mientras arrugaba la carta que SeokJin dejó, tal y como lo hice yo, la diferencia era que el que cargaba la culpa en esa situación era yo.

Yo que lo había dejado caer entre mis dedos sin fuerzas para retenerlo. Pero, al final de todo, ¿Cómo iba yo a saber que Jin estaba así?¿Qué tenía todos esos problemas en la cabeza y esos sentimientos que lo asfixiaban?¿Cómo me hacía responsable de algo que no sabía que estaba causando? No lo sabía. No sabía que no me amaba.

De nuevo, tres golpes en la puerta y una respiración agitada.

–Vine lo más rápido que pude, alguna novedad.– Habló TaeHyung entrando al departamento.

–Lo único que podemos hacer es esperar, SeokJin lo dejó claro en su carta, volvería con su familia.– Dijo ahora Jimin masajeando los hombros de Hoseok para que dejara de mirar a Mark como si quisiera matarlo.– No sirve de nada pelear. Mark puede intentar buscarlo a través de su madre y darnos noticias, no tenemos poder para más.

–¿Cuándo dijo eso?¿Volvió? Creí que se había escapado.

Jimin negó y tomó la carta arrugada del suelo, caminó hasta él y se la dió en la mano para luego avanzar hacia mí y posar una mano sobre mi hombro, intentando consolarme en silencio, como había estado desde que lo supe, ya casi no era protagonista de mi propia vida, ya casi no podía narrar lo que pasaba a mi alrededor porque había perdido el poco sentido que tenían.

– Hola, Jimin. Soy Kim SeokJin. Es muy seguro que tú hayas encontrado esta carta primero, por favor, lee esto para NamJoonie, y para todos los que estén contigo.– Comenzó a leer en voz alta. Suspiré angustiado dejándome caer sobre uno de los sofás con Jimin aún acariciando mi espalda con parsimonia.– Está carta es algo difícil pero necesario de hacer, sé que les parecerá una broma de mal gusto o que incluso ahora estoy siendo secuestrado, no es así. Estoy bien. Hace unos segundos no sabía ni siquiera que podía escribir, es muy raro todo lo que está pasando, pero lamento decir que esta será la última vez que sabrán algo sobre mí. Desde que llegué hasta el minuto en el que escribí esto, es como un sueño, un sueño que poco a poco se tranforma en una pesadilla por el peso sobre mi pecho, el de la realidad. ¿Se dan cuenta la manera en la que hablo ahora? Son demasiadas cosas pasando en mi cabeza, y entre tantas cosas no puedo respirar. Agradezco que se hayan tomado el tiempo de cuidarme, de aceptar la responsabilidad de estar a cargo de alguien mal de la cabeza. Dios, aún me avergüenza cada cosa que hice y dije estando ahí. Los ataques, los berrinches, la forma tonta y caprichosa de comportarme con ustedes incluso después de saber lo que me pasaba, incluso después de saber quién era. Lamento tener que decirlo así, pero sí, yo lo sabía, desde hace un pequeño tiempo, sabía quién era, quién era mi madre y quién era Song. Sabía lo que estaba pasando pero mi egoísmo y cobardía ocultaron todo por la facilidad de mentir y fingir que todo era una tonta imaginación mía, que mi padre y mi hermano no estaban muertos,  que mi madre no me había abandonado y que Song no estaba mintiendo. Me rompí, me rompieron. Intenté buscar respuestas por mi mismo, pero aún así seguía sintiendo esa presión sobre mi pecho, que me quemaba desde adentro y dolía como el infierno. Ahora que decidí dejar todo, de olvidarlos, enfrentar mi verdadero camino y volver a ser quien soy en verdad, ese sentimiento, ese dolor, a dejado de estar ahí. Tal vez porque no pertenezco a su mundo. Agradezco su preocupación, pero ya no los necesito. Es tiempo de seguir adelante sin mirar atrás, como alguna vez me dijo Yoongi. Gracias NamJoon, pero eso que sé que sientes por mí ya no puede seguir ahí, lamento confundir las cosas de esa manera y jugar tan mal con lo que hiciste por mí, eso que sentí por ti alguna vez ahora se reduce a solo un sentimiento de agradecimiento y desearía con todo mi corazón que dejaras de asfixiarme tratándome como un bebé, no lo soy. No intenten buscarme, ni de llamar a Mark o a TaeHyung, yo lo haré por mi cuenta porque ellos pertenecen a mi vida anterior. Por último, dejaré este dibujo que mi yo de nueve años hizo, quizás ese SeokJin los apreció más que el SeokJin de veintiséis. Espero tengan una buena vida, y descuiden, todo lo que invirtieron en mi les será devuelto en esta semana a más tardar, por favor NamJoon, sé que eres el más interesado en buscarme, no lo hagas. No me lastimes más. De nuevo gracias, y adiós. KSJ.

Cuando terminó de leer elevó la vista dirigiendo primero su atención a Mark, este negó con la cabeza acercándose a su amigo y tomándolo de la mano le susurró algo al oído para luego marcharse en silencio, tal vez porque ellos no perdieron nada, al final, ellos terminaron ganando. Terminaron teniendo a su buen amigo SeokJin en sus vidas, yo solo tenía el recuerdo. Quizás ni siquiera eso.

–NamJoon, por favor no te tortures así.– habló Hoseok como leyendo mi mente, caminó hacia mí hasta arrodillarse en frente y tomar mis manos.– Por favor, nada de esto es tu culpa.

–¿Nam?– esta vez fue Jimin quien afianzó su agarré en mis hombros, abrazándome con cariño mientras reposaba su frente sobre mi hombro.– Estarás bien, por favor no vuelvas a cerrarte. No lo hagas...

No respondí. ¿Qué podría decir? Solo quería estar solo, tal vez llorar, tal vez culparme mucho y luego quizás dormir. Talvez, quizás, tal vez.

–Estoy bien.

No quería preocuparlos, no de nuevo. Esta vez sí estaría bien, por qué nadie me engaño, esta vez nadie se aprovechó de mí, está vez yo fui el que reposó sentimientos en otro que no fueron correspondidos. Se sentía igual de mal, pero era diferente la razón. Estaría bien, intentaría estarlo.

–NamJoon...– esta vez fue Yoongi el que tomó mi mano con preocupación.– Estás pálido. ¿Te sientes bien?

Mi cuerpo no estaba dispuesto a mentir. De pronto mi vista se tornó borrosa y mi labio inferior tembló un poco, baje aún más la mirada sintiendo cansado, triste. Negué suavemente ante la pregunta del pelinegro y tome una bocanada de aire antes de apartarlos de mi cuerpo, me levanté posando mis manos en mi cadera y subiendo la mirada hacia el techo intenté borrar las lágrimas, suspiré con resignación y solté una risita sin gracia para luego mirarlos.

–Esta bien, me siento triste y un poco enfermo pero nada que no pueda curarse con el tiempo. Ya sabes, es hora de mirar el futuro. El capítulo de Kim SeokJin ya de cerró y si él decidió irse por cuenta propia no podemos hacer nada. Además, tiene a Mark, a TaeHyung y una gran fortuna esperándolo. Nosotros sigamos con lo nuestro, la próxima semana volvemos a clases y no puedo perder más materias.

Nunca entendí esa maldita frase que decía que una mirada podía decir más que cualquier absurdo discurso, en mi mirada había desesperación y angustia, pero ellos vieron seguridad y un poco de tristeza, sus sonrisas fueron sinceras y el último abrazo del día fue reconfortante. Casi tanto como su sonrisa, casi.

***

1/5
Porque les debo mucho y las aprecio un mundo.

Maratón de cinco capítulos está semana porque desparecí dos. Además, estoy con muchas tareas ahora que volví y mis guardados las mantendrán vivas y vivos.

Los ano.
<3

(Subiré un cap cada una hora para que wattpad no enloquezca)